Emma pudo disfrutar con sus amigos del baile y luego despedirse de todos cuando su padre fue a buscarla.
Su hermano Neal, que tenía un año menos que ella, últimamente estaba compartiendo mucho con los otros jóvenes, incluyendo a Killian. Lo cual le molestaba un poco a Emma, ya que Neal decía que Killian era un chico genial y siempre le alababa, incluso en una ocasión le dijo que podrían ser una linda pareja su hermana y su nuevo amigo.
Emma actuaba muy bien, se limitaba a hablar de sus sentimientos hacia Killian solamente con su amiga Regina. Ella le aconsejaba siempre, incluso le maldecía cuando Emma no podía. Su amistad había pasado por altos y bajos pero ambas los lograron superar. En cambio, Neal no sabía que ella seguía enamorada de Killian, para él solo existió un momento en donde Emma se sentía atraída por el joven Jones.Al llegar a casa, Emma le envió un mensaje a su amiga y le dijo todo lo ocurrido en el baile, lo genial que lo pasó, las veces en las que tuvo la oportunidad de compartir con Killian y que bailó con otros jóvenes. Regina se sentía feliz por su amiga y orgullosa de que pudiera mantener su actuación.
En la tarde Abie le envió la fotografía a Emma junto con otras, y ésta la envió a Regina."Estaban muy cerca!" Envió Regina.
"Lo sé akhskdsj" Respondió Emma nerviosa.
"Se ven bien juntos"
"Aksjksd" Envió Emma.
Ambas vivían muy cerca, pero muy pocas veces tenían tiempo para verse. En especial luego de que Emma se cambiara de escuela.Era lunes, las 6:25am.
Emma sufría de insomnio y esa noche no se libró. Fue a las redes sociales, ya que no podía dormir.
Sintió como su pecho se contraía y se achicaba, ella lo veía venir. Pero nunca tan rápido. "Killian Jones tiene una relación con Milah Smith".
Se consideraba una tonta por todas las veces que creyó que quizás, en un futuro, podrían ser felices juntos.
Sacó un pantallazo y lo envió a Regina con la frase "Stay Strong" repetida varias veces. Minutos después... Las lágrimas caían de su rostro, lloró hasta que cayó dormida otra ves. Ya eran las 6:50 afortunadamente no tenía clases. Revisó su celular y ahí estaban los mensajes de su fiel amiga.
"Ay malditos" "yo sé que terminarán de todos modos:c" Emma no pudo evitar sonreír por el comentario de su amiga, no quería que terminaran, solo quería que él fuera feliz.
"Yo igual lo sé" "pero eso no cambia nada" respondió Emma aun destrozada.
"Tienes que esperar. Yo sé que te va a necesitar"
Ambas sabían que Killian no la estaba pasando bien y Emma de ves en cuando le enviaba mensajes alentadores, al igual que en persona.
"No lo quiero ver" "me siento más fría" Emma era conocida entre sus compañeros por ser tan fría. No quería que su corazón siguiera rompiendose en pedazos.Ambas volvieron a dormir, estaban muy cansadas, en especial emocionalmente. La amistad que tenían era el salvavidas para ambas.
-Quizás vaya Killian hoy-dijo Neal mientras Emma limpiaba los trastos.
Una punzada de dolor atravesó a Emma.
-Okay-dijo fingiendo desinterés.
-Él es tan cool, nos divertimos mucho en su casa el otro día.
-Ya lo has dicho.La tarde pasó tranquila, Neal se iba a ir desde el gimnasio al cumpleaños de Abie, por ende Emma tendría que irse sola.
Vio la hora: 18:40. "Maldición" pensó, el cumpleaños comienza a las 7 y ella aun no se cambiaba, además debía tomar la locomoción para llegar hasta la casa de la cumpleañera.
Estaba lista, caminó rápido hasta el paradero pero no pasaba el transporte público, eso le enfadaba, le encantaba ser puntual. Veía la hora, 19:15, recién llegó el transporte.
