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Estábamos todos demasiados tristes, me dolía ver a Jungkook de esa forma, sé que trataba de hacerce el fuerte pero por las noches podía escucharlo mientras soñaba.

Aún no habíamos hablado de lo sucedido, yo para estas fechas sabía perfectamente en que estaban involucrados todos ellos. O al menos me daba una idea.

Me costó aceptarlo, era algo que íba en contra de lo que mis padres me habían enseñado, pero aún no podía juzgarlos, no sabía exactamente cuál era su dichoso trabajo o que hacían exactamente.

Pero Tae dió de nuevo su libertad por mí. afortunadamete Tae logró sobrevivir pero estaba ahora detrás de las rejas, él se hecho la culpa por los sujetos muertos en mi casa, y sin embargo Jin No lo logró.

Ahora me encontraba sentada pensando en todo lo ocurrido durante un lapso de tiempo tan corto, estaba balanceando mis pies de adelante hacía tras en la cama de Jungkook.

No podía regresar a mi casa, la policía me estaba buscando, practicamente estaba como profuga de justicia, y a estas horas me imaginaba que incluso mi padre lo sabía.

Jungkook se encontraba abajo estaban platicando los chicos entre ellos, y yo no podía estar husmeando, y realmente yo ni siquiera tenía las ganas y fuerzas para hacerlo.

Habían pasado ya 3 dias y medio de la muerte de Jin, me dolió bastante, sobre todo por que estuvo en mis brazos, tenía su sangre en mis manos y cuerpo, era la segunda ocasión en la que veía un cuerpo, no era para mí una sensación cómoda. Mis pesadillas habían vuelto de nuevo y muchos de ellos parecía que se hacían realidad.

No tenía la mínima idea de como reaccionar a lo ocurrido, simplemente permanecía en silencio, había matado a unos hombres, gente que no conocía y aún no sabía cómo había sacado el coraje para hacerlo.

No podía ir a la escuela, no podía salir de la casa de Jungkook, ahora sólo tenía a él y la petaca de dinero.

Miraba el piso de madera que adornaba su cuarto mi cabeza pensaba demasiado pero no solucionaba nada ni mucho menos tenía las respuestas que el mismo exigía.

La perilla de repente se movió, mi cuerpo reaccionaba con un brinco inconsciente, éstos días había reaccionado de la misma forma, me suponía que era por que tenía los nervios de punta.

-te encuentras bién? -entró Jungkook silenciosamente.

-Estoy bién. -sentía un poco de corage hacia él por todo lo que estaba pasando.

-Tenemos que hablar. -se sentó alado de mí hundiendo un poco la cama.

-No sé de que podemos hablar.

-De todo ésto Alice. -agarró mi mano acariciándola.

-Viste la petaca?

-Si, también la nota.- volteé a verlo a los ojos. Sus hermosos ojos ahora se veían cafes, tenía notables círculos alrededor de ellos y brillaban como si hubiese llorado.

-Por qué, Jungkook, por qué diablos esta pasando todo ésto?

-Lo siento Alice es algo que se salió de control, jamás quice involucrarte. Los siento tanto. -tomó su cabeza con ambas manos con desesperación.

-Por que jamás me lo dijiste? Sabía lo de Taehyung, pero de tí jamás lo hubiese pensado.

-No lo sé Alice, no quería talves involucrarte mas de la cuenta, pero de nada sirvió. Te amo. -se arrodillo enfrente de mí quedando cara a cara.

Mi corazón daba brincos fuertes cada vez que pronunciaba esa palabra. Y sabía que la chica dentro de mí, quería saltar hacía él y besarlo por todos lados. Mi enamoramiento hacía él era demasiado tanto que sentía que me quedaba sin aire y me dolía el pecho.

La Secta (Bts) [Terminada] EDIT Donde viven las historias. Descúbrelo ahora