Caso 765 » h.s

»Te contaré toda la mierda que quieras

Noto de inmediato como todo el rostro relajado de Harry se contrae en una mueca de enojo y desagrado. Toda facción de su rostro se endurece y sus ojos se entrecierran volviendo rápidamente a su color natural. Ya nada queda del despreocupado e irritante chico que estaba comiéndome la boca hace unos momentos.

Mierda.

Creo que la he cagado, pero realmente quiero, no, necesito saber qué fue lo que pasó en esos meses de secuestro. Necesito saber que hizo y llevó a ese hijo de puta a hacer lo que hizo de manera tan siniestra, tan fría, tan calculadora, tan planeada.

—Esa es la única condición que tengo para poder ayudarlos.

—Styles—le llama Theo, Harry quien parece haber entrado en un estado de trance mueve su cabeza de un lado al otro como volviendo en sí, su cabello largo moviéndose en ambas direcciones en el proceso. Ni siquiera quiero admitirlo pero el hijo de puta se ve jodidamente caliente.

—No—contesta rápidamente—de eso nada.

—Entonces ninguno de los dos tiene que estar aquí dentro—me siento nuevamente en mi escritorio y cruzo mis brazos de inmediato—Que tengan una buena tarde caballeros.

La puerta es abierta y cerrada con brusquedad, en cuanto levanto la vista Styles ya no está y el único que queda viéndome con la interrogativa pegada en el rostro es Theo.

—¿Qué? —le pregunto con sorna.

—¿Qué ha sido eso? No hablo de Styles y tu o bueno sí, eso me lo contarás después. Hablo de eso de tu condición.

—Quiero saber qué fue lo que pasó en el secuestro, quiero saber que hizo, dijo y pensó ese maldito bastardo. No creo que sea tan difícil de entender.

—Sabes que estos chicos tienen una clase de trauma, ninguno de ellos ha hablado nunca de lo que pasó ahí dentro, no creo que comiencen a hablar ahora.

—Bueno, si quieren mi ayuda van a tener que hablar porque la verdad no sé cómo meterme en la mente de este animal, sin tener una idea de lo que ha hecho.

—Te entiendo. —Theo deja escapar un suspiro y sé exactamente de qué va eso. El pobre está tan comprometido con este caso que llega a comerle la cabeza el no poder atrapar al artillero de la muerte. —realmente harás falta en el caso, todos estamos notando tu ausencia.

—Ahora—me río—pero cuando estaba en el caso era un dolor de culo, todo el tiempo.

—No es cierto

—Claro que sí, me lo dijeron muchas veces.

—Bien, debo irme, tengo que ir a revisar unas cosas.

—Ve—le sonrío abiertamente con confianza—te veré luego.

Lo veo salir de mi oficina directamente hacia el caso que tanto me gustaba. Disperso inmediatamente esos pensamientos y me concentro en lo importante, los reportes escritos y documentos oficiales. Me recuerdo nuevamente, que hago esto por Elliot.

+

—Te noto ida

Levanto la vista hacia mi hermano mientras noto que simplemente le he estado dando vueltas a la comida y no he ingerido ni un cuarto del plato. Niego de inmediato casi en automático y dejo el tenedor a un lado relajando mi cuerpo en la silla