Realmente ya no sé por qué me sigo torturando en tu ausencia, han pasado años desde que nos dejamos de ver, es como si una parte de mí no quisiera, sino que necesitara seguir pensando en ti.
Pero se acabó, yo sé que es así. No puedo despertar todos los días y pensar en ti, romper en llanto y pasar un día, fingiendo que ya no existes para mí.
Es difícil, ¿sabes?, es complicado ver a otras mujeres y decir que son perfectas, con el cabello de color castaño, los ojos como un café claro, tez de color clara en piel, lentes, con voces hermosas, son exactamente el esteorotipo de belleza que siempre soñé, pero por alguna maldita razón simplemente sigues ahí, en mi mente. Eres muy distinta, y aún así eres la mujer más hermosa que he conocido, con tu impecable sonrisa y tu deslumbrante mirada.
Me pediste que conociera nuevas amistades, que volviera a vivir, que continuara siendo el mismo de antes, pero es imposible; es imposible imaginar qué sería de mí sin ti.Me juré en nombre de quién sea que exista, que no iba a depender de tu presencia, que mi sonrisa, mi felicidad, mi bienestar iba a ser por completo digna de mi forma de vivir.
A veces tan sólo deseo que vuelvas a mi vida, deseo verte sonreír, bailar y cantar, deseo que vuelvas a ser feliz, que vuelvas a estar junto a mí tan sólo una vez más.
Tal vez es porque me enamoré de tu alma, al saber que nunca podría tocar tu piel.
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Cartas a destiempo
RomanceTodo el desastre comenzó desde aquél día en que nos separamos, tal vez por accidente o por destino. Nuestros caminos se habían separado para siempre, y no había nada que pudiéramos hacer. Te escribo para que estés enterada algún día de lo que sucedí...