Mi mundo dado vuelta ©

22.

Unas voces hablando en murmuro me hicieron despertar. Abrí los ojos lentamente y trate de sentarme sobre la cama donde me encontraba, pero un pequeño pinchazo en mi brazo derecho me hizo detener y gruñí.
Mire hacia él y tenia inyectada una aguja con una bolsa de suero. ¿Qué rayos me había pasado?
Trate de recordar lo que había pasado la noche pasada, pero mi memoria se encontraba en blanco.
Observe toda la habitación y suspire. Gire mi cabeza hacia la puerta cuando oí que se abría dándole paso a un Nick con un rostro lleno de preocupación. Una leve risa salió de mi al verlo así. Atrás le seguía mi amiga colorada con el rostro serio, junto con Tom y el Doctor.

-¿Cómo te sientes, Thea? .-pregunto este ultimo.

-Bien, creo .-admití- ¿Qué me ha pasado?

Vi como le daba una ojeada a su libreta y suspiro.- Has tenido una intoxicación bastante grave. -admitió- Te han puesto una especie de droga dentro de tu bebida, al parecer bastante fuerte para tu organismo. –miro hacia mis amigos- Considerando también que tu cuerpo contenía una cierta cantidad de alcohol.

-¿Y porque la bolsa de suero? .-cuestione alarmada.

-Te hemos hecho un raspaje de estomago. Tuvimos que sacarte toda la cantidad posible de la sustancia, porque podría ser perjudicial para ti. –suspiro.- El suero se te ha colocado para darle hidratación a tu cuerpo, ya que al hacer el tratamiento, lo necesitabas. –me observo- En unas horas vendré a controlarte de nuevo, tendrás que hacer bastante reposo y sobre todo, tendrás que quedarte en observación durante unos dos días y si todo está con normalidad, podrás irte .-me sonrió y salió por la puerta-

Largue todo el aire contenido dentro de mí y sentí como Nick se acercaba a mí, mientras le daba un beso a mi frente. –Me he dado el susto del año, bella

Reí inocente y mire a mi amiga.-¿Qué haces aquí? ¿No tendrían que estar en Portland? .-cuestione

Lila asintió y suspiro- Pero Nick llamo a mitad de la noche y no dudamos en dar la vuelta por ti. ¿Quieres explicarme que ha pasado? .-cuestiono ella mientras se sentaba en un asiento junto mi derecha-

-Yo los dejare un rato solos .-hablo Tom- Iré a buscar café .-y dicho eso, salió por la puerta-

Mire a mis dos amigos y suspire.-Ha sido Adam.. –admití mientras jugaba con mis dedos- No tienen que decírmelo, sé que he sido una tonta.. –tarde unos minutos tratando de recordar- Recuerdo que quería un trago solamente y un chico extraño se acerco a mí, dándome ese vaso. -negué con la cabeza- Luego de ahí, no recuerdo mas

Oí a Nick suspirar y tomo mi mano.-Creo que esta vez tendrás que darle las gracias a Adam, T. Se ha preocupado por ti. 

Cerré mis ojos con fuerza al escuchar su nombre. Sabía que él me había traído hasta aquí. Pero esto no justificaba su perdón. Recordé sus labios sobre los míos y mi cuerpo se estremeció.

Asentí levemente con la cabeza.- Lo sé..-murmure mientras él se levantaba de su asiento y besaba de nuevo mi frente, para así salir y dejarme con Lila- Se que seguro pensar..

Me interrumpió.-No, Thea. –suspiro- Solo quiero que estés bien.

Analice sus palabras y me recosté sobre la almohada. Después de unas horas de hablar con mi amiga colorada, el Dr. llego a observarme. Le habían avisado a mi madre y se encontraba en camino. Se vendría un fuerte sermón de ella y no estaba preparada.
Cuando menos me di cuenta, se había hecho de noche. Mis amigos se habían ido a sus hogares y la enfermera trajo mi cena.
Y en cuanto termine, tome los medicamentos que me habían asignado. Me sentía cansada, agotada. Así que recosté mi cabeza sobre la almohada y concilie el sueño.

Desperté en medio de la noche sintiendo como una mano tocaba mi cabello suavemente. Fruncí el ceño y mire hacia mi derecha.

-¿Adam? –murmure con la voz rasposa- ¿Qué hace..

Sentí sus labios sobre los míos interrumpiéndome. Fue un beso suave, intenso pero corto. Dejándome con ganas de mas.

-¿Cómo te sientes? –cuestiono luego de unos segundos-

-Mejor.-lo mire a los ojos- ¿Qué haces aquí, Adam?

-Yo no.. –suspiro- La ansiedad me estaba matando .-tardo unos segundos-Necesitaba verte.-confeso

Sentí mi corazón acelerarse ante tal confesión. Las ganas de poder atraerlohacia mí y besarlo, me eran incontrolables, pero la aguja impedía que pudierahacerlo. Y por un lado, lo agradecía. No quería sentirme estúpida nuevamente.No quería sentirme débil de nuevo ante él.
Solamente, no podía venir hacia mí como si nada y besarme, y luego rechazarme.
-Adam.. –dije mientras negaba con la cabeza levemente- No puedes venir ybesarme como si nada hubiera pasado. –lo mire- No soy lo que tú quieres.

-Tu eres lo que quiero, Thea. –confeso mirándome fijamente a los ojos.- Megusta estar contigo, me siento bien. Tú me haces bien. –rasco su cien en modode nervios y prosiguió- No sé cómo paso todo esto. Desde el beso de la fiesta,no he dejado de pensar en ti. –suspiro y se levanto de el asiento- Pero nopuedo estar contigo. Luego de lo que pase, no querrás volver a verme.

Analice su última frase y fruncí el ceño una vez más.-¿Qué es lo que pasara,Adam? –cuestione- ¿Qué rayos pasa contigo?

Negó con la cabeza.-Estoy tratando de salvarte, Thea. Hay mucho mas detrás de míde lo que sabes. –admitió- Y tu no estás lista para eso.

Sentí mi cuerpo arder y no era precisamente por calor. Más bien era furia,enojo. ¿Cómo podía venir y decirme lo que siente, para que luego me diga que nopodemos intentarlo? Lo empezaba a odiar, tenía que admitirlo. Sus palabras habíanhecho una revolución dentro de mí. No podía evitarlo, todo esto me sobrepasaba.

-Tu no sabes nada de mí, Adam. –espete- Solo vete, ¿sí? –alcance a decir antesde que las lagrimas se derramaran por mis mejillas

-Créeme que si me importas, y por eso hago esto.-murmuro y salió por la puerta,dejándome a mi envuelta en llantos.