13

4.6K 517 51
                                    

Pov. TaeHyung.

Han pasado dos días después del incidente con Jungkook, es domingo y me encuentro tirado en el sofá mal oliente de esta putrefacta casa, si es que se le puede llamar así. No estoy seguro si lo que pasó fue realmente un sueño, todo se miraba tan real y se sentía como si lo fuese. Pero él me dijo que quede dormido desde que llegue ahí.

Escucho la puerta de la casa abrirse de un jalón y dirijo mi vista a esta, para ver qué ha llegado mi "madre" y su odioso novio. Ahogados en alcohol, obviamente y sin novedad alguna. Es domingo y sería milagro que no llegara tomada a morirse ¿Por qué no puede ser una madre humilde normal? Se de gente que es más pobre que nosotros y viven con más amor del que me ha dado ella... ¿"Más"? Ella nunca me ha demostrado amor.
Regresé la mirada al televisor siente do como se dirigían hacia la habitación de ella, cuando de pronto ella y él se detienen en seco por qué ella frenó su caminar y por cuestiones de la lógica, el también lo hizo. —Kim TaeHyung... ¡Maldito bastado!— la escucho decir. Que asco que me llame de esa manera "Kim TaeHyung". No le hago caso alguno, pero aún siguen ahí parados, puedo sentirlo por la vista panorámica. —Te estoy hablando ¡Mocoso!— volvió a decir, pero como anteriormente paso, no le di respuesta alguna.
Pude sentir que se acercaba a mi, ya sabía lo que iba a ser, y aún así, no me quite, no me moví, no me defendí, no hice nada. Solo deje que me golpeara, como le gusta hacer cuando está ebria, para que cuando se le pase me mande a traerle más licor. Eso ha pasado desde que tenía 10, el señor de la licorera me conoce, a mí y a la dueña de esta casa, así que me lo vendía con facilidad.
Sus golpes no duelen tanto como los que me da su novio, pero aún así se sienten. Después de cansarse por fin se detiene, se detienen las cachetadas, puñetazos y una que otra patada. Y a pesar que duele algo leve, no digo nada, tomo mi chaqueta y salgo de ese lugar, dejando a mis espaldas millones de gritos horrorosos que provenían de aquella mujer.
Ya ni siquiera puedo llorar, recuerdo que cuando era pequeño no había día del año en el que yo no llorase por su maldita culpa. Hasta que conocí a Rap Monster, desde ese día yo no volví a llorar por un golpe, tal vez podía doler, pero si me quejaba eso era decirle al atacante que soy la víctima y que él ha ganado. Prefiero ser yo quien hacer llorar a las personas.

Mientras camino por las calles sin rumbo alguno siento mi celular vibrar desde mi bolsillo y no sé el porque, pero me emocione y pensé, deseé, en verdad quería que fuese Jungkook. Saqué el celular. Y mire que la llamado no era de "Kookie" sino de "ChimChimie". —¿Qué rayos? ¿A qué hora lo guardé de esa manera— me dije a mí mismo y contesté.

—¿Aló?
—TaeHyung, ¿Qué te parece mi nombre en tu celular?  Es lindo ¿No?
—Es tierno, pero no yo soy así. ¿Lo pusiste tu?
—Si... Tú nunca me guardarías así si te lo llegase a pedir.
—Bueno, tienes razón.
—¿Qué estás haciendo?
—Mhm... No sabría decirte. Pero estoy caminando sin rumbo y hablo con vos.
—Entonces, si no estás haciendo nada importante ¿Quieres venir a desayunar conmigo?
—¿Ir a donde?
—A mi departamento.
—¿Qué? Pensé que solo estarías aquí por un tiempo. Y... ¿Cómo es que tienes un departamento?
—Te explico cuando llegues, te mandare la dirección por texto. Chau chau.

Jimin colgó la llamada y me detuve solo para esperar que me llegara ala dirección por whatsapp, así así pasó, la puse en el navegador y unos 35 minutos después ya estaba afuera de su departamento esperando que me abriera.

—V, pasa...— Me dijo el pelirrojo señalándome adentro del lugar.
—Planeaba quedarme afuera, de hecho.
—No seas sarcástico o si te dejo afuera.
—No lo harías.

Jimin sonrió con una sonrisa que decía "tienes razón", él siempre ha sido muy bueno conmigo, de hecho creo que yo fui quien lo introdujo a este mundo.

La decoración era muy linda, no tenía habitaciones, la cama estaba al otro lado de la sala y la cocina en el tiro extremo, con una pequeña mesa para dos. Donde me senté con el, ya tenía la mesa puesta, un desayuno estilo americano; huevos estrellados, hotcakes, tocino, jugo de naranja y pan tostado.

—Se ve delicioso.
—Creo que también lo está— sonrío ansioso.
—¿Ahora ya me puedes decir cómo es que te quedaras y no te irás?
—El tío Bob dijo que me podría quedar acá y trabajar desde este lado.
—¿Enserio? Eso suena bien— Di mi primer bocado y si, estaba muy bueno.
—¿Qué tal?
—Esta bien.
—Me alegra oír eso...—Miro su plano con una pequeña sonrisa de victoria en los laboriosos y comenzó a comer.
—¿Cómo es que compraste este departamento?
—Aún lo estoy pagando...
—Eso no responde a mi pregunta.
—Pero V, estoy haciendo trabajos extras para el tío Bob.
—Oh, ya veo.
—V, Tú ganas más que yo ¿Porque no te vas de esa maldita casa? ¿Lo sigues ahorrando?
—si, quiero ver hasta cuánto aguanto ahí.
—Te estás matando.
—Lo sé.
—¿Porque juegas a eso? Ya no eres un niño— apretó sus cubiertos entre sus manos.
—Ya te dije que lo sé. Pero estoy acostumbrado a esto y no sé cómo vivir en paz.
—Vente a vivir conmigo.
—¿Eh?— Me tomaron de sorpresa sus palabras.
—El sofá se hace sillón cama.
—No puedo Jimin.
—Hay mucho espacio aquí para los dos... Solo te la pasas sufriendo en esa casa.
—Jimin, estoy bien.
—No, no lo estas... Tan solo mírate. Estas todo golpeado,
—No hay problema por esto.
—Solo quédate aquí. ¿Quieres?
—ya te dije que estoy bie— me interrumpió.
—¿Y si el niño ese te lo propusiera, te irías con el?— La voz de Jimin sonaba molesta.
—¿Qué niño?— le respondí estupefacto.
—El niño cara de rata ese...
—¿Jungkook?

Lo sé, corto, pero es que no he estado subiendo capítulo seguido xc, sorry.
El provino será más largo si puedo ❤️

Stigma [VKOOK-BTS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora