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Daehyun corrió por las calles del pueblo, era oscuro, estaba agitado, asustado, desesperado. No había palabra para definir lo que sentía en ese momento, tenían el pulso a mil por segundo.
Cruzó el bosque cubierto por nieve a pie escondiéndose de los lobos, corrió entre los árboles y senderos hasta el pequeño pueblo.

Era tarde y probablemente la mayoría estuviera durmiendo ya en sus casas.

No se detuvo y caminó por las calles hasta donde murmullos, risas y tintineos de copas le dieron una señal divina, el bar.

Corrió hasta el bar del pueblo abriéndose el paso entre personas bebiendo y charlando.

Entre la multitud estaba Jimin y observando el tarro medio vacío frente a él.
Parecía como una película donde el personaje emo se iba a beber para olvidar todo.

A su lado Hoseok tratando de consolarlo en una de sus tantas visitas a la friendzone.

–No pongas esa cara larga. TaeHyung no es el único chico.

–No, yo lo quiero. Es... es tan hermoso y yo todo un galán, seríamos la pareja perfecta y envidiable por todos.

–Ya lo creo... -Susurró Hoseok.-

–Si tan solo dejará de huir...

–No te preocupes, ya verás que todo resultará.

–Hoseok, eres un gran amigo, no entiendo como sigues soltero.

–Dicen que tengo gustos peculiares, no entiendo a qué se refieren...

Bebió el resto de su tarro llenando si boca con el familiar sabor a cerveza, iba a pedir otra cuando la música paró llamando la atención de todos.

–Por favor... Ayuda, necesito ayuda –Daehyun tartamudeaba en el centro del bar mirando a todos los presentes una y otra vez.– Alguien debe ayudarme, es TaeHyung

TaeHyung, la palabra mágica para Jimin, su batiseñal.
Se colocó de pie y observó al hombre rogar por ayuda.

–Por favor, lo ha raptado un mounstro.

–Viejo Dae, los mountros no existen.

– ¡Lo ha raptado un mounstro! ¡Deben creerme! Alguien ayudeme

–Yo lo haré.

Todas las personas del lugar miraron hacia la pared... un poco más bajo estaba Jimin, ¿porque el gran Jimin ayudaría a un viejo delirando?

Pero nadie se atrevió a decir nada, ni siquiera Hoseok.
Solo salieron del bar, era tarde, mañana a primera hora irían al rescate de TaeHyung, la damisela en aprietos.

Beauty and the Beast (vkook) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora