La Secta (Bts) [Terminada] EDIT

31.Confiar, Confiar.

La multitud de matones y drogadictos nos miraban, tenía que calmarlo antes de que terminaramos golpeados.

-Tengo que hablar contigo. -le dije serio. soltó una risa sarcástica, estaba borracho pero aún estaba consciente.

-No tengo nada que hablar contigo. -se volteó dandome la espalda.

-es importante Jimin.-me senté a un lado de él en un banco de madera.

-No hay nada importante entre nosotros dos.

-Ni siquiera Alice??.-le dió un trago a la botella y me volteó a ver.

-Ya te cansaste de ella??.-nisiquiera podía decír su nombre.

-Jimin es enserio, necesito que me escuches, no lo hagas por mí hazlo por ella.

-No quiero saber nada de Alicia.

Era un maldito necio, y estaba dolido.

-Tu eres a la única persona que le podía confiar ésta información.-me volteó a ver, sabía que aún le interesaba Alice, eso me afectaba pero no podía hecharlo a perder.

-No me importa. -lo ví pasar saliva, mentía.

Sin importarme seguí con lo que tenía que decirle.

-Alice, tuvo una infancia traumática, por alguna razón ella lo omitió de su cabeza. -sabía que quería voltear a verme, pero a toda costa se negaba a hacerlo. -En el funeral de Susy su padre me lo contó, ella es adoptada ya que su padre biológico abusó de ella sexualmente.

Traté de ser lo mas directo y rápido para llegar al punto. Me dolía contarle eso y en mi mente se venía la escena de Alice pequeña siendo abusada por un maldito hombre asqueroso y repugnante, sentía que quería matar a alguién cada vez que lo recordaba.

Jimin al ver mí reacción, me ofreció la botella. La tomé de inmediato necesitaba tranquilizarme para hablar con Jimin.

-Por qué me cuentas todo ésto?

-apesar de todo, eres mi amigo y confió en tí.

-Maldita sea Jungkook!!!. -sus manos se apretaron con fuerza. -por qué no me dijiste eso antes?

-Eso no importa, lo importante ahora es, que quiero que si me llega a pasar algo, te la lleves lejos, la protejas y la ames tanto como yo.

-No va a pasar nada contigo Jeon.

-No lo sé Jimin todo ésto se esta saliendo de control, sabes a que me refiero.

Volvió a tomar un sorbo de la botella y me la dió. Tomé de igual forma un sorbo y la dejé en la barra.

-Vete ya de aquí, a ellos no les agradas.- Volteé a ver a unos sujetos que me miraban.-no voy a defenderte de ellos aunque te la debo.-recordé aquél momento que lo defendí en la costa cuando robamos la mercancía.

-Deja de venir aquí, y dejá de alcoholizarte, nuestro amigo ya no va a volver. Alice te necesita, piénsalo.

Me paré del asiento, dejé un billete en la barra, sin antes no volver a ver a esos sujetos, lo sé era un maldito busca pleitos y además ninguno era capaz de hacerme sentir miedo o hacerme menos. Me gustaba pelear.

A la única persona que le temía era a Alice, no por que me pudiera regañar. No. Si no que temía que me dejara, que no pudiera volver a verla, cagarla de nuevo, alejarla de mí, que no confiara o que le pudieran hacer algo. Ella era mi debilidad, la que hace algunos meses atrás no tenía. Ahora por primera vez le temía a la muerte, temía morir y no volverla a verla jamás, que no hubiera nadie para protegerla. Alice para mi era un pequeño cristal hermoso, brillante ante mis ojos, lleno de colores, indefenso, tanto que con el mismo aire se rompiera. Aunque realmente era un diamante duro que no cualquiera podía romper. Si la mirabas demasiado podia ser capaz de ser hipnotizado por su grandeza y belleza.