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44- A mi no me interesan los príncipes.

-Yo creo que deberíamos hacer la denuncia en la policía. -propone Isa.

-Yo dije lo mismo... -comienzo.

-La policía no hará nada, somos solo unos adolescentes. -me interrumpe Matt.

¿Desde cuando es tan inteligente?

-Es lo que yo le expliqué a Sam. -concuerda Austin con mi primo.

-Si la policía no nos ayudará, debemos solucionar esto por nuestra cuenta. -propone Zoey.

-Pero si no sabemos quiénes son, ¿Como haremos? -le pregunta su novio, bueno no es su novio, es su intermedio entre novio y amigo. Digamos Luke, es más simple.

-Primero lo primero, descubrir quién es o son. Y luego, combatirlos. -dice esta vez Alex.

-Pareces mi madre cuando quiere sacarle los piojos a Emily. -hace una mueca de asco Austin.

-¿Aun tiene piojos? -pregunta Vanessa.

Ruedo mis ojos y puedo ver cómo Isa me reprende con la mirada. ¿Que? Aquí las de la buena relación con Emily somos Ashley y yo. Ella no debería entrometerse.

-Chicos, ¿Saben? Debo ir a hacer unas cosas que olvidé, luego avísenme que resolvieron, lo siento. -anuncio y me pongo de pie, camino hasta la entrada y cuando estoy saliendo me llaman.

-¿Necesitas que te lleve? -me pregunta Matt y niego con mi cabeza. -Caminare.

Salgo de allí y emprendo el camino hacia mi casa, la cual no queda muy lejos de aquí.

⭕⭕⭕

Vanessa, Vanessa y Vanessa. Es lo único que oigo.

Bueno, no es tan así, hace dos semanas que no le hablo a Austin. No es porque no quiera, solo que no sucedió. Bueno, en realidad le está mostrando la ciudad a Vanessa y se reúne con los chicos y no olviden a Vanessa que también debe andar merodeando.

Luego de lo que sucedió en la casa de Álex, fui a visitar a Luke y el estaba allí. De todo lo que hablamos, Vanessa formaba parte de más de la mitad. ¿No se cansa de hablar de la chica?

Y puedo jurar que no estoy celosa. Solo es que el tema ya está agotado. No puedes estar dos semanas hablando de lo mismo y no cansarte. O por lo menos yo me cansaría al tercer día, quien sabe, antes.

Estoy en mi habitación, en medio de una maratón de películas y no puedo evitar escuchar la puerta de entrada.

Puedo identificar la voz de mi madre, la de Luke y otra más pero no logro descifrar a quien pertenece.  Le pongo pausa a la película y bajo rápidamente las escaleras para encontrarme con mi madre, Luke y las voces que no reconocí. Isa y Ashley. Y Vanessa.

-Hola. -los saludo a todos alzando una de mis manos.

-Vinimos sin avisar, lo siento tanto. -se disculpa Vanessa y no puedo evitar reír.

-No te disculpes, lo hacen todo el tiempo y yo les hago lo mismo, así hacemos siempre. -la tranquilozo restandole importancia. Y por si habían dudas, mi risa fue amigable, no la odio a la pobre chica, ella no tiene la culpa de que se hable de ella, no es como si ella estuviera diciéndole a Austin que hable de ella. Eso es realmente estúpido.

Vaya, pensé muchas veces ella. ¿Por qué me fijo en esto? Dios, las cosas en las que me fijo.

-Me quedo más tranquila. -dice y noto como se alivia.

-Ya te acostumbrarás. -Ashley se suma a la causa hagamos sentir cómoda a la pobre Vanessa, la cual acabo de fundar.

-¿Por que tarda tanto Austin? -Isa se asoma por la ventana que hay junto a la puerta.