En el camino pensaba, de qué hablar, qué le podría decir, como actuar normal... Todo relacionado con Killian. "Basta, Emma, probablemente ni siquiera vaya al cumpleaños. Es suficiente".
Luego de esa lucha psicológica, se percató de que había llegado a la parada, ahora solo debía caminar unos metros y llegar a casa de Abie.
Al llegar, estaba muy nerviosa, nunca estaba tan nerviosa por ir a la casa de su amiga, era un lugar acogedor y tranquilo; pero todo cambiaba al pensar que quizás él estuviera ahí. Tocó el timbre, y apareció Abie a abrir la puerta.
-¡Hola!- saludó Abie feliz.
-¡Hola hermosa!- respondió Emma.-. Feliz cumpleaños- dijo entregando el regalo que le había comprado.
-Muchas gracias, Emm.
-De nada, Abie.
-Bueno, pasa-dijo indicando el camino que daba hasta la casa.
En eso llega el fiel perrito de Abie, Mono, quien comenzó a oler las piernas de Emma y a impedir su paso. Emma trataba de que Mono la dejara, pero era imposible, iba a entrar por la puerta que conocía de memoria, pero Mono seguía insistiendo.
-Mono, ¡Déjame entrar!.. Por favor, perrito lindo- estaba por abrir la puerta y escucho esa risa "imposible", pensó. Abrió tratando de dejar al perro atrás-Ya basta... Adiós-dijo ganándole a Mono. Entró victoriosa, debía entrar calmada-. Yo peleando con un perro.
Esto provocó la risa de Killian y de Anna, la hermana de Abie. Eran los únicos que habían llegado, por el momento.
-Hola, Anna-dijo acercándose a saludarla-. ¿Cómo estas?
-Hola, Emm- respondió aun riendo-. Bien, ¿Y tú?
-Bien, gracias- ahora se dirigía hacia donde Killian.
-Hola, Emm- dijo el levantándose un poco para saludarla con un beso en la mejilla.
-Hola, Killian. ¿Cómo estas?
-Bien, gracias.
Emma se apartó un poco, sentía como tiritaba todo su cuerpo.
-Hey- comenzó Killian- guardé tu número, pero aun no te hablo.
-No hay problema- respondió Emma alejándose.Caminó hasta donde estaba la madre de Abie y Anna, preparando todo. Comenzaron a hablar de la molestia en la muñeca de Emma y todas la cuidaban de que no hiciera fuerza, pero ella se negaba porque no quería estar sentada ahí sin saber que hacer, temblando de pies a cabeza. Volvió con los vasos, sus manos le temblaban y eso le causaba risa.
-Toma-le dijo a Anna extendiendo el refresco para que ella lo tomara.
-Oh, gracias-dijo feliz.
Luego se volteo hasta Killian, para entregarle el vaso.
-No, gracias- "genial, me duele la mano y no quiere aceptar un vaso" pensaba Emm, aun que sabía que lo hacía bromeando. Le dedicó una mirada amenazante, lo que provocó que el aceptara el vaso.
-Gracias- dijo Killian.
-No hay de qué-respondió Emma triunfante.Luego fue por su refresco y se sentó junto a Anna. Comenzaron a hablar de películas y de trivialidades. En eso, llegan más chicos, entre ellos, Graham, Neal, Robin y Jefferson. Todos saludaron y comenzaron a hablar de cosas de chicos, mientras Emma hablaba con Anna y Abie.
Emma estaba sentada con Killian y Graham en uno de los sofás.
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Te necesito, ¿Y tú?
DiversosEntonces entendí que, sin importar lo que hiciera, si me rompieras lentamente, si me enterraras una daga en el corazón o incluso si lo tomaras en tus manos y lo estrujaras hasta convertirlo en cenizas, seguiría ahí para ti. Emma intenta olvidar sus...