- Capítulo Cincuenta -

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[ Dougie’s POV ]

Me encontraba acostado boca arriba sobre mi cama, lo único que se escuchaba era el sonido de las agujas del reloj avanzando. Las horas pasaban y yo aún no podía dormirme, simplemente no podía. Lo único que tenía en mente en estos momentos era que en pocas horas estaría en el aeropuerto despidiendo a mi novia y a su pequeño bebé, quedando como un estúpido al ver como el amor de mi vida se iba en un avión. Me sentía como el novio de la protagonista de la canción de John Denver, “Leaving on a jet plane”, Joanna se iría y yo no sabría cuando volvería.

Me senté sobre la cama y fijé la mirada en el reloj que estaba a mi lado, eran las 4:25 am y no sentía sueño alguno, sacudí mi cabeza ya desesperado, busqué el control remoto de mi televisión y la prendí, si no podía dormir entonces vería algo de televisión para poder entretenerme. Pude pillar una película que hace tiempo no veía, “Footloose”, lo que hizo que las horas pasaran más rápidas. La película terminó a las 6. Una buena hora para levantarme y servirme una taza de café. La verdad es que necesitaría más para poder mantenerme despierto todo el día.

Después de mi desayuno, donde bebí dos tazas de café, decidí ir a darme un baño en el jacuzzi, eso me ayudaría a quitar ese nudo que tenía desde hace días dentro de mi garganta, aunque, ¿A quien trato de engañar? Ese nudo no se irá con un baño de burbujas y sales. Ese nudo no desaparecerá por mucho, mucho tiempo.

Estaba en lo cierto, el baño de burbujas me había ayudado a poder relajarme, pero como también lo había dicho, el nudo no desapareció. Después del baño me vestí rápidamente. Era increíble lo rápido que habían pasado las horas, había estado más tiempo de lo que pensaba dentro del jacuzzi. Eran ya las diez de la mañana.

Se me hizo imposible no contar con los dedos cuantas horas le quedaban a Joanna en Inglaterra, la respuesta: Nueve horas, el vuelo de Joanna salía a las siete de la tarde.

.

Bajé del auto y caminé hasta la puerta de entrada tocando así el timbre, esperando por respuesta, la cual llegó a los pocos minutos, Tom estaba parado frente a mí.

—    ¡Poynter! — gritó extendiendo sus brazos y me abrazó riendo — Que lindo que vengas a verme — rodó sus ojos haciéndome pasar.

—     Claro que te vine a ver a ti, amor — reí cambiando el tono de voz y él se unió a mi risa.

—    Par de gays — se escuchó la voz de Joanna junto a carcajadas a nuestras espaldas.

Tom y yo volteamos al escuchar su voz, sonreí al verla asomada por la escalera, ella correspondió mi sonrisa y bajó los pocos escalones que le quedaban acercándose a mí  hasta rodearme el cuello con sus suaves brazos. La abracé rodeando su cintura y la levanté dándole un corto beso, lo que hizo que ella soltara unas pequeñas carcajadas.

—    Los dejo solo, par de enamorados — sonrió Tom y caminó en dirección de la cocina, desapareciendo por una puerta.

—    ¿Tuviste una mala noche? — preguntó Joanna mirándome mientras pasaba su pulgar por debajo de mis ojos. Asentí cerrándolos — Se te nota — rió muy bajo y besó mi mejilla.

—    ¿Y Zachary?

—    Está con Carrie — sonrió tomando mi mano y caminando escaleras arriba.

Entramos a su habitación, habían bolsos cerca de su cama, lo que hizo que me volviese a acordar que en pocas horas ya no la tendría junto a mí.

—    No, no.

Joanna me miró alzando una ceja.

—    ¿Qué te pasa?

—    ¿Qué? Nada, nada — respondí rápidamente.

Ella siguió mirándome con su ceja alzada y luego se encogió de hombros. Me miró mordiendo un poco su labio inferior y soltó un bufido.

—    Sé lo que piensas Dougie y la verdad, tampoco dejo de pensar en lo mismo.— respondió mirándome — Nunca vine con la intención de enamorarme, pero aquí estoy, total y locamente enamorada de ti — soltó una leve carcajada al admitirlo.

Escucharla decir eso me hizo sonreír, pero no fue una sonrisa del todo de felicidad, también tenía tristeza reflejada, Joanna me sonrió de la misma forma, la tristeza en su sonrisa se podía notar a muchos kilometros.

Little JoannaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora