Había gran distancia entre la Comarca e Ithilien así que decidí visitar los lugares en los que había vivido mi pueblo.
Desde Bree llegué a Rivendel, recordé al pueblo de Elrond que por tanto tiempo había vivido allí, en ese lugar ahora desierto, Reino de hierbas y hogares vacíos...Paseé entre las casas, parecía una ciudad dormida que esperaba al alba para levantarse de nuevo y que los niños volvieran a correr entre sus muros.
Me situé en medio del salón al aire libre que había acogido al consejo, los ecos de las voces de los sabios aún retumbaban en los tronos de piedra.
Proseguí mi camino y encontré a algunos renegados que regresaban de tierras lejanas, como muchos habían partido no quedaba nadie que les negara la entrada en ningún sitio.
-Podríais vivir en Rivendel, una ciudad tan antigua y hermosa no debería derrumbarse sola por el paso del tiempo.- les propuse alrededor de una hoguera- así tendríais un buen cobijo y ella no se cansaría de escuchar canciones de vuestras bocas.-
-Tiene razón señor, reconquistaremos las tierras de nuestros antepasados, ahora habitadas por hierbajos y bestias y le devolveremos la alegría de antaño.-dijo uno de sus líderes.
Eran cerca de cuarenta hombres, casi un centenar si se contaba a mujeres y niños, serían suficientes para habitar allí muy a gusto, hasta que el llamado del mar se les hiciera irresistible.
El mar.
No me lo había podido sacar de la cabeza desde que lo viera en las guerras del anillo. Tenía la sensación de que al otro lado de aquella cortina de agua estaba toda la felicidad que podría tener.
La única razón por la que no había ido a despedir a Gandalf, a Bilbo y a Frodo era que si me hubiera acercado tanto al mar nunca habría regresado.
Tardé un año entero en llegar a mi casa, iba solo... así que no había nadie que me hiciera andar más rápido, pasé por Lórien "la deshabitada" y por muchos otros lugares ahora vacíos.
Soledad.
El eco de esa palabra se oía por todos los valles y todas las colinas.
El tiempo de los hijos mayores de Ilúvatar, (nosotros los elfos) se acababa.
Volví a casa con demasiado tiempo para pensar.
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¿Y qué pasó con Legolas?
Fanfiction¿Nunca os habéis preguntado qué pasó con aquel elfo hermoso que acompañó a Frodo Bolsón en su difícil misión? Bueno, pues aquí se relatan esas increíbles aventuras que vivió Legolas Hojaverde, Príncipe del bosque Negro. Leed y sabed más.