—¿a dónde irás? —preguntó Louis.
—Iré por mis cosas a casa de.. Anne. –empecé a colocarme mis zapatos.
Si mamá realmente quería que me fuera de su vida, me iría.
—No creo que eso haga falta... —dijo Louis mientras observaba por su ventana como mamá aventaba mis cosas hacia la puerta de su casa.
Empecé a correr escaleras abajo, tropecé pero por suerte no caí, alcance la puerta con rapidez y salí.
—¡MAMÁ DETENTE! —corrí hacia ella. —Te amo. —le dije mientras seguía corriendo hacia su auto.
—¡YO NO SOY TÚ MADRE! —empezó a llorar. —¡MI HIJO NO ES UN MARICA! —escupió por la ventana mientras colocaba en marcha su auto móvil.
Empecé a correr en vano detrás de ella, esperando que se detuviera.
Corrí un par de calles hasta que el auto de mamá se desvaneció de mi vista.
Caí de rodillas, mi corazón dolía, mi pecho se cerraba mientras rompí llanto.Unos brazos pasaron por mi espalda hasta cubrir mi pecho en un abrazo.
—¡No llores! —La voz de Louis sonaba nerviosa... —No llores.. –murmuró mientras sus lágrimas empezaron a empapar mi hombro.
—Louis... mamá no me quiere.. —observe el césped, las lágrimas caían cada vez más rápido.
—¡No digas eso! Anne te adora cariño... solo que.. está confundida. —hundió su cabeza en mi hombro.
Me quede allí por un tiempo, mientras pensaba que haría con mi vida.
—Louis.. —murmuré, intente colocarme de pie un poco, mis pies empezaban a acalambrarse.
—Sí, lo siento. —Se colocó de pie y me ayudó a levantarme.
No me sentía para nada bien y realmente necesitaba un tiempo a solas.
—Lou iré a caminar. —subí la cerradura de mi abrigo.
—Voy contigo. —dio un paso al frente.
—No... necesito ir solo. Por favor. —agache la cabeza.
—Está bien... –su voz sonaba algo dudosa. —Promete cuidarte. –peino un poco mi cabello.
—Prometo cuidarme. –respondí.
Sonrío mientras caminaba de vuelta atrás, suspire pesadamente mientras caminaba a no sé qué lugar.
Todo lo que conocía de mi yo interior se estaba desvaneciendo.
Trague una bocana de aire intentando no recordar cuál era mi situación actual.
Camine mucho, mis pies empezaban a doler, y el sudor empezaba a bajar por mi espalda.Empecé a correr mientras las lágrimas brotaban de mis ojos y en cuestión de una hora estaba en un lugar desconocido.
Mis pies dolían; temblaban, mis ojos ardían y la respiración me faltaba demasiado, me deje caer sobre el césped a orillas de una carretera, no sabía que hacer y ya empezaba a oscurecer.
Seque mi frente mientras pasaba mi mano sobre mi cabello rodándolo hacia atrás, tragaba exageradamente bocanadas de aire.
Mire de reojo, un tipo se sentó a unos centímetros de mi mientras presionaba sigilosamente un botón sobre su muñeca.
Trague saliva con fuerza, me coloqué de pie, sentí como su mirada se posaba sobre mi con pesadez, empecé a correr, él empezó a seguirme, estaba algo asustado, corría con la mirada gacha con las esperanzas de llegar a un lugar seguro.Tropecé bruscamente con alguien, ese alguien me apretó con fuerzas mientras la personas que venía siguiéndome tuvo la oportunidad de agarrar mis manos detrás de mi, sentía una presión en la cabeza e intentaba recobrar el aliento.
—Por fin te tengo cerca. —su aliento chocó contra mi oído, mi cuerpo tembló, reconocía esa a voz.
—Hansel. —cerré mis ojos con fuerza.
—Así es mi amor...: —sus labios me besaron la mejilla.
Sentía repulsión, deseaba con todas mis fuerzas que Louis estuviera aquí.
—¡QUITA TUS ASQUEROSAS MANOS DE MI BEBÉ! —mi corazón bombeo con fuerza, el en ningún momento me había dejado solo.
Todos giraron en sincronización hacia el dueño de esa chillona voz, sus mejillas estaban coloradas y estaba sudando, seguramente había corrido hacia acá.
—¡ES MÍO! —Hansel tiro de mi hacia el con fiereza.
—¡SUÉLTALO! —intentó acercarse.
—¡Ni un paso más! —sacó una arma de su bolsillo.
La apuntó hacia dónde Louis.
Empecé a temblar.
—Adelante hazlo. —Louis río con ironía.
—Lo haré sin dudarlo, enano. —cargó suavemente la arma.
La apunto y pocos segundos después se había escuchado el tiro, que gracias a mi fue lanzado a otro lugar, mi cuerpo estaba sobre el de Hansel, girando cuesta a bajo sobre lo que al parecer era una especie de precipicio.
•Louis POV'S•
Mi corazón se aceleró, Harry había caído, corrí con cuidado, vi su cuerpo golpear unas rocas y caer hacia no sé qué lugar.
La presión que estaba sobre mi pecho era terrible, me aproximé a la punta; Hansel se había agarrado a un árbol.
—¡MATASTE A HARRY! —empecé a llorar.
—¡MUÉRETE CON ÉL! —me escupió en la cara mientras caminaba cuesta arriba.
Tenía ganas de golpearle pero no tuve el valor, estaba lo suficientemente preocupado por Hazza.
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.–Aún no han encontrado el cuerpo de Harry. —Anne tenía las lágrimas en los bordes de sus ojos, ya hace días nos habíamos enterado de la muerte de HARRY.
La muerte, porque era casi imposible salvarse de allí, aún así, los rescatistas no se sumergían lo suficiente para buscar a mi bebé.
Mis ojos dolían de tanto llorar y no había comido ni una cucharada de algo durante 4 días, mi corazón estaba quebrado y me culpaba a mi mismo, jamás lo debí dejar ir solo, llegue muy tarde.
Jale un poco de mi cabello y me deje caer con brusquedad sobre el sofá.
—Hasta pronto. —Anne hablo con una voz temblorosa, su mirada estaba gacha y sus ojos al igual de rojos.
Gemma no se atrevía ni a hablar. Todos estábamos demasiado deprimidos, hasta su ex amiga había venido aquí.
Esperaba muchas cosas, quería tantas cosas con él, pero es que realmente no sé cómo la vida pudo desprenderlo de esa forma tan cruel de mi.
La vida te da y te quita, la vida jamás es lo suficientemente buena o lo suficientemente mala, pero conmigo, fue un trago amargo de la mala.
Quizás el se marchó al cielo, porque para mí era un ángel.
Espero poderle ver, en las otras vidas y seguirle amando con la intensidad de miles de galaxias, estar con él aunque fuera por sueños era mi única esperanza.