Serás Mi Luz (segunda temporada de Seré Tu Sombra)

ADELANTO!!!

Sinopsis

Amor

Odio

Dos caras de una misma moneda.

Cuando era pequeña un compañero de jardín me tiro del pelo y yo le devolví un golpe en la cara.

Me dijeron que a los niños usaban ese método cuando le gustaba una niña. A diferencia de ellos nosotras usamos la indiferencia.

Levantamos murallas y esperamos a que legue el indicado para bajarlas, y si somos los suficientemente tontas para no darnos cuenta ellos logran derrumbarlas.

¿Pero qué pasa cuando el que tiene la muralla es él?

Bueno, estoy a punto de averiguarlo.

La contradicción en el amor es algo inevitable y se observa en casi todas las relaciones, sin necesidad de que sean tormentosas.

Capitulo 1

Jay tomo mi mano, podía sentir como le sudaban y eso me estaba dando asco. Hice lo que pude para que no se notara y coloque una sonrisa en mi rostro, pero aun así seguí buscando la manera de que me soltara. Recordé la técnica que Yesica me había enseñado, comencé a mover mi mano como si un insecto estuviera atacándome

-¿Qué haces? -pregunto algo confundido

-un insecto, ¿no lo ves? -me solté de ambas manos pero en el último movimiento mi cabello se había salido de mi semi recogido cayendo como cascada sobre mi rostro, intente volver acomodarlo pero su mano detuvo la mía.

-déjame a mi -susurro por lo bajo.

¡Oh mi dios! Estaba por hacer un movimiento y no había forma de impedírselo sin hacerlo sentir mal. Colocó mi pelo detrás de mi oreja y luego su mano quedo apoyada en mi mejilla, me estaba dando su famosa mirada, esa por las que todas morían. Todas menos yo, ¿Por qué acepte salir con él?

Porque Yesica te insistió, fue la respuesta. Y la verdad es que no había razón alguna para rechazarlo. En el status social en que yo me movía el era un buen partido, había miles de chicas que matarían por estar en mi lugar en este momento, frente a Jay Simons el mejor corredor de la escuela y a punto de ser besada

Pero yo no. ¿Dónde estaba mi papá o mi hermano para impedirlo? Cerré los ojos rogando que el momento pasara rápido. El se había comportado bien en toda la cita, me abrió la puerta del auto, corrió la silla para mí, me dejo elegir el sabor de la pizza e incluso se negó a que pagara la mitad de la cena. Pero a pesar de todos esos detalles no lograba moverme un pelo, incluso me parecía aburrido.

Me quede esperando el beso menos deseado en la historia de los besos pero al ver que nada ocurría abrí mis ojos. Jay ya no se encontraba parado frente a mí, estaba parado en la puerta de su auto intentando abrirla -te llamo luego Zoe, la pase genial

Una risa llamo mi atención, no me sorprendí cuando vi a mi papá parado en la entrada, no era la primera vez que lo hacía, pero esta vez se lucio con su nuevo método "espantemos a las citas de Zoe", con el torso desnudo y su antigua mascara del Ángel Negro lucia en verdad intimidante.