Primer día de las vacaciones de verano, cerca de las seis de la mañana. Como era de esperarse, Yui estaba profundamente dormida, olvidando que aquel día ella y sus compañeros del club de música ligera partirían poco más de una hora después hacia el campamento de entrenamiento organizado por su presidenta, Kana Yoshii.
Como era su costumbre, Akira se armó de paciencia y se dispuso a despertar a su rival. A medida que los segundos pasaban, la fuerza que imprimía a los golpes que le daba a la puerta iban aumentando. Debido a esto, las compañeras de ambas se acercaron a ver lo que sucedía. De no ser porque a Ritsu se le ocurrió gritarle que si no se levantaba en ese instante se quedaría sin desayuno, Yui no se habría levantado.
Minutos después, las 7 chicas llegaban junto al vehículo que las llevaría al campamento, donde los demás integrantes del club aguardaban su llegada. Tras un breve discurso de Kana sobre la importancia de las buenas relaciones dentro del club, partieron hacia el campamento.
Al llegar a su destino, una gran cabaña con una apariencia algo tétrica, los empleados del lugar les dieron la bienvenida vestidos de forma tradicional. Ritsu, mientras intentaba calmar a Mio (quien se puso nerviosa por el aspecto de la fachada), reprochaba a la presidenta por haber escogido aquel sitio, a lo que Kana argumentó que aquel era el único con el suficiente espacio y equipamiento para albergar a todas las bandas.
Una vez instaladas en el cuarto que les asignaron, las integrantes de Houkago Tea Time comenzaron a explorar el lugar. Al hacerlo, vieron que Akira estaba en una de las salas de ensayo sola, tocando una canción romántica con su guitarra.
—No sabía que Akira tuviese ese lado —murmuró Ritsu.
—Al parecer, las cosas con Maeda-senpai van bien —dijo Yui procurando no levantar su voz. Mio y Mugi asintieron.
—¿Qué tanto murmuran ustedes ahí? —preguntó Ayame, sorprendiendo tanto a las chicas de HTT como a su compañera de banda.
—Solo... Queríamos conocer las salas de ensayo y... esta es la primera y, como Akira está adentro, no quisimos molestara —se excusó Ritsu tan rápido como su mente se lo permitía. En ese momento, la líder de Onna Gumi salió de la sala con su típica cara de pocos amigos.
—Como digan. La presidenta nos está buscando para hacer un anuncio.
Tal como dijo la baterista de OG, Kana había hecho que todos los integrantes del club se reunieran en el salón principal, anunciándoles que, durante el campamento, todas las bandas debían montar una canción, bien sea un cover o una propia, en un estilo diferente. Esto con el fin de mostrar la versatilidad de los diferentes grupos.
—Bien, podríamos hacer una balada. A pesar de las letras romanticonas de Mio, no tenemos ninguna —sugirió Ritsu ganándose una mirada asesina por parte de la bajista.
—Podría ser, pero creo que, para un cambio de estilo, sería mejor algo completamente diferente; no solo en la música, también en la letra —dijo Mugi.
—Me gusta esa idea, pero... no tenemos mucho tiempo para algo así, especialmente si hablamos de letras —intervino Mio.
—No se preocupen, tengo algunas letras escritas. —Con estas palabras, Yui sorprendió a sus compañeras, que no esperaban aquella situación—. En mis ratos libres me llegan algunas ideas; Ui y Azu-nyan me han ayudado.
—Bien, eso significa que es algo bueno. Comencemos a trabajar en con las letras de Yui —sugirió la bajista, aunque esto no fue del agrado de las castañas.
Por su parte, Akira estaba encerrada en su cuarto, solo con Rosalie, guitarra, buscando algo que ella pudiese cantar para ese reto del campamento. Sus compañeras de banda le seguirían sin dudarlo en cualquier decisión que tome, aunque Sachi sugirió que tocaran algo acústico. Entre las diferentes opciones que barajaba, halló una canción suave, perteneciente a la banda sonora de un anime. Las escenas animadas complementaban perfectamente a la música, y la voz de quien cantaba era muy similar a la de la guitarrista. Sin dudarlo, compartió el enlace del video con sus compañeras; había encontrado la canción indicada. Pero había un problema que Ayame hizo notar inmediatamente: las partes de teclado; ninguna de ellas dominaba ese instrumento. Akira intentó emularlas en su guitarra, pero notó que era difícil hacerlo mientras cantaba, por lo que decidió pedir ayuda.
