Noches en Noruega

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Una ligera lluvia les dio la bienvenida. Llegaron y un auto les esperaba.

¿Ms. Volkova? ―el conductor se dirigió a ella en noruego―. Su hermana me pidió que les llevara a su hogar, puedo ayudarle con su equipaje.

Verónica se sintió extrañada de ser llamada "Volkova", ese apellido no era real. A nadie le pertenecía, sólo a la familia falsa que tuvo como humana. Sonrió, extrañaba hablar en su lengua "natal".

Puedo ver que mi hermana planeó todo con detalle, ¿cierto? Me gustaría ser yo quien maneje y esté a cargo del resto, puede retirarse ―le tendió la mano para que le diera las llaves―. Será nuestro secreto.

El conductor no dijo más y le dio las llaves.

Velkommen til Norge*, Ms. Volkova ―le dio la bienvenida, y se retiró.

―¿Qué le dijiste? ―preguntó Ruki.

―Que hizo un excelente trabajo, al parecer tenemos que movernos por nuestra cuenta ―giró las llaves en su dedo―. Yo soy quien vivió aquí, así que es mi deber guiarte ―se subió al auto.

Ruki se quedó confundido y entró, cerrando la puerta miró a Verónica con desconfianza.

―¿Manejas?

Ja* ―asintió―. Relájate, soy una conductora responsable y entrenada rigurosamente.

Encendió el carro y comenzó su búsqueda. Tomó el sobre de Lena y vio la dirección. Cuando se adentró al bosque bajó la ventana, aunque estuviera lloviendo, y tomó un gran respiro. Cerrando sus ojos.

―Es increíble que el aroma siga siendo tan familiar... ¿no te encanta? El olor a tierra húmeda y césped virgen.

―Sin dudas mejor que el de la contaminación y sangre humana.

―Eso sí ―sonrió.

Después de una hora Ruki comenzó a sentirse algo agobiado, la ciudad quedó atrás, al igual que las casas de las afueras. ¿Qué tan lejos iban?

―¿Estamos en la dirección correcta?

―Suplico que mi amo sea paciente y se relaje, Yulia disfrutaba de los lujos privados, puedo decir. La lejanía con la ciudad tenía un significado, no ser descubiertas.

―¿Por los humanos?

―Ujuh, aunque de ellos no se preocupaba mucho, más bien por los fundadores y Karlheinz. Cuando eres conocido en el mundo es más sencillo dar con cualquiera, Yulia quería evitar eso. Pero Karlheinz nos encontró años después y, bueno, hubo muchas mudanzas desde entonces.

―¿Karlheinz te encontró? ―Ruki sintió amargura.

¿Sabía que ella estaba viva y nunca les dijo a ellos? Les hizo creer lo peor sabiendo que no era verdad.

―Hay muchas cosas que Karlheinz ha hecho con fin de cumplir sus objetivos, no te sorprendas.

Y detuvo el auto. Ruki pasó de Verónica al parabrisas, y detrás del cristal empañado y gotas corredizas había una pequeña cabaña. Verónica bajó, y él la vio caminar hacia de pequeña choza de madera. Y subir las escaleras húmedas e hinchadas por el clima y el tiempo. Crujían. Esperaba que abriera la puerta y se adentrara a sus recuerdos. Pero no lo hizo. Se quedó quieta contemplando la puerta desgastada.

Ruki bajó del auto y apareció detrás de ella. En la puerta estaba tallado "Volkova familie*". Tal vez ella realmente no estaba lista para volver a ese lugar. Ruki puso su mano en su hombro y ella asintió lentamente, dando permiso a abrir la puerta. Y lo hizo.

Dark Hearted |Diabolik Lovers| Español Donde viven las historias. Descúbrelo ahora