Deseo Ardiente I

Capítulo 27

Despues del grandioso sexo con Adrian, el se fue y se excuso con ir a hacer trabajo, me entristesi todo esto se resume a algo... Sexo, aveces recuerdo la platica que tuve con aquella mala arpia, ¿y si el si la amo?, no puedo permitirme pensar en eso, el es solo eso, sexo, sexo y mas maravillosamente sexo.

Me cambie por un pantalon colos caqui de franela y una camisa cafe de lino con mis tacones y una chaqueta de cuero, me tome mi pastilla y sali para encontrarme con Cole.

Tome mi Neon, y maneje los 20 minutos que hago de aquí a haya.

Al llegar a el gran edificio, de 60 y tantas plantas color marfil y de un estilo coloquial, subo al elevador y para mi sorpresa ahí esta el señor Snowden. Lo saludo profecionalmente y subo.

El baja en la planta 14, se despide de mi educadamente y yo hago lo mismo, sigo mi camino con algunas paradas en varias plantas, al llegar ahí esta Cole en el vestibulo de su despacho, hablando con alguien por telefono, trae un traje confeccionado justo a la medida color blanco con una camisa azul electrico y sin corbata, se ve casual y a la vez elegante, al verme hace un ademan de que lo espere y yo asiento con la cabeza, frunze el ceño y despues cuelga algo enfuruñado.

-¿Nos vamos?.-Pregunta tomando mi codo con el suyo, yo asiento y caminamos de nuevo al elevador.- ¿Que tal van los planes para hoy?.- Pregunta un poco mas amable de lo habitual.

-Bien, tenemos que ver la fabricacion y los ingredientes, tenemos tambien que hacer la suma aproximada de la inversion y un buen balance de ventas.- Explico profecional.

-Bien entonces vamos.- Dice y salimos del asensor.

Afuera nos espera un audi color negro 4x4, un chofer abre la puerta y entramos, nos ponemos al día con algunos papeles y algunas estadisticas de las inversiones, parece sorpendido, me elogea un par de veces mi trabajo, lo noto inusualmente extraño pero intento pasarlo por alto.

Llegamos a la gran fabrica donde se supone sera la primera de varias, sonrio al ver que mi sueño por el que tanto trabaje se esta construyendo, pasamos por varios lugares de la planta a ver la produccion, los ingredientes y la buena elaboracion, ya diseñe los paquetes donde los cosmeticos vendran, pronto tendremos que ver nuestra primera distribudora, checamos otros papeles y comparamos con la produccion.

Al final terminan dando las 5 de la tarde y nuestra jornada termina, De pronto me llega un mensaje de Adrian.

No quiero alarmarte, pero quiero que salgas de ahí. Ahora.

Adrian Urgente.

Mi pulso se acelera y miro de reojo a Cole quien me ve atravez de sus gafas interesado, intento ocultar como me siento y me pongo mas derecha y profecional.

-Cole tengo que irme.- Digo recogiendo rapidamente mis papeles del escritorio y guardandolos de la misma manera en mi carpeta.

-¿No quieres que te lleve Helena?.- Pregunta Educado Cole.

-No gracias, Adrian Vendra por mi.- Suelto sin pensar, maldigo para mis adentros por haberle soltado esa informacion.

-¿Sales con Adrian?.- Pregunta muy educado. Me desconcierta.

-No, Solo somos socios de negocios.- Y de algo mas, dice mi subconsiente la ignoro, ya cuando termino de recojer, me despido de Cole.

-Saluda de mi parte a Adrian.- Susurra amenazante, todos los vellos de mi cuerpo de erizan pero yo corro a la salida de la fabrica, al salir esta empezando a llovisnar, no veo el carro de Adrian de pronto se escucha un chirrido de llantas en la esquina y esta el Aston Martin Plateado de Adrian yendo a toda velocidad hacia mi.

Al pararce el me hace una seña para que suba, desesperado.

-Abrochate el cinturon.- Dice y arranca sin esperar.

-¡¿Me puedes decir que cojones pasa?!.- Gruño.- ¡Cuidado!.- Grito cuando gira rapidamente haciendo que me incline a un lado.

-¡Callate!.- Espeta con nerviosismo.

-¡Estas poniendo mi jodida vida en peligro y me pides que me calle!.- Subo la voz aun mas desesperada.

-Si te hubieras quedado ahí en esa trampa mortal si la estuvieras poniendo en peligro.- Dice ahora en un tono mas calmado.

Volteo por los espejos retrovisores y veo un audi color negro con vidrios polarizados aproximandose a toda velocidad a nosotros por la M40.

-¿Quien nos sigue?.- Murmuro aun con la mirada fija en el retrovisor.

-No importa quien nos siga.- Dice con tono autoritario.

-Claro que importa...

-Callate ya Helena.- Ordena cabreado.- Mira nena.- Susurra calmado.- Todo lo que pase o lo que pueda pasar no te involucra a ti, no quiero preguntas limitate a cooperar.- Me explica.- Ahora no te asustes pero quiero que abras la guantera.- Vuelve a dar otra mirada al retovisor.- ¡Ahora!.- Ordena.

Mis manos me tiemblan de miedo, abro la guantera y me asusto al ver su contenido.

-Sacala, nena no te asustes, Te nesesito.- Dice tratando de relajarme, saco poco a poco la pistola Calibre 22 de Aire comprimido.- Ahora no tengas miedo.- Da una vuelta brusca haciendo que la pistola caiga al suelo del auto.- ¡Recojela! ¡Recojela!.- Me grita, la recojo con las manos temblorosas.- Tendre que hacerlo yo, sosten el volante.- Dice calmado, mi cuerpo queda en total shok.- ¡Toma el volante Helena.- Grita, asustada lo tomo rapidamente, el no deja de pisar el acelerador, miro por el espejo retrovisor y veo que el Audi negro a aumentado la velocidad al igual que mi corazon, Adrian sobre su regazo mete las balas en la pistola y le quita el seguro.

-Listo nena.- Dice y toma de nuevo el control del auto.- No tengas miedo nena, yo estoy aquí, murmura tranquilizador.

Mi corazon late desembocado, todo lo que pase en estos proximos segundo puede marcar el principio o el fin de algo que nunca tal vez acabara... El final de nosotros dos...