Capitulo 28: Secreto a voces

306 46 8
                                    

Al llegar a casa de John, Paul quedo maravillado ante como su hombre conservaba a dichas mariposas rojas en un lugar tan considerablemente pequeño. Era como si el pequeño recinto fuera un castillo en ruinas donde la naturaleza podía apropiarse de nuevo de la tierra.

-Perdona el espacio, no reparo mucho en gastos con mi...-

-Es hermoso- dijo Paul sonriendo sin mirar a John

-¿De verdad?-

-Es perfecto-dijo el pelinegro para después ser abrazado por su hombre

-¿Sabes? Son peor que una mujer-

-¿Quienes?-

-Ellas- dijo señalando a sus mascotas

-¿De verdad? Jajaja-

-¿Que puedo yo decir? Todo se ha de parecer a su dueño-

-Hey!- dijo el pelinegro golpeando el brazo del castaño

-Hombre solo es broma cariño- dijo y beso su frente- ¿Quieres un té?-

-Claro- dijo sonriéndole

Al momento en que John se fue, Paul comenzó a convivir con aquellos pequeños seres que provenían de su pecho, el contacto con ellos si que se sentía extraño ya que él sentía como que todas aquellas mariposas eran parte de un todo. Lo explico, él sentía que bien una de ellas podía pertenecer a uno de sus brazos o alguna otra parte de su piel, no eran para nada ajenas a el, y obviamente, tampoco a John le eran ajenas.

Al volver, el chico castaño se topó con una imagen de lo más bella, era Paul, sentado como un niño inocente mirándolo mientras 1000 mariposas volaban liberadas a su alrededor, aquella escena hizo que ambos al mirarse sintieran el escalofrío en la espalda, como dando pie a que ambos se pertenecían.

-Woow te ves hermoso- dijo John sentándose a su lado y tomando su rostro

-¿Tu lo crees?-

-Si, en verdad eres perfecto....¿Porque yo Paul?-

-Yo no lo sé, tú eres tan diferente a todo lo que alguna vez pude conocer en mi vida-

-Como me hubiera gustado haberte conocido antes, así no habría echado todo a perder y todo en mi vida tendría sentido-

-¿John?-

-Si?-

-¿Porque no vives con tus padres?-

-Yo...bueno...yo hice algo terrible, algo imperdonable-

-Bueno podrías intentar reconciliarte con...-

-No! No fue una pelea con ellos, yo me fui por cuenta propia, no tenía cara para enfrentar a mi madre, ella no sabe nada de lo que ha pasado-

-¿Pues que fue aquello tan terrible que has hecho?-

-Preferiría no hablar de ello si me lo permites-

-Me gustaría saberlo, no puedo yo juzgarte de nada amor mío-

- Es que yo no quise hacerlo, esa persona me obligo y me dijo que no dijera nada. Un buen día de mayo, cuando tenía 16 me harté y deje todo atrás, empaque mis cosas y nunca más volví a aquella casa hasta hace unos días para visitar a mi madre y cerciorarme de que su coraje ya se había disipado-

El chico que murio de amor (McLennon) (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora