Estábamos tranquilamente escuchando música cuando entró la maestra de historia al salón para dar clase, aquí es algo incómodo ya que...mi maestra de historia resulta ser la mejor amiga de mi madre. Eso no es bueno...
La clase paso normal al igual que todo el día, en la escuela casi nunca pasa nada muy interesante que digamos.
La escuela acabó ya y Raúl no aparece por ningún lado, está retrasado 15 minutos y ya no hay nadie de mis amigos. Estoy sola y....
-Hola- una voz interrumpe mis pensamientos de soledad.
-oh...hola, no te vi. Creí que ya me había quedado sola aquí- le digo a Samuel, un chavo que va en mi salón, él solía gustarme cuando entre a la escuela.
-No...tranquila, aquí sigo yo- dice mientras se sienta a mi lado en una barda que está cerca de la entrada de la escuela, así puedo ver cuando llegue Raúl.
-Bien, y...¿Cómo vas con Savanna?- le digo a Samuel con mirada traviesa.
-Pues es algo complicado, ¿Te ha pasado que le dices a alguien que te gusta y esa persona te dice que le gusta alguien más?- me pregunta mientras se peina el cabello. No lo había notado, su cabello es hermoso.
-Am si...tú me lo dijiste- le digo sin dejar de apreciar su cabello negro y sedoso.
-¿En serio?- me pregunta sorprendido mientras se gira en sí para verme a los ojos.
-Si, el día que te dije que me gustabas me dijiste que a ti te gustaba Savanna- digo y peino su cabello que se movió ante su brusco movimiento- ¿No recuerdas?
-Ah si, ya recuerdo- dice y al instante se le suben los colores al rostro- perdona, me siento muy mal.
-No hay problema, gracias a eso renuncié a ti y busqué a alguien más- le ofrezco una sonrisa, pero después recuerdo que a quien encontré fue a Oscar y mi sonrisa se borra.
-¿Estás bien?- me dice Samuel, al parecer se dió cuenta de mi expresión.
-Si, lo siento
-Así que encontraste a alguien más, ¿Cómo va eso?- me dice con una sonrisa cálida que me hace suavizar el golpe al recordar la imagen de Oscar en el sillón de su casa esa noche.
-Me engañó- le digo y su sonrisa se borra de su rostro.
-Lo siento, no lo sabía...
-No te preocupes, está todo bien- lo interrumpo y le doy un toque en el hombro.
-okay hablemos de otra cosa ¿si?- dice Samuel
Cuando dijo eso, escuché una voz familiar en la entrada de la escuela seguido de un pitido del coche de Raúl.
-Vale, perdón se nos hizo tarde- se disculpa la voz, y sin verlo puedo reconocer al instante quién es.
-¿Héctor? ¿Qué haces aquí?- digo mientras salto de la barda dejando a Samuel ahí.
-Vine por ti, bueno...vinimos- señala el coche de Raúl- ¿Quién es él?- señala a Samuel, que sigue en la barda sentado.
-Es un amigo, me acompañó en lo que ustedes llegaban.- le digo cruzando los brazos.
-Pues ya llegamos. Vámonos- me quita la mochila del hombro y empieza a caminar al coche.
-Hey, no lo dejaré así- me doy la vuelta dejando a Héctor atrás y me dirijo a Samuel- ¿Vendrán por ti, o te irás solo?
-Me iré solo, pero estaba esperando a que llegaran por ti para no dejarte sola- dice mientras se baja la barda.
-¿Quieres que te llevemos?- le pregunto a mi amigo.
-No, está bien- entonces saca unas llaves de su mochila que parecen ser las de un coche- vengo en coche.
-No sabía que manejas- le digo mientras los dos caminamos a la salida.
-Si, me he estado enseñando- me señala su carro que está solo a unos metros del coche de Raúl.
-Eso es bueno, ya sé quién me podrá llevar a mi casa cuando estos inútiles se retrasen de nuevo.
-Claro, cuando gustes- me dice mientras me guiña un ojo y se dirige a su coche- nos vemos mañana Vale.
-Claro, hasta mañana- se sube a su coche y desaparece por la calle. Creo que encontré un buen amigo.
-¿Ya dejaste de coquetear?- me pregunta Héctor algo irritado desde el coche.
-¿Celoso?- dice Raúl en tono burlón.
-Solo es un amigo- digo con el mismo tono que Raúl mientras me subo al coche.
-¿No es el que te gustaba cuando entraste a la escuela?- dice Raúl mientras avanza por la calle.
-Sí, pero ya no me gusta- digo y trato de ver la reacción de Héctor por el espejo del acompañante- y a el le gusta Savanna.
-Que mala suerte para ti- espeta Héctor.
-No, que mala suerte para ti güey, ella persigue a uno que está enamorado de otra y tú la persigues a ella.- dice Raúl echándose a reír.
-¿Eso es cierto?- le digo a Héctor.
-Qué más dá, A ti te gusta él, ¿no? - dice algo enojado y decepcionado.
-¿Pero que les pasa a ustedes dos? Acabo de decir que no me gusta- digo en tono de risa- Además...tengo en la mirada alguien más- volteo a ver a Héctor quien se me queda viendo algo sorprendido.
-Agh que asco- dice Raúl y nos voltea a ver a ambos por el retrovisor- mejor hablemos de otra cosa. Héctor me guiña un ojo.
-¿por qué vamos los dos aquí atrás y el asiento del copiloto vacío? - pregunto para olvidarme de lo que acaba de pasar y para no ponerme roja.
-Porque aquí va mi computadora- dice Raúl.
-No mames güey- dice Héctor- ¿es en serio?
-Si güey. Y callense, si no les parece vayan caminando.
-Esta bien princesa, ya cálmate.- digo y miro por la ventana.
Llegamos a la casa y cuando entro, mi nariz se inunda con el olor de mi comida favorita que reposa en el comedor esperando por mí...
-¿Quién quiere pizza?- anuncia Raúl dejando su computadora y las llaves en la mesa de la sala.
-Hermano, eso ni se pregunta- digo mientras tomo un trozo y me lo como.
-Tranquila Vale, pareces animal- me dice Raúl mientras el devora una rebanada. Le saco la lengua y me dirijo a mi cuarto.
-¿A dónde vas?- me pregunta Héctor.
-A mi cuarto ¿no es evidente?- le digo con una sonrisa de burla.
-Osea voy por ti a la escuela, te compro pizza ¿y tu te vas a tu cuarto?- dice ofendido.
-En realidad, la pizza la compré yo- dice Raúl aún devorando su pizza.
-Tengo tarea que hacer, salgo cuando termine- digo y me dirijo a mi cuarto.
- A ver si sigo aquí para cuando tu decidas salir- dice Héctor en tono de chantaje.
-Seguirás aquí...te conviene- le guiño un ojo y me encierro en mi cuarto.
Ojalá siga aquí...en realidad no tengo tarea, pero me quería vestir bien, no quiero que me vea así. Tengo que impresionarlo.
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E.M.A.H. Enamorada Del Mejor Amigo De Mi Hermano
RomanceUna historia amorosa y algo cómica, pues imagina que el tipo más irritante de la vida vive enfrente de tu casa y es mejor amigo de tu hermano, pero se cambia de casa y desaparece... Tiempo después...vuelve mejor que nunca. Dándole a Vale el síntoma...