Tras contactar a Kana y confirmar que las colabora entre bandas estaban permitidas, estableció comunicación con la primera tecladista que vino a su mente.
—¿Estás segura de eso, Akira-chan? ¿No se vería afectada la rivalidad entre nuestras bandas?
—Para nada, Mugi. Mi rivalidad es únicamente con Yui, así que todo estará bien. ¿Qué dices? ¿Cuento contigo?
—Verás... estoy trabajando en algo nuevo que escribió Yui, así que no dispongo de mucho tiempo. Pero veré que puedo hacer.
—Muchas gracias, Mugi. Por cierto, la canción se llama Kuroi Namida... —Un emocionado grito de la rubia interrumpió a Akira.
—¡Amo esa canción! Me la sé al derecho y al revés. Definitivamente voy a ayudarles. ¡Tocarla en vivo siempre ha sido mi sueño! Pero Yui-chan dice que no se siente cómoda cantándola y a Mio-chan no le gusta.
—Bien, ambas salimos favorecidas. Cuando puedas ensayar con nosotras me avisas. —De esta forma, esta inédita colaboración fue gestada. Mugi sonreía al tararear esa canción mientras la tocaba en su teclado, imaginando cómo sería en la voz de Akira.
El tiempo pasó en lo que pareció un parpadeo. Debido a lo estricta que Mio se había puesto en ese lapso, ni Ritsu ni Yui pudieron jugar como ellas querían. La baterista bromeaba con que la bajista se comportaba así debido a la ausencia de Satoru, a lo que la zurda trataba de restar importancia (aunque no evitaba golpear a su mejor amiga por esa razón).
El último día del campamento, todas las bandas se reunieron en el salón principal de la cabaña donde se encontraban. Ahí, Kana organizó un pequeño escenario donde se llevarían a cabo las presentaciones. Una a una, las agrupaciones fueron mostrando el resultado de sus arduos ensayos.
Llegado el turno de Houkago Tea Time, Yui sorprendió a sus compañeros al no usar a Guitah, sino una guitarra acústica para tocar su nueva canción, Sunday Siesta. El ritmo al estilo bossa nova fue algo bastante inesperado, pero agradable al oído de los presentes, complementando la suave voz de la joven Hirasawa. Un fuerte aplauso mostró lo mucho que esta canción les había gustado a los integrantes del club.
Tras las presentaciones de otras bandas, el turno de
Onna Gumi había llegado. Mugi, que había guardado en secreto su colaboración con la banda de Akira, sorprendió a sus compañeras al ir de nuevo al escenario. La rubia logró acoplarse perfectamente al trio liderado por la joven Wada, quien cantó Kuroi Namida con toda su alma al haberse enamorado de dicha canción. Este cuarteto temporal recibió un prolongado aplauso.
—Bien, muchas gracias a todos por participar en este campamento y aceptar el reto del cambio de estilo. Todas las bandas lo hicieron muy bien y demuestran que pueden competir con bandas de otras universidades. Espero que disfruten de sus vacaciones y nos vemos en el segundo semestre. Con este discurso, Kana dio por finalizado el campamento, dejando una gran satisfacción entre sus compañeros.
Continuará...
Anuncio que solo quedan dos capítulos de este fanfic, así que pronto mis haters (si es que tengo) se podrán tomar un descanso de mí...
Gracias por leer, see you.
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Amigas Por Siempre
Fiksi PenggemarMio y Ritsu han sido amigas durante mucho tiempo, y es impensable imaginarlas separadas. Pero una de ellas descubre en sí misma sentimientos por la otra, lo que provoca un distanciamiento entre ellas. ¿Será su amistad lo suficientemente fuerte para...