La Aventura de mi Vida

Capítulo 4 parte 2: "La fiesta de Mel."

Estoy en la puerta de la casa de Mel, y aún ni siquiera raspé la bicicleta de mi hermano. Lo peor que podría pasar es que caiga y me raspé las rodillas. Agarro el teléfono y la llamo.
*Llamada telefónica:*
-Hola Leilani.
1) Me responde con voz molesta, 2) Me llamó por mi nombre entero. Ambas muy malas señales.
-Hola Mel, necesito que me escuches.
-Lo hago.
-Necesito que te bañes y cambies muy bonita.
-¿Se puede saber por qué?
-No, pero pronto lo sabrás.
-Ok.
Mientras hablábamos até el "vehículo" a la reja con una linga y crucé la calle.
-¿Me abres?-le pregunto aún por teléfono.
-¿Cómo?
-Que me abras la puerta, por favor.
*Fin llamada telefónica.*
Por un segundo creí que no lo haría, pero la abrió y salió corriendo hacia la ducha.
Mientras se bañaba, desbloqueé el celular y llamé a Matt.
*Llamada telefónica:*
-Lei, hola. ¿Me estrellaste la bici nueva y debo ir al hospital porque te arrolló un camión?
-NO. Necesito que me hagas un favor, llama a todas las personas de la lista de mi curso e invítalas a la fiesta. Salvo a los que estén tachados en rojo.
-Bueno, pero luego me explicas por que están tachadas y qué te hicieron.
-VieneMelchau.-contesto rápido y corto la llamada.
*Fin llamada telefónica.*
-Lei, ¿con qué ropa me visto? No eres muy buena dando indicaciones.
-Ya voy.
Me levanto del muy cómodo sillón y voy hacia la habitación. Rebusco en el armario y le tiro a la cama una remera corta oscura con una chaqueta de cuero blanca y unos jeans negros.
Mira el conjunto insegura y le digo que no se preocupe y se lo ponga, que cuando termine venga conmigo que la espero.
Antes de salir le cepillo el pelo y dejo que se maquille. Salgo de la casa y veo a Matt apoyado sobre la puerta de reja.
-No te voy a permitir que te mates, ni que mates a Mel por ir en una misma bicicleta las dos, vayan a la esquina que mamá las espera en el auto.
Llega Mel vestida y le digo a través de la ventana que se siente atrás, luego me las ingenio para atarle los ojos con una venda negra que saqué de su closet .
-¿Me dicen a dónde vamos a ir?
-NO.-le respondo.
-Esto cuenta como secuestro.
-Estas haciéndolo a voluntad, no es secuestroo.
Mi hermano (quién se fue a la fiesta en su preciada bicicleta) se adelanta para recibir a los invitados. Cuando mi mamá estaciona le saco el pañuelo y la guío hasta la fiesta.
-Leilani.
-¿Si?
-¿Por qué hay música?
No le respondo pero la meto en el bar, todos salen de sus escondites y gritan:
"¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS MELISSA!!!"
Se da vuelta y estamos Matt y yo esperando su reacción. Veo que se acerca a nosotros y por un segundo creo que nos va a abrazar pero no... ¡Por lo visto yo no soy digna de un abrazo, pero mi hermano si! Ja, ya va a ver.
-Hey. Yo fui la que organizó todo esto.-le digo "enojada" señalando todo el lugar.
-Perdón, muchas muchas gracias. Eres la mejor amiga del mundo.
-¡¡¡A DIVERTIRSE!!!- grita alguien que no identifico, pero meh, a nadie le importa.
Pasamos toda la noche bailando, celebrado, hay que admitirlo tomando un poco, etc. Todo iba de 10, hasta que aparece un policía de semblante serio. Todos nos miramos preocupados, entonces me acerco.
-Nosotros no hicimos nada malo.
-Lo sé. Lamento ser una interrupción pero le tengo que comunicar algo importante a unas personas.
-¿A quiénes?
-A...-revisa un papel arrugado- Leilani y Matthew Mellon.
-Soy yo.-mi corazón comienza a palpitar mas rápido de lo normal. Mi hermano y Mel se acercan para ver que está pasando.
-Si quiere ellos dos se pueden quedar como apoyo.
-Está bien. ¿Por qué querría apoyo?-me doy vuelta y les digo a todos que siga con lo suyo porque eran temas de papeles.-Sígame.-lo guío a la terraza del lugar con mesas. Raramente hace mucho frío.
-Les comentaba, al no ser mayor de edad ninguno de los dos, quedan al cuidado de su único pariente en vida, Liverus Moon, él es su tío materno.-¿Cómo? Imposible, tiene que ser un broma pesada, muy muy pesada.
-¡¿Cómo?! No, eso es imposible. Mi madre está en casa, la ví hace un rato. Mi padre está en la oficina.
-Difícil y doloroso de creer, señorita Mellon. Pero sus padres murieron en el día de la fecha. Fueron asesinados.-rompo en llanto, no era una broma. Mi hermano trata de hacerse el fuerte abrazando y consolándome pero no aguanta mucho en ese personaje. Es poco decir que estamos devastados.... Y huérfanos también.
-Lei, perdón...
-No tienes por qué Mel.
-¡Sí! ¡Si yo no hubiera cumplido años hoy, ellos estarían vivos! Y ustedes con ellos cenando tranquilos.-dice llorando.
-En eso se equivoca.-interviene el policía.-Si ellos no hubieran estado aquí, hubieran muerto también. Los salvó de una aterradora muerte. El hombre murió a causa de cinco mordidas de una serpiente cuyo veneno aún no conocemos, pero estamos en conocimiento de que es muy mortífero. Por otro lado, la mujer sufrió más ya que murió por múltiples cortes en su cuerpo. Si de algún modo soy capaz de ayudar, llámenme. Mi nombre es Sean Rescroff, soy oficial de policía.-se despide con el mismo tono monótono y comienza a bajar las escaleras.
-Señor, ¿esta noche dónde duermo?-le pregunto.
-En el departamento de su hermano estará segura por ahora, se quedará allí hasta que se realicen los papeles.
-¿Podría dar finalizada la fiesta abajo?-le pregunta Mel con la voz tomada.
-Claro que si.-nos mira a Matt y a mí- Ustedes váyanse y que aún nadie se entere del deceso de sus padres.
Los tres asentimos con la cabeza sin hablar y mirando por el balcón la ciudad que no se detiene, y tampoco se preocupa por la vida de las personas que la habitan. Cuando la música deja de oírse, bajamos y salimos del edificio, pero en la puerta algo nos interrumpe el camino.