Capítulo 6

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—Camz.— susurró Lauren a su lado.

Dormían en la antigua habitación de Camila, la castaña tenía un sueño pesado, y Lauren no podía dormir.

—¿Estas despierta?.— pregunto Lauren, no obtuvo respuesta y se levantó de la cama.

Salió de la habitación y llegó a la sala, su atención fue hacia una foto en un estante, junto a la televisión. Levanto el marco y sonrió al ver una imagen familiar, Sinu y Alejandro con Sofia y Camila, Sofi tendría unos 2 años, y Camila unos 10 u 11 años.

Se preguntaba si su hija tendría un parecido con ella, esperaba que si, realmente quería tener una mini versión de su esposa en casa.

Escucho pisadas provenientes de las escaleras, dejo la fotografía y se giró para ver a la persona.

—¿Despierta a esta hora?.— pregunto Alejandro.

—No puedo dormir.— respondió sin ganas.

—Un vaso de leche te ayudará.— le sonrió y fue a la cocina.

La ojiverde no muy convencida con los métodos de dormir de su suegro, para niños, camino detrás de él.

Se sentó en el banco junto a la mesa.

—Aqui tienes.— le dio un vaso con el líquido blanco.

—Gracias.— asintió y bebió.

—Ahora me dirás qué haces despierta a esta hora.— cruzó sus brazos en su pecho, mirándola expectante.

—Bueno, en realidad....necesitaba pensar un poco.— se encogió en su lugar.

No segura de hablar sobre el tema con el padre de su esposa.

—¿Tiene algo que ver con Camila?.— pregunto, acertando.

—No quiero hacer o decir algo incorrecto

—No te preocupes, puedo entenderte.

Suspiró y bajo la cabeza.

—Hace unos meses a Camz le dieron trabajo en una universidad en New York, y está bien porque ahora con su sueldo y mis ganancias con las pinturas nos mantenemos estables. Pero....a decir verdad, extraño estar aquí.— sacudió su cabello.— Camz tiene un trabajo estable ahora y si le digo que quiero regresar aquí...no se como lo tomará, no tenemos suficiente dinero para rentar otro departamento o...una casa. Ahora que Camz está embarazada y no sólo será un Cabello, serán dos y en el departamento no tenemos espacio, realmente quiero que los tres estén cómodos.— sus ojos picaban, los talló con sus manos y no miró a Alejandro en ningún momento.

—Lauren.— le llamó tranquilamente.— Camila no se enojará o te odiara por tomar una decisión así. Ella también quiere que tu estés cómoda con esto, si hablas con ella sé que te entenderá.

—No quiero que se sienta presionada con esto, está lidiando mucho con lo del embarazo que yo...

—Tu también estás lidiando con ello, sé por lo que estás pasando justo ahora. Sinu también tenía su carácter cuando Camila venía en camino, y yo era quien recibía todo. Así que dile como te sientes y trata de llevarlo con calma, sólo unos meses más y creeme....que serás más que feliz.

Sonrió mostrando los dientes y Alejandro frotó su brazo en forma de apoyo. Terminó su vaso de leche y subió a la habitación de la morena, para seguir durmiendo y protegerla por la noche.

Considerando la idea de hablar con la castaña sobre volver a Miami, sin embargo aún tenía dudas. En New York ganaban bien, el señor Lefier les ayudaba y Camila tenía un trabajo estable y que le gustaba.

«Nuestro Pequeño Secreto»[2da Tem. La Nerd]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora