Super Human

Capítulo 30.

—Aquí.

—¿Aquí qué? —Preguntó Seo In Guk.

—La ultima vez que las cámaras captaron a Chanyeol fue aquí, saliendo de esta habitación, hay personas en la sala de estar principal en ese momento. —Señaló a varias pantallas. —Aquí igual y aquí.

—El único camino seguro es por el patio trasero, pero ni siquiera ahí está filmado. —El ceño fruncido en In Guk reflejaba perfectamente lo confuso que estaba.

—Escapó por allí, es fácil deducir el camino que tomó si restas a toda la operación los puntos donde se hallaba personal de la casa, iré al patio, esperen aquí por noticias. —El SH había descartado varios caminos posibles menos aquel, se dirigió ahí sin preámbulos.

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Se estremeció de golpe, su cuerpo reaccionó rápidamente aunque su mente no sabía que ocurría alrededor. ¿Qué mierda había pasado? ¿Y por qué mierdas dolía tanto su nuca?

—¿Y bien? ¿Ya estás conmigo o tengo que tomar otra cubeta de agua? —Le costó distinguir la silueta frente suyo, la luz alumbraba prácticamente su cuerpo y alrededor la oscuridad reinaba, probablemente no había ventanas ahí y sin embargo reconoció la voz que se dirigía a él.

—¿Alice? —Titubeó. —Espera, ¿Eres Alice? —Dijo ahora más perplejo y fue en ese instante cuando apenas trató de moverse que notó las cuerdas en sus piernas y manos.

El rompecabezas comenzaba a tener forma y sin embargo había piezas que no encajaban.

—¿Alice? ¿Qué está pasando? ¡Ayúdame!

—¿Es en serio? ¿Aún no entiendes tu situación? —Se acercó un poco a la silla y ahora Chanyeol pudo apreciar su rostro casi indiferente, su cabello ahora era negro y el tono de sarcasmo en su voz le hizo entender que ella no le ayudaría. —Chanyeol, Chanyeol, Chanyeol...—Suspiró fingiendo angustia. —Si tan solo me hubieras prestado atención desde el inicio.

—¡¿Qué?! —Alzó su voz—¿Dices que haces esto solo porque te rechacé? Estás bromeando ¿cierto? —Sus ojos estaban como platos y su boca abierta. —¿Estás loca?

—Por supuesto que estoy bromeando idiota, ¿De verdad creíste que estaba interesada en ti? —El pelirrojo tragó saliva, estaba verdaderamente confuso.

Alice estaba a menos de un metro, pero su aura era totalmente distinta y temía que no saldría de ese lugar ubicado en probablemente, la nada.

—Dios no, ¿Has visto tus enormes orejas? —Dijo en una carcajada nada agradable.—Ah.—Bostezó aburrida.—En fin. —Dejó caer la cubeta al suelo y el sonido metálico hizo eco en todo el lugar. El alto entendió que estaban en alguna clase de bodega, vacía, oscura y lejos de la civilización, eso último deducido por el ruido casi inexistente y por los latidos que alcanzaba a oír de su corazón. —Te explicaré brevemente para que tu estúpido cerebro entienda.

—Alic-.

—Yo—Interrumpió la chica haciendo énfasis al señalarse a sí misma—Mala, tú secuestro, ¿Entendiste? —Chanyeol quiso responder que sí, si entendía, pero no todo, era obvio por los acontecimientos, el dolor en su nuca, el lugar oscuro, las cuerdas, estaba secuestrado si, pero ese no era el punto ¿Por quién? ¿Por qué? ¿Qué harían con él? Esas eran las preguntas a las que Chanyeol quería buscar una respuesta.

—¿Quieres dinero?

—¿Crees que haría esto por dinero? —Alice acerco una silla y la colocó enfrente de Chanyeol para estar más cómoda—¿Sabes si quiera quién soy? ¿Crees que necesito tu dinero?

—¿Entonces qué quieres?

—En realidad no es que quiero yo, si no él.—Respondió casi cansada de aquella conversación.

No muy lejos de oyó como alguien tosía para ser visto más que por cualquier otra razón, los pasos cada vez se oían más cerca y pronto la poca luz comenzó a alumbrar un nuevo rostro en la habitación.

—¿Ahora qué mierda? —Fue lo todo lo que Chanyeol pudo formular.

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Kyungsoo respiraba con atención, o mejor dicho olfateaba. Estaba seguro que Chanyeol había estado parado justo donde sus pies hace tres horas, su olfato no mentía percibía con claridad el olor de su sangre, estaba herido y ahora estaba más seguro de quien estaba atrás de todo lo que estaba ocurriendo, no sabía con exactitud en donde se encontraba su amo, pero sus sentidos no mentían, sabía el rumbo que debía tomar.

No se molestó en avisar al equipo de rescate que esperaba por él en el cuarto de cámaras de seguridad, no podrían ayudarlo.

Tomó las llaves de una de las muchas las motos deportivas y salió en busca de su dueño.

Chanyeol lo había rescatado de sí mismo, ahora era su turno de salvarlo a él. 

N/T: Hola, hola... Me siento culpable por no publicar en tanto tiempo, pasaron varias cosas, perdón chic@s...(? ¿Hay alguien ahí? u.u