Los Populares

19- ¿Puedo huir?

-Zoey, pásame esa cadena-pide Isa.

Estamos en mi casa. Solo Zoey, Ashley, Isa y yo. A los chicos los dejamos fuera porque ellas me están preparando para una cita con Jayson.

Me parece innecesario igualmente. Yo me podría haber preparado sola tranquilamente.

Ya estoy casi lista. Me faltan únicamente los accesorios, elegir alguno, en realidad, que las chicas elijan uno. Me han probado miles pero no se deciden.

Y yo ya no tengo opinión. A lo que digo le restan importancia o simplemente no lo escuchan. O si, lo deben escuchar, pero me ignoran olímpicamente.

Ya me cansé de insistir así que dejo que hagan lo que quieran.

Llevo puesto el jean que me compre con Austin, bueno, mejor dicho que él me compró, con un top blanco y una chaqueta de cuero. En mis pies, unos tacones básicos negros.

-Esta le quedará mejor -dice Ashley tomando otra cadena. Me cansaron.

-Basta. -digo parándome de la cama -No me pondré ningún colgante, ni cadena, ni pulsera. Nada. Me cansaron. Estoy bien así. Iré sin accesorios. No es como si los chicos le prestaran mucha atención a eso.

-Y..... Se enojó. -dice ¿Matt? Asomándose por la puerta. -¿Que haces aquí? ¡Tu! Eres un chico, ¿Los chicos se fijan en los accesorios?  -pregunto.

-Eh... Nada... Estaba aburrido y decidí venir aquí. -contesta mi primer pregunta encogiéndose de hombros- Y digamos que eso no lo puedo contestar, porque yo no tengo citas, tú sabes, bueno ustedes saben cómo soy yo. -explica.

-Si te creo. -digo sarcásticamente para luego rodar los ojos ante su justificación sobre su presencia en mi casa. -Tienes razón, no debo hacerte ese tipo de preguntas. -contesto haciendo una mueca.  -Cuando vuelvo hablamos. -le digo señalandolo con mi dedo índice para luego salir de la habitación.

-¿A dónde vas? -pregunta a mis espaldas.

-Cita con Jay -respondo de camino al garage, donde arranco mi auto y voy en dirección a una cafetería de aquí cerca.

⭕⭕⭕

-Fue extraño el otro día. -dice Jayson con una mueca en su rostro.

-Si, siento que hayan hecho eso. A veces pueden ser muy exagerados.-digo rodando mis ojos.

-Exagerados pero populares.

-No tiene nada que ver eso. No somos especiales por ser populares. Como los nerds no son especiales por eso. Tu también eres popular y no te veo especial, ni a ti, ni a mi, ni a tus amigos ni a los mios.

-Para mi sí los nerds son especiales. -me replica.

-¿Qué? -pregunto atónita. Pareciera que no entiende mi punto.

-Son muy pocos los que tienen esa capacidad mental para tanta información. O para estudiar. -explica.

-Discúlpame, pero te recuerdo que tengo de las mejores notas, y no soy nerd. Ellos no son distintos a nosotros y nosotros no somos distintos a ellos. -digo para luego tomar de mi frappé. Que delicioso es. Es el amor de mi vida.

¿De nuevo mintiendo, Samantha?

Bien, el amor de mi vida no es el frappé. El amor de mi vida es el chocolate blanco, o a falta de este las almendras bañadas en chocolate. Es simple, mi vida no funciona sin chocolate.

Así me gusta.

-Lo siento, sabelotodo. -dice riendo.

Ugh, ¿es que este chico no entiende?