crazy and obsessive love "Billdip" (chicoxchico)

Parte 9

Confusos por lo veían, nuestro Bill, mostrando una expresión seria y a la vez enojada le respondió al segundo Bill -¿Y por qué no vas en busca de tu Dipper? Este es mío, por si no lo sabías o no te has dado cuenta.

El segundo Bill molesto por lo que decía el primero, pareció que se ponía en posición de combate, el primer Bill al ver esto, hizo lo mismo, parecía que ahí mismo iba a producirse un combate el cual solamente saldría uno.

Pero gracias a dios, el Dipper que estaba buscando el segundo Bill, apareció repentinamente sin darse cuenta de donde o en que se había metido, este Dipper era diferente al nuestro, este tenía parte ciervo y por otro humano, es decir, era una especie de centauro.

El Dipper que acababa de llegar con solo a ver visto a un Bill, dijo con un pequeño susurro -¡Mierda!

Después de decir esto salió huyendo, mientras que el segundo Bill fue a buscarlo diciendo -¡Oye espera! ¡Y tu, mi otro yo, ya arreglaremos cuentas! ¡Oye...!

Al irse los dos, todo se volvió silencioso, nuestro Bill no se veía perturbado por lo que había pasado mientras que Dipper todo lo contrario, justamente en el momento que se cruzaron con el otro Bill empezó a temblar tanto, que las piernas no podían ni sostenerle en pie.

Bill al fijarse en esto, sin previo aviso, puso a Dipper en su espalda, llevándolo así en caballito, Dipper al ver lo que hacía Bill, nervioso le dijo – ¡O-oye bájame! ¡Se andar! ¡¿Sabes?!

-Sip, lo sé, pero... estas temblando más que una gelatina ¿Crees que así podrás andar debidamente sin hacerte daño durante el camino? ¿Eh...?

Dipper, sin palabras se mantuvo callado y obedeció, ya empezaba a anochecer, es decir, era la hora de comenzar a montar la tienda de acampar. Dipper, que ya había logrado bajarse de la espalda de Bill, empezó a recoger leña y hojas secas para hacer fuego, mientras que Bill montaba la tienda.

El crear fuego no fue un problema, gracias a la magia de Bill y su habilidad de hacer fuego en sus manos. El tiempo restante antes de irse a dormir, se quedaron viendo el fuego.

Durante el tiempo que estuvieron mirando el fuego, Bill siguió al igual que esa mañana, es decir, cuando empezaron su camino hacia el mundo puertas. Seguía intentando de alguna forma interactuar una conversación con Dipper, pero en ese momento no parecía que tuviera muchas ganas de hablar.

Ahora no era solamente por lo que hizo Bill para molestarlo, sino que ahora parecía... que tenía miedo aunque fuera un poco... por lo que había podido detectar Bill en sus expresiones y gestos. Seguramente era por lo que había sucedido antes, al cruzarse con otro Bill y con su otro yo con ese aspecto tan extraño, lo más seguro es que lo hubiera perturbado una chispa al menos. O al menos era eso lo que pensaba Bill.

Este para animar a Dipper, como he dicho antes, intento hablar con él, pero no funciono. Así que decidió hacer una de sus típicas bromas, sabía que podría molestarlo aun más, pero a la vez sabía que probablemente mejorara el humor de Dipper y que este volviera con su típico valor que superaba su propio miedo.

Bill con la idea, bueno más bien la broma perfecta para molestar a Dipper, primeramente empezó a acercarse a Dipper, para luego mientras que este se había puesto nervioso y a la vez un poco incomodo, como estaba previsto, fue acercándose todavía más, hasta dejarlo en tal postura contra el suelo, la cual era muy vulnerable.

Cuando Bill hizo esto, no tomo en cuenta el amor obsesivo y loco que tenia hacia él, porque con solo verle la cara sonrojada y su rostro tan adorable que tenía en ese momento, sin darse cuenta de lo que hacía, empezó a acercarse de tal forma a Dipper, que acabo besándolo con un beso profundo (ya me entendéis 7w7) y poniendo sus manos en lugares prohibidos.