April: No te enamores de la apuesta

CAPITULO 6

JUEVES, DICIEMBRE 31

April

Camino sonriente con un par de cópas entre las manos. Le tiendo una a Kim, con quien estaba entablando hace unos minutos una conversacion sin sentido. Luego doy un sorbo a la mia, aterrorizada de excederme y despertar mañana casada con otro hombre.

Jace me mira desde un punto lejano mientras finge prestar atencion a lo que Luke parlotea. Cuando nota que lo he pillado se gira, cosa que inevitablemente me hace sonreir. Doy pequeños pasos de un lado a otro con mis piernas inquietas por el ritmo pegadizo de la musica. Wallie barrita lo que hace reir a la mayoria, y veo a su cria intentar hacer lo mismo, sin exito.

- Parece que la esta pasando bien con Georgia.

El comentario de Kim me sorprende. No solo por el nivel de ironia que le pone a cada palabra que sale de su boca, sino por el temblar de sus labios cuando parece recordar quien a estado ausente a la celebracion.

- Ni siquiera me lo recuerdes. -pido rodando los ojos-, la sola idea de lo que esa loca debe estar haciendo con Alex ahora mismo, me hace querer vomitar.

Ella solo sonrie, como si le causara gracia que nuestro amigo mas cercano sea la actual victima de las garras de la señorita te-quiero-para-presumir.

- Espero que su padre los encuentre desnudos en alguna esquina de ese estupido salon de fiesta.

Eso me hace reir, y levanto la copa para brindar por ello.

- Amén.

Expando mi vista alrededor, encontrandome con los ojos de Axel. El me guiña un ojo dandome una sonrisa tierna, luego desvia la mirada a Brooke, que parece estar diciendo algo lo suficientemente interesante para llamar su atencion.

- ¿La extrañas?

Me giro hacia Kim.

- A tu madre, quiero decir.

- Ya han pasado trece años de eso.

Ella me mira incredula cuando nota que sonrio con nostalgia. Mi mejor amiga sabe que esta en lo correcto, que la extraño mas que a nadie en el mundo, y no puedo dejar de pensarlo cada dia que pasa.

- Es solo que -me lo pienso bien- no puedo evitar imaginar como seria si ella estuviera aqui. Con todos nosotros.

- Creo que te reñiria, por no ir ahí y decirle a tu esposo que tiene todo el derecho a besarte cuando quiera -contesta mientras señala con la cabeza hacia Jace-, pero como ella no esta, lo hare yo.

Ruedo los ojos dando otro largo sorbo a mi copa.

- No puedes solo ignorarlo -empieza-, segun mis calculos aun restan unos sesenta y dos dias para que termine todo esto, si es que el pierde.

- Va a perder.-aseguro.

- Como sea -dice ella quitandole importancia-, no puedes ignorarlo sesenta y dos dias mas. Asi que esta vez tendras que hacer algo para extinguir del aire esa tension cada vez que se miran.

- No hay ninguna tension. -me mira incredula- ¿Sabes que? Ire a ver como esta Gala.

Ella sonrie satisfecha, como si acabara de darle la razon. Doy un ultimo trago a mi copa antes de dejarla en una mesa y dirigirme a la jaula de mis felinos. Camino con la espalda recta, el vestido negro ceñido al cuerpo hasta la rodilla me hace lucir como una modelo de revista, por lo que seria totalmente inadecuado que por esta noche caminara como un duende. Abro la reja observando a Gala mover a sus cachorros hacia la cueva, y volviendo a dejarse caer adolorida.