Era de día. El sol brillaba y sus rayos iluminaban el rostro de una chica cuyos ojos celeste se mostraban poco a poco. También iluminaba el cabello más rojizo de París o lo que quedaba del país.
La peliazul se levantó y bajó a la/cocina destruida. Necesitaba comer algo pero la/comida se había descompuesto.—Rayos... ¿Qué haré?— Puso una mano en su cintura y con la otra se tocaba el labio inferior.
—Puedes sacar algo de la tienda en ruinas. No sería robar porque no tarda en descomponerse— Una criatura color naranja bajaba volando hasta acercarse a su nueva amiga. Era un zorrito travieso y astuto si me lo permiten decir.
—T-tal vez tengas razón. Debería avisar a Tikki y Nathaniel.
—Descuida, dejé una nota.
Marinette lo observó un momento y acarició su pequeña cabeza. —De acuerdo, vamos rápido— Sonrió y salió de... Lo que se supone que es una casa semidestruida.
Caminó un rato platicando con Austin para conocer más al zorrito hasta que llegó a la tienda abandonada. Vidrios rotos, oscuridad, cenizas y muebles tirados. Entró por un enorme agujero que yacía a un costado de la puerta del cristal roto y apoyándose de la poca luz que entraba, encontró comida enlatada.
—Llevaré comida conservada para que dure un poco más— Dijo al zorro.
—¿Marinette?
La peliazul brincó del susto y retrocedió tropezándose con un mueble destruido haciendo que cayera de espaldas. Afortunadamente metió manos pero se encajó varios vidrios y metales en las palmas de la mano.
—¡¡¿Ch-Chat?!!— Su voz temblaba.
Intentando reconocer al rostro que se iba acercando poco a poco, supo que no era Chat Blanc. No había orejas, cola o silueta de un bastón aunque debía admitirlo, la voz era idéntica.
—¡¡Lo siento, Marinette!! ¡No quería asustarte! Por el amor de Dios ¿Te encuentras bien?— Adrien lucía preocupado. Claro que lo estaba, la chica que le gustaba se había lastimado gracias a él.—¿A-Adrien? Que gusto verte... Pensé que...— No terminó la frase. No quería terminarla. Se limitó a bajar la mirada y revisar su mano derecha.
El rubio le tendió la mano y la ayudó a levantarse.—G-gracias... Y-yo— La interrumpió con un abrazo cálido y un beso en los labios. El corazón de la peliazul se le aceleró pero no se separó. Adrien estaba bien.
Cuando el chico se separó, pegó su frente a la de ella y puso una mano en su cuello presionando ligeramente.—Tu corazón se aceleró— Sonrió el ojiverde que ahora la/veía/directamente a los ojos. La peliazul se sonrojó e intentó bajar la cabeza/pero él no se lo permitió. Con una mano en la barbilla de la ojiazul, le decía tantas cosas con la mirada.
—Marinette... Me tenías preocupado— Dijo —No supe nada de ti después del secuestro de Lordfox.
—T-tu... ¿Estuviste en la alianza?
El rubio se sentía culpable. Chat Blanc la había secuestrado pero el zorro astuto la salvó. El de la culpa era él. De Agreste.
—No. Pero presencié la batalla entre Ladybug y Chat No— Se interrumpió y cambió rápido —¿Porqué te enamoraste de él?
La pregunta tomó por sorpresa a la peliazul y puso los ojos en blanco. Eso había sido demasiado directo —Y-yo no lo sé... Pero antes de él.. Y-yo... Es decir... T-tu cautivabas m-mi corazón.
Adrien pegó sus labios a los de la chica y susurró —Debí saberlo— Para después continuar. Eso provocó un escalofrío a la chica que no sabía si debía retirarse o seguir con eso. Tenía que llevar comida para Nath y Tikki también. Sin pensarlo demasiado, puso sus manos en el pecho del rubio. Lo iba a empujar un poco hasta separar sus labios; Sin embargo, el chico la tomó por la cintura y pegó su cuerpo al de ella. Marinette no resistió y continuó.
Un beso largo, cálido y profundo. Uno que gritaba el amor que sentían ambos y el placer de poder estar juntos. No pensaban en otra cosa que no fuera en ellos. Olvidaron absolutamente todo.
Con los rostros encendidos, Adrien deslizaba sus manos. Una seguía en la cintura de la chica pero la otra había subido por el brazo hasta su mejilla. En cambio, la peliazul lo tenía abrazado con ambas manos bajo su camina, en la espalda desnuda.
A ambos les faltaba aire, pero el momento no paraba. Era como si respirar no fuera importante. Querían seguir juntos. Cuando no pudieron más, Marinette mordió delicadamente el labio inferior del rubio, que soltó un gemido pequeñovy se separaron jadeando como si hubieran corrido diez kilómetros sin parar.
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¿Francia Por Amor O Amor Por Francia? [Terminada]
FanficEs una historia basada en el romance "Marichat" Pero... ¿Qué pasaría si un día Hawkmoth tiene el control total sobre alguno de nuestros héroes enamorados? Ésta es una historia de amor con muchas complicaciones que jamás habrían pasado a mayores de n...