Dylan
—Lo hiciste sensacional—le dije a Patrick besándole el pecho—Extrañaba esto.
—Yo también nena.
Patrick me volvió a besar y tocar y yo sentí que no resistiría una vez más.
—Le dije a Hannah.
—Mjm—dijo Patrick besándome ahora los pechos y el vientre.
—Ella dice que está bien pero debería cortar con Mac.
Patrick paro de hacer lo que hacía y me dio un beso suave en los labios.
—¿Y lo harás?—acarició mi mejilla.
—No, claro que no, ¿Estas loco?—dije riendo—El es mi novio y tú y yo somos... Folliamigos.
Patrick me miro serio y luego siguió besándome los pechos y el vientre hasta llegar a la zona, nuevamente tuvimos sexo ese día.
Cuando terminamos, nos duchamos juntos y nos cambiamos, note a Patrick más distante.
—¿Qué pasa?—lo abracé por la espalda y le bese la nuca.
—Nada, no pasa nada.
Patrick se alejó de mí y sin despedirse se fue de mi casa, no entendía lo que acaban de pasar.
Sonó mi teléfono y para mi sorpresa era Mac.
—¡Bebé! Adivina quien estará en la ciudad en unas horas—me dijo al otro lado del teléfono.
—Bebé, ¡que sorpresa! Te haré tu cena favorita y como es fin de semana podrás quedarte a dormir porque mis padres están de viaje—dije mientras recogía toda evidencia de Patrick en mi habitación.
—Esta bien cariño, no sabes las ganas que tengo de verte.
—Ay bebé, ni te imaginas las mías.
Y así nos quedamos charlando unos minutos más hasta que tuvo que colgar, no me esperaba a Mac aquí tan pronto pero era lindo de su parte venir a verme.
Después de limpiar mi habitación de todo rastro de Patrick fui al centro comercial a comprarme algo nuevo de lencería, quería sorprender a Mac con algo sexy.
Entre a Victoria Secret y me di con la sorpresa que Megan y sus amigas estaban ahí, aunque, no me debería sorprender tanto, todas las chicas que venimos aquí por ropa interior sabíamos el porqué la comprábamos.
Mientras revisaba algunas bragas diminutas oí a Megan hablar de Hannah, se corria el rumor que Jake la había dejado por ella, pero Megan solo dijo que Jake tenía un capricho por Hannah y pronto volvería con ella. No pude evitar reír cuando oí eso, yo mejor que nadie sabía que Jake estaba enamorado de Hannah desde tercer grado, pero desde que ella se enamoró del idiota de Tate el había perdido las esperanzas.
Compre mis cosas y llame a Jake, si el estaba jugando con Hannah debía detenerlo hasta que no hubo mucho que esperar. Jake estaba en una florería comprando "dalias" las flores favoritas de Hannah.
Entre a la florería y lo sorprendí.
—¡Phelan!—grite de tras de él asustándolo.
—¿Por qué eres tan odiosa?—dijo Jake riéndose—¿Le gustan a tu amiga estás, no?
Lance una risa molesta y puse los ojos en blanco.
—Sabes muy bien su nombre, su música favorita, su color favorito, como se llamó su primera mascota, lo sabes todo Jake—dije más seria—Me resulta raro que después de tantos años aún estés enamorado de ella.
Jake me miro silencioso unos minutos y luego sonrió.
—Pues, un sentimiento así no se va.
—Pero no lo estás haciendo por ti. Lo haces por otra cosa y si me entero que solo la estás utilizando, sabes muy bien lo que puedo hacer.
Jake me miro serio y no dijo nada, él sabía bien que si yo abría mi boca, su título de "deportista estrella" no valdría nada.
Cuando salí de la plaza tome un taxi y fui a ver a Hannah, hoy pasaríamos el día juntas.
Cuando llegue a su casa y toque el timbre me tope con la sorpresa de ver a Kendall sin camisa y solo con una toalla enrollada en su cintura.
—Hola Dyl, ¿Vienes por Hannah?
—¿Vendría por ti acaso tonto?—entre a la casa y me senté en la sala—Se lindo y tráeme una botella de agua fría.
Kendall pasó frente a mi sin necesidad de cruzar hacia la cocina y me miro.
—Oí que Mac vendrá—dijo Kendall abriendo la nevera—Debes esté emocionada.
