Casados por ley {Justin Bieber} (TERMINADA) EDITANDO.

Cap: 34 ~Hola sexy~

-¿Se puede saber que haces aquí?- gruñí volteando los ojos.

-Emmm, nada-escondió la camiseta de Justin detrás suya.

-Dame esa camiseta.

-Pero...-le interrumpí.

-¡Qué me la des!- le grité.

Como una bala, Melody estiró su brazo entregandome la camiseta de mi novio. Ella se encogió de hombros y suspiró.

-¿Qué haces aquí?

-Pattie dice que te mejores.

Puse una mueca sin saber que estaba diciendo pero después me acordé del plan que nos había dicho minutos atrás.

-Muy bien, ¿algo más?

-¿Puedo hablar con Justin?- preguntó.

Miré por la puerta si Justin ya estaba vestido y en efecto, se estaba peinando delante del espejo.

-Si supongo.

-Gracias -sonrió.

Le sonreí falsa, llamó a la puerta y entró cerrando detrás de sí.

Bufé cabreada y cojí el móvil fijo par para pedir.  Después de unos pitidos, me lo cogieron.

-Servicio de habitaciones, ¿que desea?

-¿Puede traernos algo de comer? Y el mejor vino que tengas para dos.

-Por supuesto,  señorita, en unos instantes estaré allí.

-Gracias buen hombre.

Y colgó. Ni un de nada ni ostias. Me quité el albornoz y me puse un camisón. Solo faltaba Justin y que esa tipa saliera del baño. No me fiaba ni un pelo de esa.

Narra Justin:

Melody pasó después de que le dejara entrar. Ví como cerraba detrás de si y echaba el seguro. Eso me puso nervioso.

-Hola sexy-me saludó.

-Hola Mel-saludé.- ¿Qué necesitas?

-Estuve pensando en que...-sonrió acercandose ami- podríamos divertirnos.

-¿Eh?- sabía de que hablaba, pero quería escucharlo de sus labios, que lucían pintados de rojo.

-Eso, ya sabes... Cuando teníamos 10 años habíamos prometido casarnos juntos y eso implica más cosas... Y aunque no nos vayamos a casar... Almenos podemos divertirnos-acarició mi miembro ppr encima de mis pantalones. Con sus uñas largas, lo araño.

Mis piernas flaquearon.

-Eh, Mel, cielo. Tengo novia y justo está fuera.

-Podemos hacer un trio, si por mi no hay problema. -Bajo el asilla de su vestido dejandome ver su lenceria. Negra. Me encantaba la lenceria negra.

-Para mi y para ella los hay; vamos a casarnos en pocos meses y así no podemos. No podemos engañarnos.

-Nadie se enterará-agarró mis hombros y se subió a mi cintura justo acariciando su sexo con el mio.

Gimió en mi oído mientras rozaba ambos sexos lentamente, haciendome sufrir. No podía evitar, pero tampoco podía engañarla. No. Jamás.

La separé de mi y golpeé su hombro.

-No voy ha hacer lo que me pides. Sueña conmigo y masturbate, pero no voy a tener relaciones sexuales contigo y mucho menos engañando a mi _____.

En sus ojos se notó lo desilucionada que estaba con mis palabras. Abrió la puerta y se fue. Salí y me encontré con _______ encendiendo una vela. Un carro con dos platos tapados con una tapa metalica estaba a los pies de la cama.

Pero ella fue en lo primero que me fije. Su pelo caía en una cascada rizada por su espalda. Su cuerpo, hasta un poco bastante, arriba de sus rodillas, estaba cubierto con un camisón de ceda marrón. Estaba provocadora y parecia a la vez una niña dulce y preciosa. Miró hacia la puerta quejandose en voz baja de lo loca que estaba mi prima.

-Si, sé que está loca, ¿cenamos?

Ella me miró sobresaltada pero al ver que era yo, se relajó.Asintió y se sentó en una silla.

Y compartimos la comida entre besos, risas, y mucho amor.

-¿Vemos una peli? -propuso ella tumbandose en la cama.

-No es mala idea. Haber si hay alguna en la tv.

Nos tumbamos en la cama y como no había nada en la tv, hablamos sobre lo que hariamos al día siguiente.

Cuando no me respondió más supe que se había dormido asi que puse fin a la luz que manaba de una lamparita y me acomodé a su lado, sujetandola en mis brazos y durmiendome.

Narra _________

Un golpe. Otro golpe. Una luz blanca cegadora. Un grito desgarrador. Sollocé. Tenía tanto miedo que lo único que podía hacer era temblar. Mis musculos estaban tensados. ¿Me...Me habían violado?  ¿Cómo Justin había dejado que me pusieran una mano encima?
Miré hacia arriba y me encontré con el rostro del chico que habia besado mi cuerpo y cometido una locura. Le miré con miedo y él solo se rió. Tiró mi ropa a mi cabeza, me encogí extremeciendome. No quería que me tocara de nuevo. No... Por favor...
Colocó sus manos en mi cadera y sin previo aviso,  entró en mi otra vez, cortandome el aire.

Grité desgarradoramente. Me senté en la cama en un abrir y cerrar de ojos. Jadeé y quité el sudor de mi frente. El brazo de Justin aún rodeaba mi cintura. Suspiré. Me tumbé a su lado, lo abracé e intenté relajarme si era posible, pero la pesadilla era reproducida una y otra vez en mi cabeza.