Tía Elroy:
Candy me llamó desde el yate, urge que vaya usted hasta allá, Patty la está esperando en el portal de la mansión junto con Fred, el chofer de mi padre; para que no se alarmen los Duff tiene que seguirnos la corriente, Archie y Stear sólo están actuando, no ha pasado nada, sólo es un poco de barro y maquillaje, todo está muy bien. Al parecer Candy y Albert tienen algo importante que informarle. No se preocupe por los Duff, ellos la animarán para ir a resolver "mi" problema.
Le deseamos suerte.
Sus sobrinos.
- No puede ser cierto – puso cara de asombro la señora Elroy.
- Lo sé tía abuela, mi padre se enfurecerá si lo sabe, debe hacer algo – le pidió la morena mostrando una lágrima más.
- Pero hija, ahorita no puedo hacer nada – le siguió la corriente la anciana.
- Se lo suplico, mi padre podría hasta matar a Archie – le imploró.
- No hija, no lo puedo hacer, tengo visitas importantes – decidió probar esa posibilidad.
- Ve con tu sobrina Elroy, nosotros nos quedaremos a descansar – propuso Margaret preocupada por las acciones que se suscitaban.
- Pero Margaret no puedo descuidarlos, han venido desde Europa y cómo les voy abandonar de buenas a primeras – rebatió la señora Elroy.
- No nos moveremos de aquí, así que ve y haz todo lo posible por tu sobrina – le pidió encarecidamente Henry tomándole la mano y cubriéndola con la suya.
- Gracias, tía abuela ¿nos vamos? – preguntó Annie tomando la otra mano.
- Sí, vamos. ¿Qué está sucediendo? – preguntó Elroy cuando ya iban llegando al portal de la mansión.
- No lo se tía abuela, pero no se nos ocurrió otra cosa, lo siento – se disculpó la morena.
- ¿Llegaremos pronto? – preguntó de nueva cuenta.
- Pues una lancha está esperándola en la costa, la llevarán al yate, al parecer Candy tendrá una reunión con varias personas, se le oía algo preocupada – refirió Annie.
- Está bien Annie y dime ¿cómo has estado? – le preguntó conservando la calma.
- Bien tía abuela, por lo contrario de lo que usted vio, Archie y yo ya estamos hablando de matrimonio – le sonrió dulcemente.
- ¿En verdad mi niña? Qué bueno y no sabes de Patty – quiso saber de la castaña.
- Ahorita le contará una buena noticia – le informó sonriente.
- ¿Qué noticia? – inquirió ella curiosa.
- Stear me pidió ser su novia, tía abuela, ¿no le da gusto? – comentó Patty que corrió a alcanzarlas.
- Claro que sí, señorita O'brian – la abrazó por la nueva noticia.
- Disculpe mi efusividad – dijo apenada.
- No te preocupes Patty, ya era hora, Stear nos daba muchas largas – comentó soltando una risilla.
- Lo sé – rodó los ojos.
Pasó un buen tiempo hasta que las chicas la despidieron en la costa, justo en el embarcadero Annie abrazo a Patty por el éxito de su plan, comunicándose con Dorothy para darle indicaciones sobre los Duff. Después junto con su amiga, abordaron el auto y le indicaron a Fred que las llevara a su casa. Mientras Stear y Archie las acompañaron y contaron los rostros que tenían Henry y Margaret cuando la tía abuela y Annie habían salido, el sermón de que entre hermanos no se deben de pelear.
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Un amor que no entiende de pasiones
RomanceESTA HISTORIA COMO LAS ENCONTRADAS EN MI PERFIL SON DE MI TOTAL AUTORIA, NO DE DOMINIO PUBLICO COMO ESTA ESTIPULADO, SI HAY ALGUNA DUDA, PUEDEN CONTACTARME Él, un millonario desde el nacimiento. Ella una hermosa y sencilla doctora. Él un Don Juan ha...