dieciocho

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"bienvenidos al aeropuerto internacional de Londres,"

Pocas palabras podían sonar más llenas de promesas.

Harry estaba parado a mi lado, una mochila marrón colgaba en su hombro (izquierdo) y su mano (derecha) en la mía. Tenía un beanie de color gris que hacía que sus ojos resaltaran más contra su bronceada cara.

"¿Estás listo?" Preguntó Harry, su dedo moviéndose en flojos círculos contra la parte trasera de mi mano.

"Estoy un poco nervioso." Respondí, inclinando mi pequeño cuerpo contra el de él. Harry me agarraba como si pesara (nada).

"Todo estará bien." Me besó despacio en la mejilla y me volteé para justo besarlo en el hoyuelo.

La gente a nuestro alrededor estaba cansada pero en diferentes formas, sus ojos medio cerrados y los hombros caídos. Algunas personas nos veían con juicio, otras con una sonrisa pero, la mayoría estaba muy ocupada en sus smart phones para preocuparse.

El vuelo tomaría cuatro horas y yo ya estaba contando el tiempo. Todos estaban mirando al espacio o hablando durante las instrucciones de seguridad pero le prestaba mucha atención. Harry me miró y dejo salir una pequeña risa.

"No vamos a chocar, Lou."

La mujer sentada en el asiento de pasillo de nuestra fila estaba en sus treintas y miraba a Harry de una manera coqueta. Ella seguía moviendo su cabello y sacando sus labios de color violeta. Harry, por supuesto, inconsciente de eso pero yo no. Entrelacé mis dedos con los suyos y le sonreí.

"Okay." Respondí, viendo a la mujer darse cuenta que nosotros estábamos juntos. Ella se volteó hacia el pasillo y se puso a ver sus uñas, así que yo centré mi atención de vuelta en mi (¿enamorado?).

"Okay." Me sonrió de regreso y sostuvo mi mano más fuerte mientras que el avión comenzaba a despegar. "Te protegeré."

El avión empezaba a ascender y dejé salir un (pequeño) quejido. El piloto anunció que las bebidas estarían llegando pronto y que aseguremos nuestros cinturones de seguridad.

"Hey, ¿Lou?" Harry susurró, las bolsas bajo sus ojos notándose oscuras, "Si me quedo dormido, no te ofendas, ¿okay?"

"Tú puedes dormir, está bien."

Él estiró sus largas piernas en frente de nosotros y me señalo para que cerrara la distancia entre nosotros. Mi cabeza se apoyaba en su hombro y él puso su cabeza encima de la mía.

Estaba casi todo silencio en la cabina, todos ocupados con las revistas y laptops en sus bandejas convertibles pero, yo estaba ocupado con la forma en la que el cuerpo de Harry estaba rígido por el sueño, su respiración era calmada y no podía decir con seguridad dónde su cuerpo comenzaba y el mío terminaba.

"Bienvenido a París." Susurré a nadie en específico.

Traté de imaginarme a París sin Harry Styles pero fallé. Creo que todas las cosas perfectas en realidad sí venían en parejas.

"Underneath Paris" [traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora