Esta es la historia de Leilani, una joven de 15 años que sufre un giro de 180° cuando como, por arte de magia consigue habitar el mundo del que desde pequeña leyó, pero un peso recae en sus hombros cuando descubre que deberá salvar a aquellos inocen...
-¡Leilani! Ven ya mismo a ordenar este desastre. -Mamá, ¡estoy viendo televisión! Además yo ya ordené mis cosas. -No mientas. Todo lo que está tirado es tuyo, el que ya ordenó es tu hermano. No me queda otra. Si voy en este instante, puedo terminar antes de que vuelva la película. Y si no, puedo raptar a los actores para que la representen, eso sería muchísimo mejor. Abro la puerta de mi habitación, es demasiado lo que tengo que ordenar y no tengo ganas. Me acerco a mi armario y lo empujo contra el suelo, cuando se cae coloco mi pie debajo y... -¿¡Qué fue ese ruido!?-pregunta mi mamá preocupada, hora de actuar. -Intenté acomodar mis libros, para eso tenía que colgarme del armario y me caí. ¡Ahora me duele muchísimo el tobillo!-me sujeto el tobillo con ambas manos y comienzo a "llorar". Una vez que bajo las escaleras me siento en el sofá y retomo la película. Esto es genial, gracias a que me "lastimé" el tobillo, ahora mi hermano pequeño es quien debe ordenar. Llamo a mi mejor amiga para saber si puedo ir a dormir a su casa. *Llamada* -¿Qué pasa Lei? -¿Puedo ir a dormir a tu casa?-pregunto con voz de niña. -Okay. Te espero. *Fin llamada.* -¡Me voy a la casa de Mel!-le aviso a mi mamá gritando para que me pueda escuchar. -¿Con el tobillo golpeado? -Sí, además en su casa no hay escaleras. -Bien. Nos vemos mañana. -Claro. ¡Adiós! Te quiero.-recojo las llaves, y en una mochila guardo mi pijama y un par de cosas saladas para comer. Salgo de la casa caminando tranquilamente y de la nada siento un golpe y un tironeo, al voltear me doy cuenta de que me quieren robar la mochila. Empujo a la persona lo más fuerte posible y corro a toda velocidad hasta la casa de Melissa. Golpeo la puerta ansiosa de entrar y me abre la madre. -Buenos días.-la saludo e ingreso a la casa. -Hola Lei.-en su casa hace frío como de costumbre. -¡Ven Lani! Están pasando una película genial.-me llama Mel desde su habitación. En un segundo ya estamos ambas comiendo papas fritas en su cama viendo la televisión. Cuando termina, le comento que me intentaron quitar el bolso y que tengo el tobillo supuestamente roto. Así continuamos hablando hasta que se hace la noche.
----------------------------------------------------------- Les presento a Leilani:
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Y a Melissa:
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
