Perdóname

Re modelar

Capitulo 8. Re modelar

Aún estaba completamente anonadada por aquella propuesta que ahora era el padre quien se la lanzaba, ¿acaso era cierto?

—¿Quieres que viva con ustedes?

—Claro, ¿Por qué no? Además...de esa manera no creo que el hogar se sienta tan solitario, ya casi ni yo ni mis hijos pasamos allí

—...—Ella solo lo miro, sabiendo que simplemente él estaba intentando seguir adelante pero evadiendo muchas cosas, aunque comprendía que tarde o temprano debería volver a ese hogar aún no se sentía listo para entrar solo— No sé qué decir, después de todo Padre daba por sentado que me iría a vivir con él en el complejo Hyuga

—Yo hablare con él, pero todo depende de la decisión que tomes

— ¿Crees que sea algo tan fácil?, recuerda que aunque tenga su apariencia...soy solo una simple extraña

—No lo eres, ya nos conocíamos ¿acaso lo has olvidado dettebayo? —Le regalo una cálida sonrisa para que no pudiera rechazar aquel ofrecimiento, no era algo con doble sentido, solo una simple petición para alguien que ya consideraba un amigo más

—En ese caso, si padre no pone un pero...creo que está bien

—Gracias Hina, esa es la respuesta que necesitaba

¿Quién podía imaginar que detrás de aquel ser capaz de regalar sonrisas tan hermosas, estuviera tan roto? Hina ciertamente no tenía la respuesta, porque ella jamás había conocido a alguien tan parecido a Naruto Uzumaki. Menma ni siquiera le llegaba a los talones...

Y como se había hecho costumbre entre los dos rellenaron luego de conversaciones triviales la atmosfera, ignorando un espectador que fue capaz de oír toda la conversación importante de principio a fin.

Esa misma tarde, apenas dejo a solas a Hina. Se dirigió con ánimo algo renovado a la mansión Hyuga para hablar sobre el destino de la hermosa adolecente.

— ¿Quieres vivir con Hina? —Algo sorprendido Hiashi observo al rubio después de que explicara sus razones para querer que la chica viviera en casa Uzumaki.

—Los niños se han encariñado mucho con ella, y debido a mi trabajo...

—Entiendo, tal vez sea buena idea. He visto que ella te tiene verdadera confianza...—Sabiendo bien que Hina fue violada, y el que confiara en un hombre era un gran paso para poder sobrepasar todo— Me parece buena idea, que viva contigo hasta la llegada de Hinata de su misión

—Así es...—El rubio solo tomo un sorbo de té, a callando los pensamientos que le gritaban que su esposa jamás volvería por estar revolcándose con el Uchiha.

Cuando el destino de Hina fue forjado, en la torre del Hokage un pelirrojo le daba vueltas y vueltas a la conversación privada que oyó.

El gran secreto que guardaba Naruto, aquello que nadie debía saber... se trataba de una horrible infidelidad que detonaría como dinamita en su momento.

—Él lo ha decidido callar...pero si el Uchiha aparece por Suna...le traeré su cabeza a Naruto—Decidió guardar igual el secreto, hasta por ultimo hablarlo con su amigo.

Las cosas ya se iban hilando por sí mismas, mientras rápidamente aquel día pasaba entre pequeños juramentos.

Y para cuando el sol estuvo en lo alto, a primera hora Hina era arrastrada por unos revoltosos pequeños que con gran emoción la guiaban a su nueva morada.

— ¡Mami! ¡Te gustara vivir aquí, hay muchas flores!

— ¡Podremos jugar mucho más tiempo dettebasa!

Los gritos de júbilo de ambos pequeños la mareaban de una forma divertida, mientras su pequeñas manos se aferraban con fuerza a la suya.

—Ya, ya niños...la van aburrir y se va a querer ir—Comento travieso el Hokage que iba adelante, colándose en la divertida excursión

—Cállate viejo, tú la aburrirás si le habas de tu estúpido trabajo

—Son muy animados los Uzumaki por la mañana

—Shino-sensei dice que lo somos no solo las mañanas, las tardes y noches también dettebasa

—¡Estamos felices, felices que mami Hina viva con nosotros!

—¡Pasaremos más tiempo como una familia!

Los adultos solo guardaron silencio ante aquel último comentario, los pequeños se veían felices apenas supieron que ella efectivamente conviviría con ellos. Para ellos solo significaba que la familia de una u otra manera volverían a estar unida.

—Solo falta que mamá vuelva

Dulce y amarga inocencia infantil resonó por todo el camino, la gloriosa bulla ya no llegaba a los adultos, pues ellos sabían que tal vez la madre jamás volvería y si volvía... ¿Cómo explicarles a ellos que Hinata los abandono?

—Ya llegamos...bienvenida a la casa Uzumaki Hina—La voz algo seria del rubio hizo eco en su cabeza, rompiendo sus pensamientos para ser llevada por los pequeños. El interior se veía acogedor pero... aquella gran casa parecía algo solitaria, sucia y desordenada como si la noche anterior hubiera pasado una gran tormenta.

Tal vez no fue la noche anterior...

Tal vez solo fue el resultado de un esposo furioso y desecho que no hayo ninguna pertenecía importante de su esposa...

— ¿Qué le paso a la casa?... —La pequeña Hima miro asombrada el lugar, no era como lo recordaba. Si bien no había entrado a su casa desde que su madre se había ido de misión, el lugar no estaba desastroso

—Parece que hubiera habido una pelea, ¿Habrá sido un ladrón dettebasa?

—L-lo siento, no tuve tiempo para arreglar...—Rascándose nervioso la mejilla el Hokage trago saliva, recordando por que no había vuelto a entrar a la casa, técnicamente la había destruido, desquitándose con el bonito hogar que Hinata escogió para iniciar su vida allí—ni siquiera alcance a botar el colchón...—Mirando con genuina rabia el colchón matrimonial roto, ¿Cuántas veces Hinata se había acostado con Sasuke allí?, imaginarlo le daba asco, recordar aquel beso entre ambos le daba ganas de matar al pelinegro y bailar sobre su cadáver...

Se había desquitado con cada uno de los muebles, torturando a su mente con el recuerdo de ese bastardo besando, tocando y haciéndole amor a su esposa en cada rincón.

Mientras el como idiota pensaba, que ella nunca le seria infiel, que ella jamas hubiera caído por el "encanto Uchiha", pero solo fue un imbécil más. 

— ¡Naruto! —la calidez de las manos de la muchacha tomando una de las suyas lo hizo reaccionar, había activado su energía con la clara intención de seguir machacando aquel lugar, y en presencia de los niños... ¿Qué clase de adulto y padre era?

—Y-yo...lo siento...yo...

—Iras a buscar algo con que limpiar...hay mucho que limpiar y remodelar... ¿Verdad niños?

— ¿Podemos pintar pandas?

— ¿Por qué no?

— ¿Podemos pintar hamburguesas?

—Nos tomara mucho tiempo, pero... tal vez la casa necesita un cambio, aunque yo solo soy una simple invitada... ¿Qué opinas tu Naruto?

—... ¿podemos hacer un cuarto del ramen?—Comprendiendo después de un tiempo que Hina solo suavizo las cosas, los niños ya no pensaban que había entrado un ladrón, y simplemente pensaron que era momento de arreglar la casa.

Tal vez...no fue mala idea traerla a la casa Uzumaki.

Continuara.

Disculpen lo poco y simple, pero apenas ayer llegue de las vacaciones, fueron largas y como que se me olvidaron muchas cosas pero le hecho ganas de verdad.

Gaara ya lo sabe, y ¿si el se topa primero con los amantes?

Naruto se ha desquitado con la casa, ¿lograra tener un cuarto del ramen? xD