AMARGO SABOR DE PERDÓN

"Final"

Hoy nuestro día se basó en estar en cama juntos, el reluciente sol que quema mi piel da a entender que  está muy tare como para mandar Alan al trabajo. No puede desconcentrar sus trabajos por mi regreso, pero eso no lo entendió anoche, ni en la cocina...ni en el sofá...sacudo mi cabeza con una sonrisa y volteo a ver la puerta del baño cuando se abre.

ahí, fuerte y grande sale mi hombre, con gotitas de agua en el pecho, su cabello ondulado moviéndose travieso y con visibilidad húmedo, su toalla tapando de su cabeza hacia abajo. Y mi mente se basa en todos los movimientos que hace para caminar al vestidor, veo su boca moverse pero no sé lo que dice, me concentro en imaginar lo que hace con ella, en ver sus músculos contraerse para quitar su toalla y quedar como un Dios griego delante de mí.

Sé que es inconsciente de lo que hace, muchas veces se viste conmigo y nunca he malinterpretado lo que hace, porque muchas veces soy yo la que inicio con los coqueteos, pero esa es su forma natural, ser sensual inconscientemente.

Y la verdad no puedo creer todo lo que ha pasado entre los dos en tan poco tiempo, porque Jesús hay muchas mujeres más guapas que yo, más fuertes, más valientes, más tonificadas...pero soy yo la que está en su cama, soy yo la única que lo abrió, la que sabe todo de él, la que lo analiza cuando duerme, solo yo, nadie más y sé que no habrá nadie más, porque los dos estamos juntos y seguiremos juntos, hasta el final.

– ¿te parece? –pregunta una voz dulce, sacándome de mis pensamientos.

Vuelvo al mundo y veo a Alan de pie a mi lado, esta con un polo y un pantalón color ladrillo, peinado y con sus ojitos azules mirándome compasivos, sabe que pensaba en otras cosas.

–Desearía saber qué piensas–dice, le sonrío se acerca–arriba mi niña, vamos a ir a dar un paseo–me da un beso en la frente y asiento.

–Donde manda capital...–me levanto dela cama y camino al baño

–No manda marinero–me da una nalgada y guiñando un ojo sale del dormitorio.

Pongo los ojos en blanco y rio caminando al baño, ajusto la puerta y me miro en el espejo, tomo una toallita húmeda y comienzo a quitar el rímel corrido de mi rostro, no sé cómo no me lo quite la noche anterior, parezco una pintura mojada.

Cuando llegamos a lo que se supone es una mansión, es completamente blanca, con ventanas azules oscuras y un hermoso jardín. Frunzo el ceño.

– ¿qué hacemos aquí? –pregunto curiosa y veo muchos automóviles afuera.

–Ponte esto–me pasa un antifaz para dormir y baja del automóvil ignorando mi pregunta. Abre mi puerta–póntelo–alza sus cejas esperando a que lo haga y obedezco, lo pongo hasta que no veo nada y el me guía por una piedrilla, césped y luego mis pies pisan suelo firme.

– ¿puedo quitarme la venda? –pregunto cuando ya no siento sus manos.

–espera un momento, mira, creo que las cosas no están funcionando de esta forma, quiero otra vida y... –me preocupan sus palabras, quito el antifaz nerviosa y me llevo una gran sorpresa al ver a todos mis conocidos aquí. Susan, Megan, Matt, Derek, hasta ¡¡Jake!! Mis padres y la familia de Alan con su primo.

Estamos en un muelle, perfectamente grande y perfectamente decorado de dorado y blanco, el viento sola suavemente y hace frio, pero no tanto cómo en la ciudad, aquí el agua se mueve tranquila y regreso la vista a mi hombre.

Volteo y lo que me encuentro me saca de casillas y mi corazón comienza a latir al compás de Over And Over Again.

Alan que esta arrodillado ante mí con una caja de terciopelo roja en sus manos, abierta mostrándome un anillo brillante de oro blanco–y por eso quiero unir mi vida a la tuya, hasta que mis pulmones dejen de respirar y hasta que mi corazón deje de latir porque quiero levantarme todos los días vendo a la mujer de mi vida a mi lado, ver como tus rizos decoran las sábanas blancas de nuestra cama, presentarte como mi esposa y más adelante ver a pequeños cuerpos parecidos a nosotros caminar por nuestra cama, porque si quiero un "nuestro" pero contigo. Entonces... Lucy Brown Hart, ¿quieres casarte con este energúmeno? –le sonrío y las lágrimas brotan por mis ojos, las palabras no salen por mi boca, entonces mis rodillas caen con fuerza para unirme con él en el suelo.

