CAPÍTULO 18

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Marifer


Al escuchar a Alex ahora entiendo porque es tan detallista conmigo, porque actúa como si fuera la última vez que nos viéramos, no quiere dar por sentado lo nuestro. Puedo entender todos sus miedos a perder.

Lo abrazo tan fuerte como puedo, no puedo imaginar tanto amor y tanto dolor a la vez. Puta Larissa que se aprovechó de eso tantos años.

—Alex, por favor, dime que puedo hacer para aliviar tu dolor.

—Quédate conmigo.

Si pudiera cambiar mi pasado con él, estoy segura que lo haría.

Cuando mire a Alex, hace algunos minutos atrás fue fácil saber que algo realmente malo le pasaba.

—Sabes... en este preciso instante, podría tirarla a los tiburones y no estoy jugando, esa...

<<Bicha hija de puta. >>

Y bingo esa palabra era la que yo buscaba, "BICHA". Larissa era una hija de... Marcie Millar. 

—Maricuchi, puedes respirar, me estas asustando.

—Lo siento, estaba buscando una palabra adecuada para ella.

—Y... ¿la encontraste? Porque me encantaría saber con qué ocurrencias sales ahora.

—Larissa es una "bicha". Es un ser rastrero, que chupa la vida de los demás, que solo han venido a este mundo para joder, joder y joder.

Mi ocurrencia como él mismo lo ha denominado, lo hace estallar en una carcajada que estoy segura se escuchó a un kilómetro.

Cuando termina de reír tomo su rostro entre mis manos y ambos nos quedamos contemplándonos el uno al otro.

<<Que alguien me explique ¿Cómo no amar a mi engreído favorito? Si es un amor. >>

—Alex...

— ¿Y ahora qué pasó? Ese, "Alex"... suena a que me tienes que decir algo y no te animas.

—Debo decirte algo, pero no quiero que te molestes conmigo o con Max. —Mi rostro denota pena, es que no quiero que lo vaya a tomar a mal.

—No lo haré, solo dímelo y ya.

—No sé cómo te lo tomes, pero... Max me llamó, sabía que algo te pasaba y que me necesitarías.

— ¿Eso es todo? —me mira sorprendido.

—Alex, amor, no te molestes con Max —trato de excusarlo—. Él solo quiere que estés bien.

—Ahora las cosas tienen más sentido.

—¿Estas molesto?

—Nunca podría molestarme contigo mi Maricuchi.

Ok si, lo amo muchísimo.

— ¿Es posible esto? Digo lo nuestro —pregunta incrédulo.

—Lo es, somos posibles, juntos lo somos. Te quiero mucho, te amo...

—¿Y no te irás?

—¡Hey! No te librarás de mí tan fácilmente.

—Creo que te ataré a mí para siempre.

—¿Y cómo se hace eso?

—Casándome contigo.

Bueno paremos el carro, un momento. WTF ¿Qué? Alex se ha vuelto más loco que de costumbre.

El juego de mi vida, Serie LOCO AMOR 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora