7.

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Me encontraba corriendo a toda velocidad por un bosque desconocido, y si seguía asi, mis piernas no me responderían ya. Tenia que escapar. El sudor y el miedo se apoderaban de mi. Gire mi cabeza y ahí estaban, siguiéndome.
Corrí con mucha mas velocidad.Mi cuerpo hablaba por si solo. Fue en ese momento cuando vi una pequeña casita seguramente abandonada y sin dudarlo decidí esconderme allí. Les llevaba una gran ventaja de todas formas.
Entre sin ni siquiera frenarme y subí las escaleras hasta encontrarme con un cuarto. Me metí adentro y trate de esconderme en un ropero. Hasta que sentí unos pasos.
Estaban aquí.

-¡Busquen arriba, no se debe escapar!.-grito uno.

En menos de un segundo, escuche pasos subiendo las escaleras. No dude y Salí rápidamente de mi escondite, me subí a una ventana que daba al patio trasero, donde no había nadie. El miedo me estaba haciendo pasar una mala jugada. Sin pensarlo, salte. Caí en el césped con mis manos apoyándome. Trate de levantarme pero mi pie se había estancado con un agujero. Tire con todas mis fuerzas, tratando de zafarme.

-¡Rayos! .-murmure mientras me quejaba. Sentí una presencia delante mío. Ya era tarde. Me habían encontrado. Gire mi cabeza y levante mi mirada. Adam estaba parado delante mío con un arma apuntándome.

Me desperté sobresaltada e instantáneamente me senté en mi cama. Mi corazón estaba bombeando a mil por minuto, toque mi frente y estaba sudando. Había tenido una pesadilla, sin duda. Mire mi despertador y eran las 5:00 am. Tenia clases.
Cuando trate de ya estar relajada, me dirigí hacia el baño y me di una ducha. Lave mis dientes y peine mi cabello. Me enrolle el cuerpo en una toalla y Salí hacia mi cuarto.
Abrí mi ropero y saque ropa interior, unos jeans negros y una blusa rosa que las mangas llegaban hasta mi codo.
Estábamos empezando Agosto, pero por muy raro que sea, hoy no hacia frio. Me coloque mis converse blancas, y me dedique a maquillarme con algo leve, mientras me ponía perfume.
En cuanto termine, baje y estaba mi madre en la cocina preparando el desayuno.

-Buenos días.-murmure mientras me sentaba en la barra-

Se giro para observarme y me dedico una mirada extraña. -¿Qué ha pasado con la Thea de todas las mañanas?-

Suspire y trate de pensar en la maldita pesadilla. -He tenido un sueño raro, es por eso- le dije mientras se sentaba frente mío y me entregaba mi café-

-¿Qué has soñado? -pregunto curiosa mientras le daba un sorbo a su café-

Le explique lo que había visto en mis sueños, evitando la parte de Adam y a medida que le decía, su rostro se transformaba en como le hubiera dado la peor noticias de todas.

-¿Mama? ¿Pasa algo? .-le pregunte confusa-

Me miro con miedo en sus ojos y se levanto sin responderme, agarro sus cosas,planto un beso en mi frente y se fue. Dejándome mas confusa que antes.
Suspire, y sin seguir pensando en lo que acababa de ocurrir recien, agarre mis cosas, me coloque un sweater liviano y decidí caminar hacia el instituto para despejarme.

Mientras mas caminaba, mas preguntas salían de mi mente. ¿Por qué Adam estaba metiendo en ese sueño? ¿Por qué mi madre reacciono de esa manera? Para mi era tan solo una pesadilla, pero su reacción hizo hacerme pensar. ¿Por qué Adam me querría disparar? Negué con mi cabeza. Era una locura lo que estaba pasando por mi mente. Fue solo una pesadilla Thea, me repetí
Recordé lo ultimo que me dijo esa noche. Luego de eso,cuando desperté, se había marchado. Desde ahí no he sabido nada de el. Ni siquiera se porque lo buscaban, y me maldije a mi misma por no habérselo preguntado.
Cuando me quise dar cuenta, había llegado al instituto, así que me dirigí hacia la puerta principal  y un fuerte sonido del motor de una moto hizo darme vuelta inconscientemente.

Ahí estaba el. Llevaba puesto un jeans negro ajustado, junto con una camiseta azul Francia también apretada al cuerpo que dejaba ver sus brazos bien torneados y le resaltaba su piel trigueña.
Cualquier chica quedaría embobada con tan solo verlo. Tenia todo para ser el "chico perfecto", menos para mi. Su ego y su personalidad muy ''yo'' me hacia verlo repugnante.
Es raro que este diciendo esto, cuando tuvo que ocultarse en mi casa. Pero eso no cambiaría mi critica hacia el.
Como un típico cachorro siguiendo a su dueño, se le pego Lisa. Que llevaba nada mas su traje de porrista,  dejando  ver mitad de su culo. No había que conocerla para saber que era una zorra profesional.

Negué levemente con la cabeza, cuando vi el cabello colorado de una chica corriendo hacia mi y gritando mi nombre.Sin duda que Lila parecía una niña pequeña. Reí ante mi pensamiento y desvié mimirada otra vez hacia Adam. Esta vez sus ojos me estaban mirando fijamente.
Le sostuve la mirada unos segundos, y me dedico una sonrisa torcida, y sin ser conciente, mis mejillas estaban rojas. Trate de mirar para otro lado, ocultando mi ridícula postura hacia él, cuando Lila llego a mi lado.

-¡Thea! A que no sabes, mira esto.-levanto su mano, mostrando tres boletos. La mire confusa, con el ceño fruncido. A lo que respondió negando levemente con la cabeza.- Son entradas vip para la fiesta del año, este sábado. -sonrió-

No podía creerlo. ¿Lila queriendo ir a una fiesta sin obligarla?.-Lila, ¿tu queriendo ir a una fiesta? ¿De que me perdí? .-le dije divertida-

Se encogió de hombros y sonrió tímidamente. -Kila las ha comprado, e iremos con sus amigos de la universidad. -Ya encajaba todo, a Lila le gustaba uno de esos chicos. Le dedique una sonrisa divertida, mientras ella se ponía colorada.-Bueno, si. Capaz me guste uno de ellos..-dijo tímidamente-

Reí con una fuerte carcajada,ante su comentario, cuando alguien paso por mi lado, y sin ''querer" choco mi hombro. Escuche un ''lo siento'' irónico y sabia de quien se trataba.Me di vuelta y lo mire con cara de pocos amigos.

-Idiota.-murmure, mientras el reía y se iba todavía con su cachorrito colgado en su brazo, que no tardo en fulminarme con la mirada.

-¿Y eso?.-me pregunto Lila. -

Negué con la cabeza, diciéndole que no sabia el porque, agarre su brazo y nos dirigimos a clases.

Mi mundo dado vuelta ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora