-No, gracias.- respondí a mi madre que me ofrecía un plato de caldo de pollo para comer.
Jugaba en la consola, era una tarde de sábado, todo iba tranquilo...
-Luis, tu celular...- me susurró mi hermana. La miré y lo tomé.
Llamada entrante: Joel.
Vaya, es raro que me marque en sábado...
Y por un instante, el atardecer, el frío que había en la sala y la llamada de éste...me hicieron recordar la razón por la cuál...
Recuerdo de Luis:
Un mes atrás...
- Creo que es hora...- dije a mi mismo, me miraba en el espejo.- Vamos, Luis, tu puedes decirle a tu hermana... Se irá...
-¿Luis?.- preguntó mi hermana mayor mientras tocaba a la puerta.-Apresurate o cerrarán el banco...
Di media vuelta y abrí.-Ya voy.- sonreí.
Arqueó una ceja.- Muy bien, vámonos...
Salimos de su oficina, llevaba su bolsa y yo ayudaba con un portafolio bastante pesado.
Caminábamos al auto cuando pregunté:-¿Si te quieres ir?
-Vaya, en ésta semana me han preguntado eso un millón de veces.-me miró
-Y has contestado un millón de veces ¿qué?...
Me miró y sonrió ligeramente.- Me duele dejarlos, toda mi vida está aquí en Jalisco, así que será muy difícil...
-Oh...- miré el semáforo que se ponía en verde.- Hay que cruzar.- le dije.
Íbamos camino al banco, yo iba en el asiento del copiloto y ella conducía.
No sabía si ya decirle...¿Qué pensaría de mi?.
Sé que me apoyaria, pero a veces suelo equivocarme.-¿Qué tienes?.- me preguntó.- Haz estado muy callado.
La miré.-Es que...
-¡Me vas a extrañar, estúpida!.- me interrumpió, suele jugar con esa clase de palabras.
Reí.- Claro...pero...te tengo que...
-¿Qué?.- pausó, miró por los espejos para ver si podía dar vuelta.
No sabía... algo me decía que aún no era momento...no lo es...no no no. El que ella sepa de Joel. Aún no.
-¿Luis?.- volvió a preguntar
Regresé de lo que pensaba.- Ah... sólo...quiero decirte que espero y te vaya bien, y que sabes que cuentas con todos en caso de que algo salga mal...
Me miró y sonrió.
Llegando a casa encendí el WiFi, rápidamente llegaron mensajes de Joel.
Joel:
Iré a beber con unos amigos, ya sabes... Marco, Alejandro y José.
Vaya, no me gusta que Joel dañe tanto su salud... Le he dicho que ya no lo haga tan seguido... Cada fin de semana es lo mismo...
Respondí:
¿Te puedo llamar?
Minutos después, tenía la llamada entrante de éste.
-¿Joel?.- escuchaba mucho ruido del otro lado, música de banda.
-Shi...¿Cómo te fue con tu hermana?
-Ammm...- salía de la casa.- Me fué bastante bien, y veo que a ti también.
Rió.- Si. Vente a beber conmigo.
-Sabes que no me gusta eso.
Escuché gritos de unos chicosa lo lejos que le llamaban.
-Andale...no me dejes... así.
-Prefiero un café.- sonreía a pesar que no me veía.- Por el momento diviértete con tus amigos, solo no tomes mucho,¿Si?
-Shi...
-Bueno, entonces te parece si.- lo escuché jadear
-¿Bueno?.- dijo una voz ajena.- Hey, compa, la neta ya deja en paz a Joel, ahorita tiene cosas más importantes qué hacer.- colgó la llamada.
Miré mi celular. Sentía... sentía...
-¡Hijo de toda su repu** madre!, ¿¡Quien se creé ese pendejo para decir eso!?.- gritaba en silencio, pues mi hermana y madre podrían escucharme.
Miré Whatsapp y Joel estaba en línea.
Yo:
¿Qué carajos le pasa a tu amigo? Joel, eso me emputó.
Joel:
Pero el tiene razón. La neta me caga que me estés vigilando a cada momento. Es muy cotidiano contigo.
Ya valió madre... :)
Yo:
¿¡Sabes qué!? Quédate con tus putos amigos de mierda, siempre los prefieres a ellos... Y me empu** que aún yo deseándote suerte y te pones en ese plan.
Se desconectó y apagó el celular. Lo supe por qué intentaba llamarle.
***********
- Luis, ¿no vas a contestar?.-me preguntó Melissa.
Reaccioné y miré el celular.- Joel...
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Mr.B
Teen FictionUn secreto puede dañar tanto cómo un golpe, herir cómo un cuchillo o matar como una bala. Depende de cuándo y cómo lo uses. Cada uno tiene un secreto,¿Qué pasaría si son revelados?... ¿Cuantos morirían por mantenerlo? -Pierdeme el respeto. -El... El...