Tomo mi pelo con una coleta y me acuesto para tratar de dormir y olvidar mi enojo por un rato.
Al acostarme me pongo a pensar en todo lo sucedido y noto que en parte yo me equivoqué. Y que Austin notó ese error, por lo que se enojo sin ver el resto de los hechos.
No entiendo porque una simple amistad tiene que generar tantos problemas. ¿Por qué rayos es tan complicado?
Al cabo de unos minutos logro por fin dormirme.
Me encuentro en la escuela. Creo que era la clase de Inglés. La profesora estaba devolviendo los últimos exámenes, y cuando me devuelve el mio noto que lo había reprobado. Esto no podía ser. Yo nunca había reprobado un examen. Soy una estudiante que se preocupa por la escuela, y por sus estudios y que de vez en cuando puede ocasionar algún que otro problema. Pero esto nunca. Estaba sentada junto a Ashley, quien trato de consolarme, pero me solté de su abrazo y salí del salón, dirigiéndome a mi lugar preferido de la escuela: un árbol que se encontraba en el patio de esta.
Luego de unos minutos siento que alguien se sienta junto a mi y pasa un brazo por mis hombros. No logro identificar quien es porque tengo mi cabeza metida en mis rodillas. Estoy llorando. Lo sé, es muy idiota llorar por algo así, pero en verdad no lloro por haber reprobado, sino porque nose que me pueden llegar a decir mis padres sobre esto. ¿A quién engaño? Lloro por ambas cosas.
Levanto mi cabeza y me encuentro con Austin.
-No deberías llorar. Se te hinchan los ojos y te queda feo. - me dice en un tono de diva para que me ría, cosa que logra.
-¿Como sabías que estaba aquí? -pregunto.
-Un amigo siempre sabe todo sobre su amigo. -dice con una media sonrisa.
Me despierto sobresaltada.
He tenido el mismo sueño que en la noche.
Por este mismo sueño es que entendí que Austin era mi amigo.
Hasta hoy. Donde pareció ser que no era mi amigo.
Miro la hora y me encuentro con que son las 8 de la noche. Mamá ya debe estar en la casa. Mi papá volvió a Miami hace 4 días.
Recuerdo que aún estaba con el uniforme. Por lo que lo cambio por un short gris y una remera de tirantes blanca, y en mis pies, retiro las medias azules del uniforme y me pongo unas ojotas.
Voy a la cocina en busca de mi madre, quien se encuentra cocinando la cena.
-Hola mamá.
-Hola Sam, ¿qué te sucede?
Vaya, tanto se nota mi malestar.
-Nada, solo discutí con uno de los chicos.
-Cariño, no te preocupes, verás que pronto todo se resolverá.
-Eso espero- digo soltando un suspiro- iré a bañarme, bajaré para comer.
Al llegar a mi habitación, me dirijo al baño y tomo una ducha de 20 minutos, para relajarme.
Cuando salgo, me coloco mi pijama que consiste en un short negro de algodón y una remera blanca de tirantes, algo parecido al atuendo que llevaba antes de bañarme.
Para hacer tiempo hasta la cena, me recuesto en mi cama con mi celular y reviso las redes sociales. Al entrar a Instagram me encuentro con una foto que subió Luke junto a mi, que en la descripción dice: "La que siempre me regaña"
Río por lo que puso y comienzo a leer los comentarios:
IsaCampbell: Que amigos más lindos me elegí.
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Roman pour Adolescents-Sam, ven aquí. Austin ya llegó. Desde ahí, todo cambió. Tengo mi grupo de amigos de toda la vida, ¿Entendieron eso, no?, MI grupo de amigos. Oh, olvidé mencionar que puedo llegar a ser un poco, tan solo un poco, celosa. Bueno, volviendo a lo que...