¿Estas idiota, sordo o las dos cosas?

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Agarra mi cinturon y lo desata, saben bien pude haberlo evitado pero no se me vale madres, tengo la oportunidad de perder mi virginidad con un Adonis así, que no la voy a desperdiciar.

Se que sueno como una perra,pero siempre me paro por la moral y hoy me puede besar el culo la moral.

Tomo el boton de mi pantalon, lo desabrocho y me los bajo.

-Soy virgen, se gentil por favor-el no dice nada solo se acerca y me besa con tal pasión que mis piernas se ponen flojas.

Hace que rodee su cintura con mis piernas,ahora mis pies ya no tocan el suelo.

-No sabes en lo que te metiste presiosura-su voz es tan ronca, y rasposa, me da miedo pero lo ignoro.

Me recuesta en la cama, el se quita la camisa y desupués el pantalón, me empuja un poco para que este en el centro de la cama.

Se quita los boxers, agarra el dobladillo de mis bragas y las jala hacia abajo quitandomelas.

Se que soy patetica pero en este momento pero estoy nerviosa, ¿y si no le gusta? ¿me lo diria? 

Su miembro presionando en mi entrada me saca de mis pensamientos, siento como lo va metiendo de a poco pero como a la mitad de su miembro siento un dolor indescriptible, grito de dolor.

-¡Ahhh,PARA, PARA, ¿ESTAS IDIOTA, SORDO O LAS DOS COSAS? PARA!- el solo me beso para que me callara y siguio con sus embestidas.

Después de unas embestidas más ya no sentia dolor, bueno solo un poco pero era mas placer que dolor.

-Más rápido-mi voz suena más un gemido que como una suplica.

Mihlka accede a mi petición y aumenta el ritmo de las embestidas, en el cuarto solo se oyen nuestros gemidos y el rechinar de la cama.

Mihlka empezó a besarme con mucha pasión, mete su lengua en mi boca como si estuviera penetrandomela al mismo ritmo de sus embestidas. 

Ya no puedo más, siento como mis paredes vaginales aprietan a Mihlka y me corro, a los pocos segundos siento que Mihlka exparse su semen por todo mi interior, se acuesta sobre pero sin lastimarme y se queda dormido.

Me dan ganas de tocar su cabello marrón, no me reprimo y empiezo a tocar su cabello al mismo tiempo que le hago un masaje en la cabeza.

***

***

Siento unos besos en la espalda y como una mano grande y callosa, que abarca todo mi seno lo masajea.

Me volteo para ver su cara, aunque ya la haya visto muchas veces antes, tiene una sonrisa en la cara y sus ojos azules moteados de verde tienen un brillo especial.

-Buenos días guapo-sonrío al darme cuenta de como lo acabo de llamar, se acerca y estampa sus carnosos labios contra mi boca.

-Buenos días preciosa, ¿me puedes esplicar como acabamos teniendo sexo en mi casa?-

-Bueno pues estabamos todos en el carro y Max, Dakota y tú mantenian una discusión...-muerdo su hombro lo que hace que se estremesca- yo defendi a Dakota de algo que le había dicho Max y nos empesamos a insultar, tu y yo entonces tu te enojaste y paraste el carro, me dijiste unas cosas y me arrastraste hasta tu cuarto, me arrancaste la camisa, después una cosa llevo a otra y acabamos teniendo sexo-se muy bien que no fue hacer el amor, bueno para el pero para mi si lo fue.

-¿Te hice daño?-muevo mis piernas para poder responder a esa pregunta por que la verdad al principio si estuvo medio salvaje, me duele mi entrepierna al mover mis piernas.

-Solo un poco pero no me importa después no me dolio nada-su cara hace una mueca de desagrado 

-Perdoname, lo siento- lo miro extrañada, se mueve un poco para desaserse de nuestra posicion y hace amago de levantarse.

¿Y por que no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora