Capítulo 26

7K 455 83
                                    

Lauren estaba sola en su camerino. Sola. Literalmente sola en todos los sentidos posibles.

Si tendría que definir estos últimos años de su vida en una palabra sería… caos. Un caos total.

Habían pasado ya cuatro años desde el día en que su padre no despertó jamás. Desde el día en que dejó de ser la persona que era. Habían pasado dos años desde que Camila le había dicho que sí a su pedido y luego había desaparecido de su vida. Habían pasado cuatro años de una Lauren que no se reconocía ni ella misma. Pero ¿A quién mierda le importaba? A nadie, por supuesto.

O eso creía ella.

¿Que harías si algún día te llaman diciendo que tu padre falleció cuando se supone que aún no era el momento? ¿Qué harías si sientes que tu vida llegó al momento en el que no puedes ni contigo mismo? ¿Qué harías si tomas una decisión equivocada y pierdes a la persona que más apoyo te dio siempre? ¿Qué harías si te sintieras completamente sola y perdida? Seguro buscarías la manera de seguir adelante, de seguir bien, mejor, porque aún tienes familia, amigos, una carrera y miles de personas en el mundo pendientes de ti. Pero a Lauren se le olvidó todo aquello.

Todo comenzó aquel día en el que fue avisada que Mike había dejado de respirar estando dormido. Al menos se había evitado sufrir tanto, ¿no? Pero a Lauren le parecía injusto. No lo aceptaba. ¿Por qué él había dejado de respirar permitiendo que le arrebataran sus últimos meses juntos? ¿Cómo? Era una puta pregunta sin respuesta, una que Lauren nunca tendría y cada vez que pensaba en eso terminaba mal. Muy mal.

La pérdida del único hombre que amó en su vida la había dejado desbastada. Sí, esa era la palabra y en todos los términos posibles. Había dejado a una chica triste, desolada, cansada, harta… y destruida. Los primeros meses habían sido los más difíciles y Camila había estado ahí a su lado, había estado cuando necesitaba llorar, cuando no podía dormir, cuando estaba de mal humor, cuando a veces sonreía, había estado cuando simplemente necesitaba estar entre los brazos de alguien, había estado para abrazarla cuando la gente la presionaba mucho, cuando salía llorando de algún aeropuerto, cuando debía trabajar. Camila había estado cada segundo durante dos años en los que Lauren dejó de ser Lauren. Había soportado su mal humor, su tristeza, su dolor, el querer estar sola, había dejado que la necesitara, muchas veces la apartaba, muchas veces le había dicho que se fuera, que la dejara en paz, muchas veces le había pedido perdón por ser así, le había pedido que se quedara en la noche y más de una vez terminaba llorando y enojada gritándole que se vaya sin motivo alguno. Camila había estado allí soportando sus ataques de ira, de tristeza y enojo contra el mundo. Había soportado incluso más de lo que podía pero seguía a su lado.

Estuvo allí hasta que Lauren le dijo que lo mejor sería terminar con la relación, quizás podrían intentarlo más adelante o quién sabe, quizás una semana más tarde estarían juntas de nuevo, pero aquello cada vez iba peor. Camila tenía sentimientos que estaban siendo golpeados constantemente por una Lauren dañada.

Así que cuando las dos se sentaron a hablar nuevamente decidieron que era momento de dejar las cosas como estaban. Es que ninguna podía más, Camila no lo soportaba más y Lauren tampoco, no soportaba hacerle daño. No lo merecía.

Pero ahora se arrepentía y era tarde. Camila le había prometido no dejarla sola nunca a pesar de todo y aquellas palabras valieron solamente por algunos meses, después todo se convirtió en llamadas, luego en mensajes, estos eran cada vez menos y hasta que llegó el momento que ninguna recibía nada de la otra.

A veces Lauren se preguntaba cómo había permitido que todo aquello pasara. La respuesta era la misma en su cabeza “Te dejaste estar por el dolor, te hundiste en ti y solo te importaba estar enojada. Olvidaste que tenías una persona que te amaba a tu lado.” Aquellos pensamientos eran otro motivo que la dejaban en la ruina nuevamente.

Brands {Camren}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora