39. Para siempre.

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— ¡Estás fuera de mi testamento y de la herencia! ¡Nada de esto te va a pertenecer algún día! ¡¿Oíste?!

— No es como si quisiera tener una empresa en quiebra a mi cargo, MingHyun.

MingHyun parecía estar al borde de un colapso mental, y podría sonar cruel, pero TaeMin no podía estar más feliz por eso, de hecho estaba disfrutando esta situación como nadie allí.

— Dios, ¿cómo fuiste capaz de hacer esto, TaeMin? ¡Estás realmente loco!

— Ajá, sí. O sea que porque elegí mi felicidad antes que la de ustedes, que han sido una mierda conmigo, ¿me convierte en un "loco"? Que lógica la tuya, papá. ¿Ustedes cuándo pensaron en mi felicidad antes que la ustedes? Nunca.

El hombre le lanzó una mirada matadora, pero él no se inmutó ni se mostró asustado como las veces anteriores. Por favor, ya no le debía nada a MingHyun, tampoco a Haeun quien ahora solo escuchaba en silencio y con serenidad. Era lo mejor, pensaba TaeMin, era mejor que no se metiera porque podría salir muy herida.

Pero él ya no tenía ganas de nada; honestamente no tenía ganas de causar daño, él solo quería aclarar las cosas, largarse de allí y olvidar este horrible episodio de su vida. Estaba seguro de que ignoraría a MingHyun y a Haeun por el resto de su vida, y le parecía que era lo ideal para poder vivir en paz.

Lo era, definitivamente.

— Cuando vuelvas vas a tener que atenerte a las consecuencias porque desde ahora en adelante las cosas van a cambiar mucho para ti, nada va a ser como-

— ¿Y tú crees que yo voy a volver a esta mierda de casa con esta mierda de gente? —Cuestionó incrédulo, estrechando los ojos— Qué equivocado estás. No pienso volver, y de no ser por el padre de MinHo yo ni siquiera estaría aquí dándoles mi última explicación, ¡Cuando ni siquiera debería estar dándoles una jodida explicación si ustedes saben el por qué no fui a la iglesia a casarme con Naeun!

— ¡¿Cómo que no vas a volver, TaeMin?! —Saltó Haeun, frunciendo el ceño con molestia. Él la miró inexpresivo— ¡Vas a volver a esta casa! ¡Te lo exijo!

Él rió con burla.

— Claro, no esperaba menos de ti, mamá. Tú como siempre "exigiendo".

— ¡A mí me respetas, TaeMin! —Gritó ella— Mañana mismo te devuelves a la casa-

— Él no va a volver, señora —Se metió MinHo, reafirmando lo que había dicho TaeMin segundos atrás—. Ya lo escuchó. Además, no es por nada, pero él va a estar mejor con mis padres y conmigo que con ustedes.

— ¡Por dios! ¡Nosotros somos su familia!

— ¿Ah sí? No lo parecen —Dijo MinHo, con evidente ironía—. Si usted, señora, realmente quiere a su hijo, entonces le dejará ser feliz a su manera.

Haeun apartó la mirada, suspirando y decidiendo quedarse callada.

— Déjalos, Haeun, no vale la pena... De todas maneras, ¿Para qué lo queremos aquí? Solo será un estorbo.

Si MingHyun pensaba que con esa declaración iba a hacer sentir mal a TaeMin, estaba más que simplemente equivocado, estaba completamente errado porque lejos de sentir dolor, TaeMin cada vez sentía su ansiada libertad más cerca.

Y ya le daba igual todo lo que le dijeran sus disque "padres".

Se encogió de hombros, desinteresado.

Pretending To Be Gay (2Min)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora