-¿No harás lo que te dijo?.-Preguntó Mayra a Nadia.
-Escucha...- la interrumpió y secó sus lágrimas.- Iré a la policía y diré todo... Así de simple.
Mayra bajó la cabeza.- Tienes razón, es lo mejor...
—Si van a la policía, comenzará una investigación, la cuál llevará a Brown y lo pasado conmigo... Eso lo llevaría a la cárcel.— pensé.
- ¿Luis?.- preguntó Alice.-¿Estás bien?...
La miré y después a Valeria que iba llegando.- Necesito hablar con todas.- interrumpí el saludo de ella.
-Oh... Por supuesto, pero... ¿Pero saben que les pasa a las parlantes?.- los señaló con el índice.- Ha sido bastante raro lo que pasó.
Fruncí el ceño.- Si, pero en serio necesito hablar con ustedes.- miré a mi alrededor.- pero en otro lugar.
-Vamos a las bancas que están cerca del salón.- opinó Valeria.
-¡No!.- la interrumpí.- Tiene que ser fuera de la escuela, al parecer...Las paredes escuchan.- volví a fruncir el ceño.
Todas asintieron.
Comenzamos a caminar a la salida cuando Isaac se acercó a mí.-Luis, ¿No entrarás a las siguientes clases?.- preguntó con su voz apagada.
Me rasqué la cabeza.-No, no creo entrar...
Miró a las demás pero con Nadia agachó la cabeza.- ¿Ellas también irán contigo....?
Las miré y asentí con la mirada. -Sabes que somos un equipo...-¿Luis?.- interrumpió Nadia.- Deja al taradito y muévete, ¿Si?.- frunció el ceño al ver a Isaac.
Lo miré directo a los ojos.-No le hagas caso - susurré y guiñé un ojo.- No debes de tenerle miedo...
-¿Y por qué susurras?.- me interrumpió.
Nadia me tomó de brazo y llevó hasta con ellas, ya no pude responderle a Isaac.
-Deberias dejar de hablar con el.- me dijo Nadia.-¿Por qué te cae tan mal?.- pregunté.- Nunca te ha hecho algo...O a alguien.
Pensó un poco, pero nunca me respondió.- ¿A dónde vamos?, Debes estar consciente que si hablaré con el padre de Mayra.
Jadié y me solté de ella para verla frente a frente.- ¡No!, No puedes hacer eso, Nadia...
-Entonces iré con la policía...¿Crees que no sé lo que has hecho?.- alzó una ceja.- Tus celos con Brown están a flor de piel.- rió y volvió a sujetar del brazo para caminar hasta con las demás.- No sé qué tanto hayas hecho... Pero debes atenerte a las concecuensias...
-Brown iría a la cárcel...
-Si.
-El no tiene la culpa, no quiero involucrarlo... Nadia, buscaremos una solución, tenemos que saber quiénes son los que envían los mensajes.
Frenó un momento y me miró.- "¿Quienes?".- recalcó mientras fruncia el ceño.- me soltó y se cruzó de brazos.
-Si, son "Quiénes".- continúe caminando.
Saliendo de la preparatoria, Valeria nos llevó en su auto hasta Tibiego y entramos a una cafetería cercana para poder platicar mejor.
Después de contarles lo sucedido con Brown y la razón por la que no quiero que vayan con la policía, estaba claro que un debate estaba a punto de estallar.-Luis, ¡Es un maestro!.- me gritó Valeria. Bajé la cabeza.
-¿Pero qué solución das?.- interrumpió Mayra.- ¿Y qué si Nadia no hace lo que la persona de los mensajes quiere que haga? Es... Es confuso.
-Son "Quiénes"- interrumpió Nadia y me miró.- Diles...
Levanté la mirada.- Por lo que he visto, son dos personas quiénes envían los mensajes.
-¿Por qué lo dices?.- preguntó Valeria.
-Por qué un día me llegaron distintos mensajes, ninguno concuerda con el otro y más aparte, la manera de escribir era distinta... La persona que les envío los mensajes a Mayra y a Nadia es alguien mayor, alguien... Alguien que puede ser más peligroso.
-Eso es muy estúpido.- interrumpió Valeria.- ¿Cómo vas a saber si son más personas solo por eso?.
-Oye, tu te diste cuenta que era yo cuando envié el mensaje que nos viéramos en el salón.
-¡Si, pero supuse que sería uno de todos ustedes!
-Cómo sea, yo sé que es alguien más...
-Yo también creo que es alguien más.- dijo Nadia.- Pero ¿por qué nos quiere joder a nosotras? Disculpame, Luis, pero quien se cogió a Brown fuiste tú.
La miré, fruncí el ceño.- No tuvimos relaciones.
-Ay, ajá.- interrumpió.- Y le sigo dejando cartas a Santa y me asusto en la oscuridad, ¿No?.
-Si te asustas en la oscuridad...- le susurró Valeria al oído.
Nadia la miró frunciendo el ceño.-¡Era solo un ejemplo!.
-Uy.-regresó a su capuchino.
-Okay, okay...- tomé un poco de aire y exhalé .- No sé por qué las quiere joder, no sé si ésta persona habla en serio... Pero sé que si nos unimos podrémos descubrir de quién se trata.
-Otro asunto.- interrumpió Mayra.-¿Cómo mierda se enteró de esa parte de nuestras vidas? Entonces es alguien que conocemos.-Se levantó un instante de su asiento y recargó sobre la mesa.- Y lo más seguro es que esté sentado o sentada con nosotros.- nos miró uno a uno.
-No digas estupideces, Mayra.- la interrumpió Nadia.-Eso es algo que nadie sabía.
Bajó la cabeza y asintió.- bueno, tienes razón en eso... Jamás le había dicho del todo...Nadia me miró.- no delataré a Brown, pero tenemos que apresurarnos a descubrir quién es esa persona, ¡solo en cuatro días!
-¿Por qué cuatro días?.- preguntó Valeria, miraba a Nadia.
-¿Cuatro días?, Solo cuatro porque.- nos mostró su celular, abierto en mensajería nueva.- Me llegó un nuevo puto mensaje diciendo que tengo cinco días sino Daniel se enterará....- alzó una ceja.- Entonces, hay que movernos, perras.- se levantó y sujetó su bolso.
Y...mi celular comenzó a vibrar, era una llamada pero esta vez de un numero desconocido. Lo miré, escuchaba mi tono y sentía como mis manos temblaban al mismo tiempo que miraba alrededor, pensando en quién podría ser.
Pensar que nos pueden hacer algo, que alguien nos ve...Esto no era lo mismo a cuando era chico y enviaban cartitas diciendole a una niña que me gustaba. No siempre he sido gay, me hice gay...
A final de cuentas, todo me lleva a un solo sentimiento. Y vaya que yo sé de sentimientos...
Éste es muy conocido, temido, odiado... Idolatrado por otros...-¿Contestarás?.- me preguntó Mayra mientras sujetaba del hombro.
La miré directo a los ojos y respondí con una voz seca y cortante:
-Tengo miedo...- El miedo se crea por lo desconocido, contesta y ya no lo será...
Miré nuevamente mi celular...Y contesté la llamada.

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Mr.B
Teen FictionUn secreto puede dañar tanto cómo un golpe, herir cómo un cuchillo o matar como una bala. Depende de cuándo y cómo lo uses. Cada uno tiene un secreto,¿Qué pasaría si son revelados?... ¿Cuantos morirían por mantenerlo? -Pierdeme el respeto. -El... El...