¡SE RECOMIENDA PRECAUNCION! ChicoxChico
En esta historia nos situaremos cuando Mabel y Dipper tienen 16 años, es decir, que han pasado tres años desde que ocurrió lo de Bill. Todos piensan que ha sido por fin mandado al olvido pero... la realidad es...
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Antes de leer:
Estos extras irán sobre los otros Bill y Dipper que iremos viendo a lo largo de la historia, no seáis más malpensados de lo que ya somos, y digo somos porque los que llegaron hasta aquí tienes que ser fujoshis y fundashis o gente que le gusta esta pareja de cabeza XD.
Bueno como decía, no os penséis que dejare así como así está la historia sin terminar todavía y como habéis podido ver, os he dejado ahí arriba un dibujo hecho por mí con el ratón del ordenador de Bill (ya que no tengo tableta grafica ToT) Espero que os guste =)
En este caso veremos al Bill que tiene a un Dipper mitad ciervo, que los vimos hará unos capítulos atrás, y ahora... ¡¡Comencemos!! >=D
Bill, con un rostro de preocupación y a la vez de molestia, gritaba -¡Dipper! ¡¿Dónde estás?! ¡Venga ya, no te he hecho nada para que quieras alejarte así de mí!- Después de decir esto escucho como un pequeño estornudo, parecido al de un gatito, el cual podría distinguir de quien era.
Con un rostro y un tono travieso, siguió diciendo -¡Mira Dipper, sino sales ahora...! ¿Tendré que ir yo a por ti? ¡No te pienses que de mí siempre podrás esconderte, da igual donde estés siempre te encontrare, así que sal... y hare como si nada de esto hubiera pasado!
Al decir esto, Dipper salió de detrás de unos arbustos, donde estaba escondido, al salir mostraba en su rostro miedo mas tenía sus cuatro patas de ciervo temblando como gelatina.
Bill al ver la rendición de Dipper ante su amenaza, una sonrisa maliciosa empezó a aparecer en su rostro, más lentamente fue acercándose a Dipper, ya de frente a frente, solamente separados por unos centímetros, con ironía y aun con su sonrisa le dio un pequeño beso en los labios mas luego, dijo – Bien hecho, mi adorable mascota fu, fu...
Molesto, contesto -¡Ya te dije que no soy ninguna mascota!
-Ya, ya, lo sé, bueno venga, vámonos a casa, necesitas un castigo por escapar ¿No crees?
-¡E-espera! ¡D-dijiste q-que si salía harías como si esto nunca hubiera pasado! ¡Es decir, no debería haber castigo!
-¡Ha, ha...! ¡Era una broma! Bueno, pero ahora si vámonos, es casi la hora de cenar y me toca prepararte tu ensalada.
-Um... Está bien... ¿Nos vamos andando? ¿No vamos a ir volando como siempre?
-No, hoy no estoy de humor, además sino andas ¡Vas a engordar! ¡Ha, ha!
-¡Oye, no estoy gordo ni estoy engordando! ¡Más bien parece que estoy más flaco de lo que estaba cuando me trajiste aquí hace un año atrás!
-Hombre eso es normal, no parabas de intentar al principio de que llegaras aquí escapar de cualquier forma y aun ahora, lo sigues intentando aunque en menor grado.