—Sino fuera así no me hubiera molestado en comprar ropa interior nueva.
Ambos nos quedamos callados y Kendall se aproximó a darme la botella de agua, al tomarla nuestros dedos rozaron.
—Deberías entrenar más, estás poniéndote blando—dije mirándolo de arriba abajo—Antes había más músculo.
Me paré del sofá y me fui a la habitación de Hannah, si seguía ahí era probable que Kendall recordara viejos tiempos y era mejor dejar todo en el pasado y sobre todo oculto de Hannah.
—Soy una zorra...—susurre
—Nah, tener novio y acostarte con tu mejor amigo no te vuelve zorra—dijo Hannah riendo antes de abrazarme—Oí lo de Mac.
Me reí y la abracé de vuelta, ¿acaso todos sabían que él volvía a la ciudad? Era extraño que todos me lo recordaran.
—Patrick se puso extraño hoy, se enojó parece—dije mientras me desvestía.
—Tal vez está enamorado de ti...
Cuando Hannah dijo eso me quede mirándola varios segundos.
—No, él no está enamorado de mi—cundo me quite la ropa interior y me probé mi nueva lencería, dude— ¿O si?
Hannah se encogió de hombros y siguió haciendo cosas en su laptop.
—Oí que Jake terminó con Megan—la mire y ella me regresó la mirada—También lo vi comprando Dalias.
—Ah de ser para su abuela muerta—dijo Hannah completamente desinteresada—¿Por qué me cuentas esto?
—Porque Jake Phelan quiere contigo.
—Pues que siga queriendo.
Hannah y yo no hablamos más sobre Jake el resto del día, ella dejó en claro que era un tema que prefería no tocar quien sabe porque, muy en el fondo sabía que a ella también le gustaba Jake, reconozco cuando a Hannah le gusta alguien, hace la maniobra Helga, ignorar y tratar mal al chico que le gusta hasta que esté de él primer paso.
Mac me llamo y me dijo que estaba fuera de la casa de Hannah esperando, me despedí de ella y baje las escaleras, antes de salir por la puerta Kendall me agarro de la cintura y me beso.
—Kendall—susurre alejándome de él—¿Qué te sucede?
Kendall me volvió a besar y esta vez le correspondí el beso, ambos extrañábamos esto.
Cuando Mac tocó el timbre nos separamos.Jake
Mire una y otra vez mi teléfono, llamar a Hannah o no llamarla, no sabía bien qué hacer. Kendall estaba en casa de Stephan jugando videojuegos y yo me encontraba fuera de la casa de ella.
Cuando decidí llamarla me di con la sorpresa que ella abrió la puerta.
—Hannah, hola.
—Jacob.
Me miro y puso sus manos en su cintura, era obvio que esperada una explicación.
—Traje esto para ti—detrás de mi saque las dalias y se las di.
—Gracias...
Hannah miro al suelo y sonrió un poco, no pude evitar sonreír también.
—¿Te gustaron?
—¿Qué pretendes?—me pregunto ella más seria—Hace tres días Megan era tu novia y tenían sexo en los armarios de limpieza y ahora estás en mi casa con flores portándote como si fueras un chico decente.
Mire a Hannah y sonreí amargamente, no es agradable oír tus verdades pero ella lo hizo ver como si fuera un cerdo.
—Me gustas, ¿Si? Quiero conocerte y salir contigo.
—Jake, no te creo—dijo Hannah mira dome sería—Celos y flores, todo es muy falso.
Y así me dejo, afuera de su casa, con mis flores de vuelta.
Caí en la cuenta que no sabes qué tan mala es tu reputación hasta que una persona te hace darte cuenta.
Cuando voltee mire a Tate, me miraba riéndose.
—Ahora todos quieren con mi chica, tú, el chico nuevo, tu amigo Logan—se acercó a mi y me empujó—Kendall y su regla, provocó esto, pero yo lo voy a acabar.
—¿De que hablas?—lo tome de la playera y lo levante.
—Que ni el imbecil de su hermano ni tú la van a poder proteger siempre, tengo asuntos pendientes con ella.
Lo solté y le di un puñete en la cara.
—Aléjate de ella.
—¿O sino que?—dijo riéndose.
—Que no se te olvide que se de que trabajas.