Dark Hearted |Diabolik Lovers| Español

Vive

Narra Scarlett:

Llegué a la mansión de los Mukami y toqué la puerta, fue Ruki quien abrió y me dio el paso. Entré.

―¿Sabes lo que estás haciendo? Estás perdiendo el tiempo buscando caridad―me dijo.

Sabía que perdió sus memorias pero seguía siendo el mismo. No se repetirá lo de aquella noche, cuando al haber salido del comedor Ruki me siguió y tendió un pañuelo después de verme toser sangre, y me dijo que sólo la lastimaría, sé que será así pero si ambas queremos estar juntas nada nos separará.

―No busco caridad ―respondí―. Q-quiero dar amor antes de no poder hacerlo...

Subí a la habitación donde estaba Eliza, ella estaba mal sentada en la cama con su platillo a medio comer. Masticaba lento, pensativa, puse mi mejor cara.

―¿Rico? ―le pregunté.

―Scarlett...no te oí entrar.

―Pensé que seguías dormida ―me senté frente a ella y con la manga de mi blusa limpié su mejilla que tenía un arroz.

Eliza me vio como si fuera a llorar, quisiera que lo hiciera, siempre se contenía demasiado.

―Sin ti, ¿qué haría? ―me preguntó.

―Seguir ―respondí―. Es fin de semana y Ruki-san me dejó quedarme así que... ¿Qué cosas haces los fines de semana?

―No quisieras vivirlo, en serio ―me contestó―. Podemos andar en la piscina, leer... o podrías enseñarme a cocinar ya que no sé hacer más que té, café y chocolate caliente...ah, y cereal.

―Me parece bien, ¡vamos!

―Hey...pero antes, ¿un baño? Nos vemos del asco ―me dijo tapando su nariz.

―C-cierto... ¿el baño?

―Te llevo ―terminó su desayuno-comida y se deshizo de las sábanas. Caminaba un poco ladeada pero logró dejarme a la puerta del baño―. Después de ti me baño yo y comenzamos, ¿vale?

―V-vale...no tardo ―cerré la puerta.

Era un baño lujoso y agradable, disfruté cada segundo en ese jacuzzi.

< Mientras Scarlett tomaba la ducha, Elizabeth fue a la habitación de Ruki, tocó la puerta un poco temerosa y esperó a que le abriera. No fue así. Era sencillo abrir la puerta y empezar a hablar pero ella sabía que no era lo mejor que podía hacer, mucho menos con Scarlett en la mansión. Regresó a esperar a Scarlett, pensando en por qué Ruki la evitaba tanto. >

Fue glorioso, era agradable el espacio y el vapor. Me vestí mis jeans claros y una blusa holgada de manga tres cuartos de tonos morados y blancos junto mis vans blancos.

Cuando salí de bañarme vi a Eliza con una cara por los suelos, triste de nuevo.

―¿Estás bien? ―le pregunté.

―Sí...―me contestó. No le creía―. Oh...no había visto tu collar antes ―dijo mientras lo miraba―. Es muy tú ―sonrió.

―Uh...gracias, era de mamá y hasta hace poco empecé a usarlo...¿te sientes bien?

―Sí pero sigo muy débil y...no quiero caerme en plena ducha así que, ¿podrías ayudarme?

―C-claro...uhm sí entremos ―me sorprendió, pero no podía negarme.

Ya dentro del baño la ayudé a desvestirse. Le quité sus calcetas y su camisa del uniforme... No pude evitar ver con incredulidad su cuello y todas esas perforaciones sobre el , su clavícula y flancos. Lo demás estaba vendado. Eliza tenía la vista al suelo, avergonzada. No paré y dejé que la falda cayera al suelo. Sus piernas estaban igual, repletas de esos pares de orificios. Me voltee para que terminara de desnudarse y se quitara esas vendas, esperé hasta que ella misma entrara al jacuzzi. Al escuchar el agua en movimiento me acerqué a ella, que estaba sentada mirando a la nada.