2 meses después...Estos meses habíamos estado muy unidas. Supe muchas cosas que no tenía idea que le interesan o gustan.
Hubo días en los que me sorprendía yendo a buscarme y escapábamos al primer lugar que se nos ocurriera. Otros días (Que fueron muchos) íbamos a esa casa frente al mar, la cual me enteré que es de su padre pero el hace años no va.
También salíamos a navegar con un velero que tenían mis padres, nos divertíamos muchísimo y nos metimos al río también.
Lo más raro que pasó estás vacaciones y algo difícil fue que apareció el padre de Oriana, pero por suerte no nos molesto mucho tiempo ni quería acercase a la rubia, la cual obviamente tampoco quería verlo.
Por otra parte, también salíamos mucho con mis amigos, a boliches, nos juntamos una tarde o noche y la pasábamos muy bien.
Ni Ori ni yo trabajamos ya que ella tiene plata para seguir viviendo tranquila un par de meses (Plata que en su mayoría ganó en las carreras aunque ahora ninguna de las dos corría) y yo sigo tranquila viviendo con mis padres así que no es necesario que trabaje. Gracias a eso tuvimos muchísimo tiempo para estar juntas los meses que nos quedaban.
Por otro lado, Izhan pudo conseguir un muy buen trabajo y con unos dos meses ya pudo irse con So a vivir ellos dos (También con plata que ya tenía ahorrada). Mía, para mi sorpresa, se puso de novia con mi cuñado y se nota a miles de kilómetros que se quieren, ella y Sophie se llevan también de maravilla y me alegro por ellos tres.
Nos hicimos muy unidas con mi rubia, estos meses fuimos muy felices y me di cuenta que ella quería ser feliz también, cosa que no podía lograr en Argentina. En su momento no podía creer el que recién nos reconciliamos y ya me estaba diciendo que quería irse, quería estrangularla por decirme eso después de el hermoso día que tuvimos, pero gracias a eso también se presentaron oportunidades para mi.
Mi plan de vida (Antes de que Ori aparezca) era mudarme cuando termine la secundaria a un apartamento cerca de una universidad de psicología, pero ahora me quedaría un año más estudiando aquí y después me iría con la rubia a vivir.
Este año separadas iba a ser muy difícil y lo sabía, pero todo merecía la pena. Ahora estamos en el apartamento de mi novia terminando de empacar.
-¡¿Pequeña, te puedes fijar si queda algo en el baño?!- grita Oriana desde la cocina, sonrío.
-¡Ya voy!
Voy al baño y miro dentro del mueble, nada. Reviso todo el lugar y nada, pero mi idea no era decirle que no hay nada. Saco una cajita de mi bolsillo y la pongo dentro del mueble.
-¡Amor! Hay algo... una caja- Ori aparece toda despeinada y con el ceño fruncido.
-¿Qué tiene?- Entra al baño y señaló el regalo, estaba controlándome para no sonreír.
Confundida agarra la cajita, me mira sonriendo y también le sonrío, obviamente se dió cuenta que era un regalo de mi parte.
-Esta fuiste tú que a mi no me engañas que te conozco- dice riendo.
-Deja de dar vueltas y ábrela.
Desata el moño y abre la caja, dentro había una cadenita igual a la mía con un corazón también dorado igual al mío. La rubia me mira con los ojos abiertos.
-Me encanta Ems- toma el corazón y lo abre con cuidado, dentro un barco tallado.
-Tu me dijiste que te irías al faro del fin del mundo conmigo, ahora tenemos en que ir- parte del significado era ese, también era porque amaba los barcos al igual que yo.
-Te amo pequeña- me dice sonriendo, me sorprendió que me diga eso, normalmente me dice te quiero... Pero me gusta.
-Te amo amor- se pone frente a mi, sus manos en mi cintura y mis brazos en su cuello.
-Será difícil separadas, pero valdrá la pena- dice antes de besarme.
