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Cuando Hawkeye se marcho de mi departamento no pude evitar soltar un suspiro, ¿que esta pasando conmigo? yo no era así. Miki enredo su cola metálica con pelos en mi pierna, quiero salir de aquí ¡JODER! 

- Miki, Vayámonos. 

Miki: Ama usted debe...

- Yo se lo que debo hacer y que no hacer. vayámonos, ahora.

agarre mi sudadera, y salí, quería dar la sorpresa a la dulce tía cass, y a hiro. camine decidida hacia la cafetería, el viento rozaba mi cara, mientras veía el atardecer asomarse, tarde unos minutos en llegar, miki había insistido en reposo, pero yo no puedo estar imperativa, es algo que no se me da, cuando llegué entre, y ahí estaba la tía cass, corrió a abrazarme.

Cass: ¡__! ¡Que bueno! espera... que haces aquí chamaca! deberías de reposar-me jalo de la oreja-

- Auch, Auch, Tía  cass, lo siento, soy muy ¡ACTIVA!......... por cierto, ¿donde está hiro?

Cass: creo que en su habitación, tengo que irme, cuídate, estas en tu casa copito. -y se fue-

- Te odio Hawkeye.-murmure molesta-

Gracias a Hawkeye ahora todos me llamaban por mi apodo. era estúpido, pero bueno, que hacerle, subí las escaleras en busca de Hiro, entre a su cuarto pero no estaba, era lo raro de todo esto, ¿en donde estaría? me quede recargada en la mesita de madera mientras hacía muecas, Miki se acostó en el lugar en el que siempre se ponía para dormir cuando veníamos. suspire pesadamente.

-Miki creo que mejor nos....

no termine ya que escuche un ruido algo fuerte, y unos pasos. ¿ladrones? agarre mi navaja que me había regalado Tony, maldecía por no traer mi traje siempre. me asome por la puerta un poco. tratando de no soltar ningún ruido posible, y ahí, hubiera preferido que no viniera. era GoGo, con Tadashi. lagrimas amargas comenzaron a caer, me sentía más rota de lo que ya estaba, más débil. Tadashi la tenía contra la pared y le besaba con pasión mientras se toqueteaban. cuidadosamente cerré la puerta.

- Miki, vayámonos por la ventana. -susurre caminando hacía la ventana-

miki se quedo en silenció, salimos por la ventana y bajamos con cuidado, de pronto se comenzaron a escuchar los truenos. y la lluvia comenzó a mezclarse con las lagrimas saladas de mi cara. mire la ventana, ¿por que mierda no la cierran ya? GoGo estaba encima de Tadashi. el le seguía el juego, hasta que se levanto, y me miro, ahora el... se mostraba indiferente. y cerró las cortinas. no vi más. mi vista se volvió a nublar, gruñí mientras me daba vuelta y comenzaba a caminar hacía el departamento.

- maldita sea, te maldigo-murmure apretando mis manos, tan fuerte que comenzó a tirar pequeñas gotas de sangre- era de esperarse, tanto como honey, y GoGo, tienen un cuerpo envidiable. 

mi estomago comenzó a rugir. ignore el acto, carajo. necesitaba adelgazar, ser perfecta pero... ¡A quien quiero engañar! Comencé a caminar a un restaurante. Al llegar al primer restaurante que vi, me adentre, quede sorprendida, se veía elegante, pero a la vez rústico, camine a la recepción y dije que quería una mesa. Miki se metió en mi bolso. Me guiaron y me sente, comencé a revisar el menú.

- lasaña, spaghetti Italiani, pizza francesa.... carne a la.... ¡HAY YA!-murmura molesta- Mesero!
Mesero: ¿dígame señorita? ¿ya se decidio?
- ¿qué ya me decidí? ¿qué no tienes algo más.... informal?-respondí dudosa.-
Mesero: ¿Informal? -pestañeo confundido- señorita a que se refiere con informal.
- Ya sabe pizza mexicana, tacos, ¡HAMBURGUESA! eso quiero.
Mesero: ¿Hamburguesa?-dijo aún más confundido- he... iré a preguntar señorita.
- De acuerdo.-suspire- esto es raro. Nada informal.-bufe-

Espere unos minutos y llegó el mesero.

Mesero: disculpe señorita pero. El chef dice que es todo lo que hay. Y que lo lamenta pero si no le gusta que se marche.
- Quien se cree..-susurre molesta- ¿quien es el chef?
Mesero: el...el señor Kyle...-tartamudeo-
- pues dígale que venga o yo iré a el.-dije decidida-
Mesero: señorita yo...
- Vaya ahora.-murmure con un aura molesta
Mesera: con su permiso señorita.-se marchó asustado-
- Quien carajos se cree ese tal akiles....

Gruñi molesta. Y volvió el mesero después de unos minutos.

Mesero: señorita, lamentó decirle que el no la atenderá.
- el no a mi, pero yo a el si lo atendere.

Me levanté y camine decidida a la cocina. Al llegar abrí la puerta, todos se quedaron viéndome. En especial. Espera ¿es tadashi?

???: ¿qué diablos hace ella aquí?-respondió un chico pelirrojo con pecas-
- Tengo nombre, ¿y quien es el estúpido chefcito llamado akiles, digo Kyle?
???: yo soy Kyle. ¿tienes algún problema?
- si, déjame decirte que si vas a atender a tus clientes hazlo bien, no importa si lo que quieren no esta en el menú, tienes que complacerlos, no seas ingenuo.-dije molesta- Chico malo, ¿tienes en verdad madurez? Demuestralo, yo venía aquí por una hamburguesa o algo que saciar mi hambre. Pero ahora puro "formal" -dije entre comillas- este restaurante está mal. Ya hasta el hambre se me quitó. Y si necesitas que alguie te enseñe comida "informal" puedes llamarme. Estúpido.-termine con la palabra en español- Miki. Vámonos.

Miki salió de mi bolso y se transformó. Los presentes se sorprendieron aún más. Kyle me miraba con el ceño fruncido. Lo ignore y salí de nuevo.

- Miki, no necesitamos un restaurante. Ni un novio, lo que necesitamos es comida. ¡comida!

Llegamos al departamento, me prepare de cenar y hice la cena de miki. Después cambie mi ropa, y cerré mis ojos.

FUERA DE LOS PENSAMIENTOS DE RAYITA

¿Quien diablos será esa chica? Se pregunto el chico del cabello negro como la noche mientras inhalaba su cigarrillo, le sorprendió por cómo llegó de la nada a hablarle sólo por una hamburguesa, aparte, esa chica era muy hermosa, sus ojos, su boca, su nariz, todo. Hasta su cuerpo. Quedó maravillado aunque no dijo nada. No iba a perder la dignidad por una simple chica pero.... quisiera volverla a ver, la chica se veía ruda, astuta, rebelde, todo, no como todas a las que se ha follado, las cabezas huecas. Necesitaba volver a verla.
Terminó su cigarrillo abandonando el restaurante.


Centuries- Tadashi Hamada y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora