01. Una Noche Inesperada.

2.8K 129 126
                                    



Notas del Fanfic:

Basado en el universo del anime de One Piece.

One Piece y sus personajes son propiedad de su autor, Eiichiro Oda.

Este material es expuesto sin ningún fin lucrativo o comercial.

*


Aclaraciones:

Esta historia tiene lugar antes de la saga de Java y después de la saga de la niebla arcoíris.

CAPÍTULO 01.

Una Noche Inesperada.

Despacio comienzo en tu boca, 

despacio y sin quitarte la ropa. 

Mi cama no merece tu cuerpo, 

virgen como el amazonas... 

mucho para un lobo cazador, 

pero ideal para el amor. [...]

"Primera vez", Ricardo Arjona (fragmento).

1.

Aquella aventura los había dejado bastante impresionados, en especial al joven capitán. Esa niebla misteriosa había sido un lugar muy divertido, pero ahora debían buscar una isla para re abastecerse de provisiones. Habían pasado sólo un par de semanas, pero la comida ya escaseaba en la pequeña carabela, más que nada por el insaseable apetito de Luffy y sus saqueos nocturnos al frigorífico.

Nami decidió que era hora de comprar otro aparato de refrigeración con cerrojos, cómo le había pedido Sanji tiempo atrás, así que en la siguiente isla no sólo se reabastecerían, sino también comprarían el aparato nuevo.

Era ya medio día y Zoro estaba entrenando en el castillo de popa, había terminado con las enormes pesas y se secó el sudor con una toalla para tomar las pesas más pequeñas y ejercitar sus brazos y bíceps únicamente.

Escuchó un ligero ruido desde las escaleras, miró de reojo sin dejar lo que hacía.

— ¿Qué quieres cocinero idiota?

— ¡Marimo estúpido! — Respondió al insulto —. Vengo a decirte que ya está la comida — le informó dándose la vuelta, irritado —, pero si quieres que Luffy se lo acabe todo, por mí está bien — le indicó bajando las escaleras y levantando un brazo despreocupadamente, cómo despedida —. Imbécil — murmuró.No recibió insulto de respuesta, pero no le sorprendió por lo quedo que había dicho lo último. Ese maldito espadachín lo irritaba.Hasta cuando trataba de ser amable con él terminaba insultándolo, no es que le importara si lo insultaba o no, simplemente no le parecía que fuera tan mal educado y grosero con todos, aunque en aquel momento lo que más le irritaba era que estaba demasiado al pendiente de él, aun sin querer hacerlo terminaba mirando por la escotilla de la cocina cómo entrenaba, cómo resbalaba el sudor por su espalda haciéndolo lucir tan...

Sacudió la cabeza, irritado. Era ridículo que pensara en aquellas cosas, a él le gustaban las mujeres. Aunque debía aceptar que el marimo era muy atractivo.

AmarTeDuele.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora