Harry Potter ↑ One Shots ▲Editando▲

▲ 022 ▲ Diggory Cedric

Pedido de
Espero que te guste.

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Nada es para siempre

Rosie Hamilton, novia de Cedric Diggory. Estaba celosa puesto que últimamente su novio se la pasaba "simpatizando" mucho con Cho Chang.

Ahora se encontraba en la sala común de Hufflepuff; su casa. Leyendo un libro.

— Hola —saludó Diggory mientras se sentaba junto a ella

— Hola —contestó indiferente sin quitar la mirada de su lectura

— ¿Qué lees, Preciosa?

— Un libro —respondió ella aún con la mirada en aquellas hojas. El joven hizo un mueca y miró la portada de el libro que leía Rosie.

«The clan of the Cave Bear – Jean M- Auel »

— ¿Sigues enojada?

— Para nada

— ¿Segura?

— ¿Por qué debería estarlo?, No estoy enojada —añadió con un tono molesto, tenía la mirada en su libro pero ya no lo leía

— Creí que estabas molesta por Cho

— ¿Tengo razones para estar celosa?

— No lo creo —aclaró antes de besar la mejilla de su novia, ella o pudo evitar sonreír un poco

— No me convence —dijo ella y se giró a verlo después de cerrar su libro

— ¿Qué debo hacer para convencerte? —cuestionó sonriendo

— No lo se... —La muchacha soltó una risa —Quiero que...

El chico sólo la miró divertido.

— Me traigas dulces de Honeydukes — completó Rosie antes de reír

— Eso no es nada... —Le besó la mejilla — Comparado con que siempre me sonrías. — Ella sonrió

—  Ay...nunca duro ni 2 horas enojada contigo. Eso no es justo

— ¿Te digo que es más injusto?

— ¿Qué? —preguntó Divertida

— Que tú no duras ni dos horas enojada conmigo pero yo nunca me podré enojar con esta chica tan perfecta 

— Eres un tonto —dijo y lo besó

Hamilton estaba sentada, estaba mirando como algunos alumnos ponían su nombre en el cáliz para participar en el torneo de lo tres magos.

Ella tenía una pequeña sonrisa, la misma que se esfumó al ver como su novio entraba a aquel lugar y ponía un pedazo de pergamino con su nombre.

No podía creerlo, ¿De verdad Cedric había decidido entrar a aquel torneo sin haberle siquiera avisado?

Eso de verdad la había enfadado, no un ligero enojo como cuando lo veía con Cho, de verdad estaba furiosa esta vez.

— ¡No entiendo como pudiste hacer esto Diggory! — exclamó Rosie, roja por su enfado. Se sentía preocupada y enojada.

— ¡No es para tanto! —contestó lo más calmado el castaño

— ¡¿No es para tanto?! ¡Pudiste al menos avisarme!

— No lo hice por que sabía que te pondrías así

— ¡Estoy cansada de que hagas esto!

— ¿Qué haga que?

— Que hagas cosas estúpidas sin avisarme. Que te metas en problemas y yo no me entere.

— ¡Por que no quiero que te preocupes! ¡Quiero que siempre sonrías!

— Pues yo no quiero estar contenta siempre —respondió

— ¡Eso! —gritó— ¡Siempre eres pesimista!

— ¡Es muy mi problema! ¡¿No?!

— ¡Siempre eres así y yo intento que seas más positiva!

— ¡Sí no te agrada hacerlo tal vez deberías intentar hacer feliz a otra chica! —el lugar se quedo en silencio por unos segundo

— ...¿De verdad quieres eso?

— Ahora... —lo miró algo asustada y apunto de llorar

— ... —Ambos se quedaron en silencio, un silencio desesperante.

— No me interesa —. aclaró para salir corriendo hacia su dormitorio

Fue doloroso que Cedric fuera con Cho a el Yule-Ball.

Y al final del torneo...

Todos saben lo que ocurrió después...