Junto mi frente en su pequeña barba y las lágrimas mojan mi vestido.

–claro que si–rio un poco y él sonríe. Me levanta el rostro y me a un casto beso en la boca.

–prometo que te cuidare con mi vida Lucy–susurra. Me separa un poco y pone en mi dedo anular el anillo. Lo observo un rato y levanto la vista hasta mi hombre, nada vale más que él, nada es más importante que tenerlo a él. Porque cuando uno se enamora todo es mágico, todo es especial, todo es perfecto.

–yo prometo entregarte mi vida entera, te amo Alan Ross– murmuro.

–Y yo estoy locamente enamorado de ti, Lucy Hart–me sonríe y me ayuda a levantar– ¡Dijo que si! –grita y agita su mano en el aire haciéndome reír.

Todos ríen y se acercan a abrazarnos, Megan y Susan no se quedan con las ganas de ver mi anillo y recordarme cuando hacíamos anillos de compromiso de plastilina cuando éramos niñas. Hemos cambiado demasiado. Mi madre me abraza, me besa, me da sermones, me aconseja y vuelve a besarme. Alan sin querer interrumpir se va con sus socios, todos lo abrazan y le dan una felicitación. Mi madre se despide porque quiere un Martini y me deja riendo sola.

Hasta que mi padre se acerca:

–pensé que esto no pasaría después de un tiempo–dice y pongo los ojos en blanco.

–Me dejaste cuando estaba muy chica–respondo y alcanzo una copa de champan de una mesita.

–quiero pedirte que me dejes de odiar, estoy feliz por ti hija–su mirada me dice que está arrepentido de todo lo que ha pasado y suspiro.

–Disculpa pero no olvido que tu esposa me encerró y no hiciste nada–respondo mirándole a los ojos.

–ex-esposa, la deje hace un tiempo Lucy, por eso quiero arreglar las cosas, merecemos ser felices–dice mirándome de pies a cabeza–estas enorme mi niña–una lagrima brota por mis ojos.

¿Qué pierdo si lo disculpo?

«Nuestra dignidad» dice la voz en mi cabeza.

No, mi orgullo, eso es lo que pierdo.

Le sonrío y lo abrazo.

–y tú tienes más canas de las que recordaba–susurro en medio de abrazo y veo a lo lejos como Alan me sonríe, el sabía que lo arreglaríamos, por eso lo invitó.

–Te amo, hija–se separa y veo que también tiene los ojos aguados, se limpia una pequeña lagrima y pone la mano en su bolsillo–tengo que...que...

–Ve–le sonrío y hace un ademan con la mano y se acerca a mi madre, suspiro. Todo va encajando.

La banda contratada comienza a cantar  Moonlight y veo como Alan se acerca entre la multitud y me rescata, mientras todo mundo toma parejas para bailar.

– ¿me concederías esta pieza, pequeña? –me sonríe coqueto y su cabello se mueve tan natural con el viento...

–claro que si mi vida–contesto y el hace una reverencia, toma mi mano y me guía al medio de la pista.

Bailamos uno pegado al otro, moviéndonos lento, con su mano en mi cintura y la mía en su hombro.

–Juntos–digo involuntariamente y suspiro.

–siempre.

¡Hola!

Este es el final, si a ustedes los pone nostálgicos a mi también, pero la verdad es que ya viene el tercer y ultimo libro, en donde la vida de estos protagonistas ira cambiando...en donde el sexo subira de tono y en donde el amor estará rozando el cielo, la publicación del primer capitulo de "Picante sabor de adoración" sera el 26 de enero de 2017 (si, cambie el nombre, porque no me gustaba mucho el rumbo de ese titulo)

Felices fiestas a todos, no me voy a disculpar pero tuve un "stop" de escritor, la verdad no me salia mucho y si lo hacia no me gustaba, pero aqui estoy con este capitulo, espero que les guste y no olviden votar, por otro lado, les tengo un regalo de navidad entonces esperenlo, porque les gustara muchisimooooo.

Con amor

Kelly