Y si que valdría la pena, yo era feliz con ella, al igual que Ori conmigo. La amaba y ella a mí. Solo era cuestión de tiempo para que nunca más nos separemos, por lo menos no por tanto tiempo, aunque cada tanto iría a visitarla.
-Terminemos de ordenar y empacar que mañana tienes el vuelo- digo algo triste.
-Hey no, no te pongas triste por favor.
-Estoy orgullosa de ti, pero no puedo ocultar que te voy a extrañar muchísimo- le doy una sonrisa algo triste.
-Yo también te voy a extrañar- dice juntando nuestras frentes y cerrando sus ojos. La abrazo y ella a mí.
Estaba orgullosa de esta chica, estaba feliz por ella, estaba enamorada de Oriana Sellers y no me daba ningún miedo gritarlo.(...)
La maldita alarma suena, tenía mucho miedo a este día, pero todo valía la pena.
-Buenos días- susurra, ronca, mi rubia.
-Hola- me acurruco más a ella.
Mi madre llegaría en una hora para buscarnos con Fels también, iríamos todos al aeropuerto a dejar a mi chica. Mierda, no se fue y ya la estaba extrañando.
Nos levantamos, ella se va al baño y yo a la cocina a preparar café, necesitaba despertarme. Eran las 6 AM, el vuelo salía a las 9, íbamos más temprano para llegar bien de tiempo.
Desayunamos tranquilas y riendo como siempre, como un día cualquiera, aunque sabía que ambas estábamos algo tristes.
El timbre suena y se que es mi madre, le contesto que ya bajamos y ayudo a Ori a llevar sus cosas abajo. Con todo cargado en el auto emprendemos el pequeño viaje.
Todo el tiempo estuvimos abrazadas, pero no decíamos nada. Las palabras en ese momento sobraban. Me dormí unos minutos sobre su hombro.
-Pequeña ya llegamos- me susurra Ori.
Abro los ojos y ella me mira con una sonrisa triste. Bajamos del auto y Fels con mi rubia bajan las cosas. Entramos al aeropuerto, eran las 8:15 AM, teníamos unos minutos para hablar y... Ya está.
Su brazo no salió de mi cintura, con su mano libre llevaba una valija, me deja unos minutos para dejar su equipaje, solo se deja una mochila con un par de cosas.
Ella está frente a mi con su sonrisa triste, una mano acaricia mi mejilla y la otra está en mi cintura, le sonrío aunque tenga ganas de llorar e irme con ella.
-Te amo pequeña, no estés triste, cuando pueda vendré a visitarte- la abrazo y ella pasa sus brazos en mi cintura. Ojalá este abrazo fuera eterno.
-Te amo Ori- no pude contenerme más y empecé a llorar- De verdad... Estoy muy orgullosa de que hagas lo que tanto quieres.
-Y lo que yo más quiero es que estés orgullosa de mi, verás como el tiempo pasa rápido.
Nos separamos y ella también está llorando pero con una sonrisa en su rostro. La traigo hacia mí y le doy un dulce beso en sus labios.
Nos separamos, Ori saluda a mi madre con un abrazo y a Fels, junta su mochila del suelo y vuelve su vista a mi. Volvemos a abrazarnos y ella acaricia mi pelo.
-Te llamo en cuanto llegue- asiento.
-Te amo mi amor.
-Te amo pequeña.
Me da un último beso y por un megáfono llaman a las personas del vuelo hacia Chile, me sonríe, deja otro beso más en mis labios, se da media vuelta y camina hacia una chica.
Fels me abraza por los hombros y yo lloro en silencio apoyada en el.
Ori le da los papeles a la chica y se va, tocando el dije de corazón que colgaba en su cuello.
Fin.

ESTÁS LEYENDO
Rumbo inesperado
Romans¿Qué pasaría si una chica loca entrara en tu vida? ¿Intentarías alejarte de ella? Eso le pasó a Emily Hunter, una chica de 17 años la cual llevaba una vida normal, hasta que conoció a una chica, ¿Casualidad? Tal vez. La chica loca, creída, insoporta...