''Con el tiempo quizás, te vea una vez mas
y logremos cambiar todo lo que hicimos mal
y no se, si fueras un fallo te volvería a cometer.Tropezaría mil veces contigo. ''
ADAM:
No podía siquiera querer entender lo que este tipo estaba haciendo, no me quedaban dudas de que estaba hecho un maldito psicópata pero falle al pensar que no volvería, que no volvería a asustar a Thea.
El solo hecho de pensar que el podia posar sus manos en el cuerpo de ella me convertía en un maldito loco. Si ella tuviera un simple rasguño juraría que lo mataria.
Sabía a lo que me estaba enfrentando, pero no me importaba en esos momentos.
Al llegar corriendo hacia donde estaba casi toda la gente todavía sorprendida y aterrorizada por la situación de hace unos momentos, busque con mi mirada a quienes estaba buscando y al verlos, ellos corrieron a mí.
-¿Cómo estás? –Tom fue el primero en preguntar, tratando de calmar la situación.
Negué con cabeza. –Tengo que ir tras ellos.
Lila chillo horrizada y emitió un sollozo. –Por favor, hay que llamar a la policía. –dijo desesperada. -¡No puede llevarse a Thea!
La mire entendiéndola perfectamente y apreté sus hombros delicadamente. –No se la llevara tan lejos.
Tom me miro con duda sobre mi idea pero Nick se adelanto hacia nosotros y me tendió su llave del auto.
-Tráemela de vuelta. –dijo entonces con su voz preocupada. –Yo me encargare de avisarle a los oficiales.
Asentí y agite las llaves entre mis dedos, deje mi casco en el suelo y corrí hacia el estacionamiento. No podía perder siquiera un segundo. Antes de que pudiera meter la llave en la puerta, oí como gritaban mi nombre y al darme vuelta, gruñí frustrado.
-Kila, no tengo tiempo ahora de tus estúpidos berrinches. –solté.
-Lo sé. –dijo asintiendo. –Adam, Dereck es mi primo y puedo ser de ayuda. Déjame ir contigo.
Fruncí el ceño. –Ni lo pienses. –di la vuelta nuevamente.
-¡Soy la única que puede ayudarte en estos momentos! –exclamo acercándose detrás de mi. –El es mi familia, y lo hemos estado buscando durante meses. Solo quiero ir a buscarlo.
Analice unos segundos sus palabras y aunque no me convencía cien por ciento, asentí y le indique con mi dedo que se subiera de copiloto en la camioneta. Rápidamente subimos y arranque el coche a toda velocidad, dejando el instituto.
Con una mano tome mi móvil sin perder la vista de ahora la carretera y se lo tendí a Kila. –Marca esa numero y ponlo en altavoz. –concluí y ella hizo caso a lo que le pedí. Al tercer tono, atendió.
Ni siquiera le di tiempo de preguntar quién era. –Tiene a Thea.
-¿Dónde estás? –dijo entonces Beck con preocupación.
Le indique por donde estaba conduciendo sin tener una dirección segura y el corto la llamada, avisándoles a los demás por ayuda. Mire a Kila de reojo quien se encontraba demasiado nerviosa mordisqueando sus uñas, tal como había hecho Thea alguna vez y me estremecí. No podía siquiera pensar en perderla.
ESTÁS LEYENDO
Mi mundo dado vuelta ©
Romance«Las mentiras pueden traer consecuencias a lo largo de tu vida. Familia, amor, amistades. Todos mienten. Tu lo haces. Entonces, ¿quien es el culpable? » Puesto #873 el 20/8 en Romance Está demás decir que se prohíbe la copia y/o adaptación. ...