Rumbo inesperado

Capítulo 8

Intentaba consolar a Sab y conseguir que, por lo menos, me perdone a mi. Después intentaría ver qué podía hacer por mí amigo, para que vea que si la amaba, pero lo que me dijo realmente no entraba en mi cabeza.
-Emily, estoy embarazada- no podía creerlo
-¿Que? ¿Tu estas? ¿Fels?
Agacho la cabeza, ¿Eso era un sí o un no? Porque si estaba embarazada como mínimo tendría que ser de mi amigo, eso era lo que yo esperaba
-Si, es de él, pero no estoy segura de estar embarazada- eso me tranquilizó, no podía ver a mi amigo cuidando a un bebé, ya tenemos suficiente con el Felipe grande, no imagino a un mini Fels llorando las 24 horas del día.
-Tenemos que hacer una prueba.
Ella asintió y fue a cambiarse y buscar su teléfono, mientras lo buscaba sonó el timbre, así que atendí.
Me encontré con la misma rubia de hace un rato.
-Hola otra vez- me dijo medio sonriendo.
Era muy rara, iba vestida con unos jeans negros un poco rotos, remera mangas cortas del mismo color con un logo de la banda No Te Va Gustar, algunas pulseras, llevaba el pelo medio corto teñido de rubio, llegaba a sus hombros y no tenía nada de maquillaje tampoco.
La chica me miraba a los ojos, ellos me reflejaban intriga y advertencia, su expresión era fría, luego su vista fue hacia la casa y me termino mirando nuevamente, dio unos pasos quedando más cerca y yo me corrí por acto reflejo, ella aprovechó y pasó sin decir nada más.
-¿Sabrina?- pregunta sin mirarme.
-Está en su habitación, fue a buscar un par de cosas porque tenemos que ir a comprar algo- una prueba de embarazo porque el idiota de mi amigo parece haber dejado embarazada a su novia- ¿Querías algo?
-No, sólo vengo para ver cómo anda Sab, ya se lo que pasó con el idiota- idiota serás tú perra, el es mi mejor amigo.
-No lo llames así, es mi mejor amigo y cualquiera comete un error.
Ella se da vuelta y vuelve a mirarme, sus ojos me intimidan, se acerca lo que más puede y yo retroceso hasta chocar con la puerta, quedó inmóvil y ella me dice tranquila al oído.
-Mira, se que tu eres la desgraciada que se acostó con él y traicionaron a la chica, no te hagas la inocente, se más de lo que crees, eres una zorra- cuando terminó esa frase mi mano ya estaba en dirección a su cara, bien merecida tenía la cachetada- Tranquila, no vine para pelear, y es mejor que no me molestes ni te metas conmigo- se dio la vuelta y fue hacia la habitación de Sab.
¿Quien se creía? "Es mejor que no te metas conmigo" para luchadora profesional, no sabes el miedo que te tengo.
Zorra.
¿Por que me quede quieta? Maldita Emily, quedaste como una débil... bueno a veces lo soy.
Sabrina volvió y atrás estaba la perra.
-Oye, ¿Viniste en tu auto?- niego con la cabeza- Entonces vamos en el mío.
-¿Adonde van?- que te importa, no irás igualmente.
-Bueno, puede que esté embarazada, tenemos que ir a comprar un test.
Oriana comienza a reirse ¿Que clase de amiga es esa?
-Yo las acompaño, quiero ver esto- dijo terminando de reírse.
-Estas mas perra de lo que recordaba- siempre debió ser igual.
Así que tendré que aguantar a la rubia todo el viaje a la farmacia.

(...)

Narra Oriana

Esta pelirroja estaba algo loca y tenía poco coraje, me sostuvo la mirada, pero cuando le hable ésta bajó hacia el piso, cuando me dio la cachetada me sorprendí un poco, no me la esperaba, pero entendía a la chica que no sabía dónde se estaba metiendo.
Mi estupida "amiga" quedó embarazada posiblemente, que imbecil, protección Sabrina, P-R-O-T-E-C-C-I-Ó-N.
Igual, tenía excusa para quedarme con las dos chicas y así llevar a cabo mi nuevo pasatiempo, molestar a la pelirroja que acababa de conocer en persona, de la cual oí hablar mucho estos días.
Cuando llegamos a la farmacia ambas se bajaron del auto y yo me quedé cambiando la música.
Busque la lista de reproducción que había hecho antes de irme, hace un año, con el nombre NTVG, que bueno que la conservaba, me gusta mucho esa banda.
Las chicas después de comprar llegaron, yo me había cambiado al asiento del piloto para cambiar la música y prender el aire porque apenas habían pasado 2 minutos de que se habían bajado y ya me estaba asando.
-Lo siento Sab, pero la vuelta manejare yo.
La pelirroja dijo a Sabrina que vaya en el otro asiento delantero, a mi lado, pero le hice un gesto a la chica que ésta entendió y dejó sentar a Emily adelante, que bueno que sigue entendiendo mis señas.
Se notaba que no quería estar conmigo, y me encantaba que se enojara por el simple hecho de compartir el mismo aire y el mismo auto.
Y obviamente volvimos a la casa al estilo Oriana.

(...)

Narra Ems

¡Esta chica está loca! Va a hacer que nos maten, va a 100 Km en pleno boulevard, vamos a morir.
Yo solo iba abrazada a la puerta, me gustaba ir a gran velocidad pero odiaba saber que la chica que manejaba estaba loca. Aunque me traía recuerdos este pequeño e insignificante viaje
En un abrir y cerrar de ojos ya estábamos en la casa, como para no llegar rápido.
Bajamos sin decir nada, todo el viaje estuvimos calladas con la música alta.
Y ahora debíamos enfrentar el posible mini Fels que podría aparecer en 9 meses.