El Hilo Rojo

Capitulo 21: Si...

Ya pasó un mes desde mi primer control, ya tengo tres meses de embarazo, y mi panza comienza a notarse y lo peor es que aún no encuentro el momento para contárselo a mis padres.

Las cosas con Austin mejoraron, no somos mejores amigos, pero podemos entablar una conversación normal, he faltado estos días al café porque me he sentido mal últimamente y el ha sido muy atento conmigo.

Matthew... Pues, el no ha dejado de llamarme desde aquel día, tampoco me siento con valor de hablar con el, pero se que es cuestión de tiempo para que suceda.

Mi embarazo ha fortalecido la unión con mis amigos, pero muchísimo más con Parker, en el Instituto no me deja sola ni un momento, y es algo que agradezco, su presencia logra mantener a Matt a raya.

-¡Maddie! ¡Apresúrate, no tenemos toda la noche!- Gritó Liz desde su auto.

Le di una mirada de fastidio y mientras atravesaba el pórtico aminoré el paso para provocarla.

-¡Muy graciosa, vamos apresúrate!- Dijo, pero esta vez si estaba molesta... El plan había funcionado.

Volviendo a caminar normalmente, llegué al auto y subí al asiento trasero. Mis mejores amigas y yo tendríamos una noche de chicas.

***

Llegamos a un lindo bar, ambientado de forma juvenil, bordeaba el estilo vintage de los 50's pero el toque moderno que le daba la tecnología lo acoplaba a la perfección con esta época. Tomamos asiento en una de las mesas laterales.

-¿Hace cuánto no salíamos las tres solas?- preguntó Ann.

-Emm... Desde que Maddie nos traicionó y se fue con Vega...- Respondió Liz, demasiado franca para mi gusto, pero no dejaré que eso me amarge.

Hice una cara de sorpresa y fingiendo estar dolida, colocando una mano en mi pecho, ya saben, si hay que ser drama queen hay que serlo bien.

-¡Perdón!- dije sin quitar la mano de mi pecho- Si aún sigues con eso, te recuerdo que ese día estábamos de aniversario, y bien lo sabías, por más que haya sido un imbécil en ese entonces no lo había demostrado, y no lo iba a dejar con todo preparado.- me defendí.

Ambas fruncieron el ceño ante mi respuesta. Y luego de un silencio incómodo Annabelle habló.

-Madison, ¿Existe la posibilidad de arreglar las cosas con Matthew?-

Liz se atragantó y comenzó a toser, y yo, pues, me quedé sin palabras.

-No lo creo- dije seca.

-Más te vale que así sea Madison- dijo Liz de forma amenazante. Realmente no comprendo por qué tanto odio hacia Matt, desde que comenzó nuestra relación ella siempre se mostró alejada de el y en muchas ocasiones se veía que le incomodaba su presencia.

-Ya dejemos eso de lado y pensemos en pasarla bien- dijo Ann mientras la camarera nos entregaba nuestras bebidas.

***

-Madison, te faltaron las mesas del fondo- dijo Austin desde la entrada del café. Había faltado demasiado al trabajo y necesitaba ponerme al día, eso incluía trabajar un domingo. No quiero que me paguen por hacer nada y tampoco quiero que Austin crea que me regala el dinero.

-Si señor- dije haciendo un gesto militar, ya nos la llevábamos mejor y habían quedado las cosas claras... Además ya sabía sobre mi embarazo.

Se enteró un día durante el trabajo. Me desmayé como era habitual y como no reaccionaba me llevó a emergencias junto con Kate, y el médico les explicó mi situación. No tuve mas remedio que contarles todo, y en parte ayudo a sentir el peso sobre mi espalda mas ligero.