Te necesito, ¿Y tú?

Mi parte favorita

-¿Estás seguro de esto?- estábamos a punto de comenzar la conferencia a las afueras de la clínica .

-Serán sólo unas cuantas preguntas, Jones- le sonreí y salimos frente a los periodistas.

Lo primero que sentí fue la luz de las cámaras y el flash penetrando mis córneas, aparte de oír todos los gritos de la prensa intentando ser los primeros en obtener una respuesta de mi parte. Alcé mi mano para que entendieran que quería hablar y que para ello necesitaba de que se callaran, así lo hicieron.

-En virtud de las circunstancias que estamos enfrentando como familia, solicito el mayor respeto de su parte como encargados de entregar la información adecuada y fidedigna a todo el país- hice una pausa-. Lamento comunicarles la muerte del Agente William Benson en el terrible accidente de hace unas horas atrás; la familia del agente ha sido informada y el Gobierno se está encargando de todo lo necesario para otorgarles una digna sepultura. Es mi deber reconocer ante todos que el agente Benson murió cumpliendo con su misión, sellando el testimonio de su lealtad con su propia sangre al anteponer la vida del resto de los pasajeros por sobre la suya, un acto heroico, del cual estaré eternamente agradecido. A parte del agente Benson, mi familia iba acompañada por el agente McMillan, quién ha sobrevivido y se encuentra actualmente en recuperación, también destacamos su valentía al reaccionar en un momento tan determinante y seguir con las instrucciones de su superior.

En cuanto a mi familia- tomé un sorbo de aire-, mi esposa Emma y mi hijo, se están recuperando progresivamente y, al igual que el agente McMillan, se encuentran a salvo. A los ciudadanos estadounidenses les quiero decir que no se permitirá que un accidente como éste quede a la deriva, que el agente Benson recibirá la misma justicia por la que luchó toda su vida y que se tomarán acciones legales para determinar si es que hay culpables, y de ser así, pagarán por ello- concluí-. Este es el momento para las preguntas- luego de un segundo los periodistas comenzaron a alzar sus brazos y a decir preguntas.

-¿Se siente culpable por lo ocurrido?- preguntó una periodista que había visto en otras entrevistas.

-Todos tenemos un grado de culpa- dije secamente.

-¿Por qué es el FBI quién se ha encargado del caso y no la policía local?- intervino alguien más.

-Al estar involucrado un oficial Naval se considera un caso federal.

-¿Hasta cuando tendrán arrestados a nuestros compañeros?- preguntó con amargura un periodista.

-Hasta que se tengan sus declaraciones y se corroboren.

-¿Se ha comunicado con el Presidente?

-En efecto.

-¿Qué le ha dicho?

-Lamenta mucho la situación en la que se ve involucrada el país y envía sus condolencias a la familia Benson.

-¿Es cierto que su esposa planeaba dar declaraciones antes del accidente?- dudé en responder.

-Jack- me susurra Killian-, debemos irnos, es Emma.

-No más respuestas. Con permiso- me volteé y comencé a caminar ignorando el griterío que se había formado a mi espalda-. ¿Qué ocurre?- pregunté cuando entramos al edificio.

-No lo sé, no me lo quisieron decir, pero los doctores necesitan verte.

-Esto no es bueno- afirmé corriendo al elevador que acababa de abrirse.

Killian y el agente me siguieron y abordaron el ascensor conmigo. Los nervios comenzaron a invadirme y los niveles de adrenalina se elevaron, quería correr, salir lo antes posible de ese pequeño espacio y llegar hasta donde Emma. Quería creer que estaba bien, pero sabía que no era así, supongo que son cosas que ocurren cuando amas a alguien y sus almas se conectan.